Lenin Moreno prosigue su partida de ajedrez en el interior de Alianza País. Lo demuestra la carta que, con fecha 30 de marzo envió desde Ginebra a Doris Soliz, secretaria Ejecutiva de Alianza País. El pretexto es comentar el “avance de las conferencias ideológicas” que las directivas de Alianza País examinaron, el 31 de marzo, con Rafael Correa en Quito.
¿Dónde está el juego? Alianza País tiene en Moreno un cuadro con buenas cifras en los sondeos. Mejores que las de Correa quien, en privado, no lo traga. Soliz y una parte del aparato tampoco lo ven con buenos ojos. Moreno quiere la candidatura y sabe que una parte del aparato lo apoya. Pero sabe también que ese movimiento, como está, es impotable electoralmente. Quiere cambios (la mayoría de forma como se verá) para, eventualmente, conducir una campaña en la que pueda incluir dos elementos clave para él: continuismo y renovación.
El juego es este: Moreno estira la cuerda midiendo las palabras para no romperla. El aparato –correísta en alto grado– finge no necesitarlo pero, por ahora, le es indispensable. Moreno finge estar lejos, pero no se pierde la movida de una silla en Alianza País. El aparato correísta no lo quiere pero lo mantiene en Ginebra y pide sus comentarios sobre el derrotero a seguir, las orientaciones que marcarán la acción del próximo gobierno…
La carta de Moreno responde a ese statu quo que irá cambiando conforme avancen la crisis económica, el desgaste político de Correa, las definiciones dentro de Alianza País y el calendario electoral. De esos factores dependerán los términos de negociación –o ruptura– de Alianza País con Moreno. Y los acuerdos –o desavenencias– entre él y Correa.
En la nueva carta, Moreno ni cita ni alude una sola vez al gigante de América, como bautizó al Presidente. Se mueve con sagacidad milimétrica en tres terrenos: el militante de Alianza País, el posible actor principal de una batalla futura y el renovador que quiere someter el correísmo a una liposucción. Solo eso.
El militante habla de la ventaja que representa para Alianza País “partir de un país transformado por la revolución”. País con “escuelas, hospitales, carreteras, energía limpia” y una enorme autoestima. Esto es central “para la continuidad y permanencia de la revolución ciudadana”. En la carta da por sentado que el “Estado ha instalado una estructura sobre la cual corresponde actuar al sector privado”.
El posible actor principal reclama “una visión nacional sobre los grandes desafíos estructurales y soluciones integrales” sobre empleo, salud, educación, sector fiscal. Quiere que sepan las necesidades sentidas en cada cantón, cada parroquia y provincia. También de los actores sociales y políticos: mujeres, pueblos y nacionalidades, personas con discapacidad, jóvenes, campesinos, amas de casa, médicos, servidores públicos… Quiere que el movimiento conozca y comprenda sus demandas y les ofrezca respuestas. Quiere, en definitiva, “una carta de navegación, una mirada y comprensión nacional de lo que el país requiere (…)”. Moreno pide evaluar las elecciones seccionales de 2014. ¿Por qué perdieron las grandes ciudades, dónde se consolidaron, qué fallas hubo al escoger los candidatos? Pregunta lo que debe ser Alianza País. ¿Superar la lógica de partido? ¿Verse como un movimiento que abarque las fuerzas progresistas del país? El posible actor es, en realidad, un precandidato que pide lo que se necesita en una campaña: datos, cifras, lista de necesidades hasta por parroquia y definiciones.
El renovador reclama una visión autocrítica e ideas innovadoras. Este punto lo muestra profundamente conforme y leal a la esencia misma del correísmo. Algunos de sus partidarios dirán que es táctico, pues sostienen que él quiere inaugurar la era postcorreísta. En la carta, sin embargo, no sugiere siquiera un cambio en la estructura jurídico-institucional. No hay crítica alguna al autoritarismo. Por supuesto, habla de una “ciudadanía corresponsable, actora y deliberante”. Pero se entiende que es frente a ese poder autócrata, envolvente y mistificador del cual fue vicepresidente durante seis años.
