El tiempo y la vehemencia que Rafael Correa le dedicó al tema de la Universidad Andina durante el enlace 460 desde La Libertad no parece sino confirmar la determinación del gobierno de desconocer la elección como rector de ese centro universitario de César Montaño.
Pero lo más notable de la referencia que ayer hizo Correa no fue únicamente su nueva advertencia de que si esa Universidad no revisa la elección de Montaño debe salir del país, sino la forma en que se presentó durante el enlace René Ramírez, presidente del Consejo de Educación Superior. Ramírez, precisamente por el cargo que tiene, es el juez que debe resolver la impugnación a la elección de Montaño y, durante la “sabatina”, actuando en condición de obsecuente funcionario de Correa. “Es muy claro y evidente que no se cumple con la norma”, dijo Ramírez luego de que el presidente había hecho una exposición para asegurar que la elección de Montaño es ilegal, según la norma ecuatoriana que dice que un rector debe tener un PHD por una universidad distinta.
¿Con una declaración así de contundente existe alguna posibilidad de que la tesis de la Universidad Andina gane? ¿De que tenga un proceso justo? Evidentemente que no. En términos jurídicos, se podría hablar de prevaricato, pues es innegable que Ramírez adelantó su criterio sobre la materia en que debe pronunciase.
Correa insistió en su ultimátum a ese centro universitario en el sentido de que si no vuelven a hacer elecciones tendrán que salir del país. Pero el ultimátum llegó también de la mano del destemplado desafío de Correa: “Que alguien con sangre en la cara me diga que no se está rompiendo la ley”, dijo Correa eufórico y luego agregó en tono aún más fuerte: “si no les gusta, váyanse a otro país”.
De la intervención de Correa también quedó evidenciado el carácter personal y política que tiene su disputa con la Universidad Andina. Varias veces se refirió al ex rector Enrique Ayala como “maquiavelito de corbatín” y sugirió que había utilizado ese centro de estudios como plataforma para actuar como opositor y pensar en lanzarse de candidato a algo en las próximas elecciones.
Lo que quedó claro, en todo caso, es que su determinación en hacer cumplir su voluntad total en el tema es irrenunciable. “O corrigen esto o se van del país. Al país se lo respeta”, sentenció. ¿Luego de una proclama así el presidente del Consejo de Estudios Superiores podrá decir lo contrario?
Aquí lo que dijo Correa sobre el caso de la Universidad Andina durante el enlace.
Cada vez hay un motivo más para indignarse y tener la impotencia de no poder hacer algo que evite tan inicuo procedimiento que por la fuerza de la prepotencia se va aplicar en la universidad andina. El único consuelo que nos queda es que ya falta poco para que superemos este nefasto desgobierno que hemos sufrido
se acuerdan de Moti y Pescao: Moti, el de Tanicuchi , decía : pegue patrón, pegue patrón, Cualquier parecido es pura casualidad.
Prohibido olvidar el triste episodio de la espol y la “tesis” de Glas: esta boca no es mía y al fin y al cabo, todo está bien: el rincón del vago es válido para hacer “tesis”
Ramirez dicen que solo tiene tercer nivel, pero maneja instituto que exige a todos cuarto nivel.
paradoja sangrienta
Este Ramirez era de la FLACSO????
Creo que el presidente Correa en este asunto de la Universidad Andina, no es que quiere imponer o hacer cumplir su voluntad; lo que veo es que el Presidente Correa lo que quiere es imponer y hacer cumplir la Ley.
ojo, no soy correista pero demos al cesar lo que es del cesar…
Cuándo se tiene a la parentela Ramírez, comiendo en el mismo plato estatal, no existe moral para erguirse con orgullo y decir la verdad. El caretuco mayor, de un grito domina a estos pusilánimes funcionarios públicos dorados. La trenza les amordaza el cerebro y solo piensan en subsistir de las ubres estatales.
Aquí si cabe el estribillo de una canción popular ecuatoriana “…aunque pegue, mate; marido es…” En realidad, que triste es ver lo que es capaz de hacer de las personas el poder, la comodidad, la “fama”, etc. No existe dignidad, sentido común, hombría de bien, valores. cuantos funcionarios, (entiéndase los dos géneros) no estarán con ganas (porque su dignidad así lo exige) de salir pateando las puertas de sus dorados trabajos, pero más, que su dignidad y valores, puede la comodidad y el adulo que reciben, que a su vez ellos lo practican con su jefe!! No hay uno/a solo/a, pero ni uno/a (en la función pública ni afuera) que se faje los pantalones y las faldas para levantar su voz altiva y rebelde, para decirle a este tipo (al Sr. Presidente) cuan equivocado esta. Si anhelo, que pudiera conversar con el excelentísimo al menos 10 minutos 10 y decirle la realidad del país en que vivimos, pero es solo eso, un anhelo, no me lo permitiría lo se.
Ramirez , ya dale gusto a tu patrón, caso contrario de puede sacar del grupo de los ROBOLUCIONARIOS.
Se politizó el asunto? cierto, pero ustedes contribuyen con su tanto. Nombre un nuevo rector y dejen callados a todos
La salida de la Universidad Andina es una prueba más de que el Presidente Correa práctica de manera abierta el dicho “quienes no están conmigo, están contra mí”, dicho que ejecutan, renunciando a toda moral, funcionarios como René Ramírez, conocedores de que si intentan lo contrario terminarán en la calle.
Estoy asombrado al ver a los revolucionarios de la estirpe de Quilapayún hablar de lo andino como “el extranjero” y de que los peruanos y colombianos y bolivianos no pueden burlarse de las leyes del Ecuador. Es increíble como la sola voluntad de Correa les exprime el ya cincuentón cerebro revolucionario y les saca a luz la xenofobia.
A muchos, esto, con razón les provocará indignación. A mi también. Pero, sobre todo, me da pena porque aquí hay una desembozada expresión de zoquetearía que dice mucho de la pobreza que informa el intelecto y la ética de los que tienen en sus manos el rumbo de las instituciones y del país. Y no tienen empacho en saturar la vida pública con sus apetitos mezquinos y personales.