Moreno habla de cambios. Pero tras casi diez años de un poder concentrado, persecuciones, organismos de la inquisición activos y un ejército de trols, sus propuestas se antojan cosméticas. Habla de una cruzada de formación política “que no debe ser entendida de ninguna forma como adoctrinamiento”… Él piensa más en una “entrega de elementos de análisis e información para que los ciudadanos actúen de manera consciente e informada”. No se pregunta cómo harán los ciudadanos frente a un Estado concentrador e instituciones que ocultan información o la camuflan y un aparato de desinformación como el que armó y usa Correa. De todo ello, no dice una palabra.
Moreno habla de que “el poder popular solo se construye y se consolida con una sociedad informada, educada, responsable y consciente”. Pues no. El poder popular, ahora se sabe por experiencia, es lo que han querido hacer durante diez años y por eso han buscado convertir la sociedad en masa militante, adoctrinada, odiadora y dependiente del Estado administrado por el correísmo.
Para el ex vicepresidente no es excluyente la visión del Estado metido en todo y el de una sociedad con mayor protagonismo. Pues sí. Le basta con mirar lo que pasa en el país. Y estar en Ginebra debería facilitarle la tarea. En ese marco, inquieta leerlo cuando dice que no han logrado “llevar elementos inspiradores suficientes para cambiar el Yo interior de nuestro pueblo”. Poner la carga del cambio en el “Yo interior” suena bien en las iglesias. En la vida pública es un pésimo augurio. Más aún cuando sugiere “llevar la revolución a cada ciudadano”. Y hacerlo con solidaridad, corresponsabilidad, alegría y amabilidad. Da escalofrío.
Por lo demás (acuerdo nacional por el empleo y la producción; evaluar las políticas de la Amazonia…) no hay nada nuevo. En sus propuestas no asoma autocrítica alguna por el modelo económico del gobierno al que sirvió y al cual sigue atado precisamente por sus responsabilidades en la pérdida de empleo, recesión, déficit comercial… etc.
Moreno juega ajedrez dentro de Alianza País. Su carta muestra, no obstante, que tampoco él tiene la nueva guía de navegación del correísmo sin Correa. A lo sumo les propone una liposucción. No el extreme makeover con que algunos partidarios suyos lo promueven.
Foto: Presidencia de la República.
Por duro que suene, que una silla de ruedas no nos conmueva a la hora de sufragar en caso de que Lenin Moreno sea candidato, ya sea por la RC o por cualquier otro movimiento, partido o alianza de partidos políticos. Lenin Moreno fue y es parte de un sistema corrupto que buscaba desde un inicio concentrar el poder para supuestamente cambiar el país. Si Lenin Moreno no participó de las decisiones iniciales de la RC para poder adueñarse de todo, no hizo ni dijo nada cuando se llevaron a cabo. Aún hoy, este señor no dice nada de la concentración de poder ni de la corrupción y mucho menos de la persecución. Que una silla de ruedas no nos conmueva, que no nos engañe.
No estoy de acuerdo porque sería un continuismo de la desgracia que vive el país.
Respetos para el Sr. Moreno, pero es del mismo grupillo de sátrapas que ha medrado del país; por favor adopte otra posición Sr. Moreno, todos sabemos que su idea es manejar el Estado-si se da el caso-de la misma manera como lo ha hecho el “sabio de la Grecia”, pero de una manera camuflada. Cuidado Sr. Moreno.
Lenin quédate tranquilo en Belgica , que allí estás ganando un buen sueldo con nuestra plata “SI HACER NADA DE NADA”
Nada de “sociolistos”. Necesitamos un gobierno que respete la independencia de poderes y que la gestión del correismo sea fiscalizada. Moreno u otro correista garantiza la impunidad de los actuales “robolucionarios”. Ya no estamos para comer cuentos.
Más allá de las “buenas intenciones” de Moreno, su entusiasmo ante los “logros” de la revolución chimba, así como su prolongado, permanente silencio frente a los múltiples atropellos de distinta índole en que ha incurrido el correato, le hacen cómplice de este modelo totalitario de los filibusteros verdeflex!!! Moreno sería el continuismo camuflado, para garantizar por sobre todo la impunidad
Ser simpàtico no es suficiente para reparar un paìs destrozado lleno de borregos gordos y elefantes blancos. El MULTIPROPÒSITO debe ser liquidar todo vestigio de abuso verde flex.
El lider revolucionario , es el primerito en salir corriendo.
Seria un grave error, elegir alguien que haya participado en este gobierno. Lo sano seria un candidato con vocación democrática para recuperar la democracia con separación de poderes, justicia independiente, fiscalización (Congreso) independiente, presidencia (sin concentración de poderes), ordenar las finanzas, y trabajar con un equipo de profesionales capaces y honrados, con experiencia. Fuera la improvisación y la corrupción de AP35 (todos ellos son parte de la corrupción ninguno se libra)!
“…La crítica para la política económica debe ser siempre razonada y claramente fundamentada, cualquier ignorante metido a político no será capaz de analizar cuestiones tan complicadas como las bancarias y monetarias y solo puede proferir gritos destemplados…”. EL COMERCIO (febrero 1981).
En ocasiones la política económica consiste en usar el sentido común. Si alguien me presta plata con un interés superior al de otros que también me dan crédito, no voy a elegir al más caro, ¿o sí? Si tengo problemas financieros, cierro oficinas que pueden no ser tan eficientes o necesarias para mi gobierno. Por último, si fui elegido para administrar los recursos de todos, lo menos que puedo hacer es entregar cuentas claras de mis gastos, permitir que me fiscalicen al detalle y, como resulta obvio, no puedo firmar acuerdos secretos con otros gobiernos, poniendo en una situación adversa a mis conciudadanos. Su comentario, señor Bombón, no llega a ser más que un balbuceo, pero absolutamente destemplado.
El pais necesita cambio de vision y de modelo economico. Necesita recobrar su democracia y sus instituciones. Ecuador no es del Correato es de los ecuatorianos. El estado populista lleno de propaganda totalitaria y al estilo Joseph Goebbles para seguir la lavadera cerebral y el despilfarro tiene que llegar a su fin. Desgraciadamente estos socialistas del XXI se tragaron los miles de miles de millones de $$$ que entraron por el boom de Los comodities. Ese boom no volvera. Miren a Venezuela en crisis humanitaria mientras los enchufados petroleros de PDVSA con cuentas de 60 mil millones de dolares en Houston. ya estan presos gracias a Dios. El Señor Moreno vive como jet setter con plata de Los ecuatorianos
ojo!!! que Moreno es un cuenta chistes. De ahí a un cuenta cuentos, sólo hay un paso.
Tiene razón y recuerde que los chistes son cuentos graciosos??
Moreno es la imagen del Correa original: hehco el buenito. O como decíamos antiguamente: MOJIGATO.
Todos, toditos todos están buscando la manera de seguir medrando del país desde insólitas funciones públicas. ¿Como hacer para reunir un grupo de administradores pulcros, que se dediquen a servir (bien pagados, cómo no) pero no a servirse de la manera grosera como lo han hecho estos sátrapas. No hay ética, no hay moral alguna, buscan la manera de socaparse los robos unos a otros, como una pandilla donde el que primero hable hará que caigan todos los demás. Es vergonzoso. Y el sátrapa mayor ahora se llena la boca diciendo que va a liderar la marcha que del 7 de abril para dizque defender su “revolución”. ¿Con qué cara? Con todos los poderes secuestrados por él, ¿con qué cara lidera una marcha ciudadana? Con la enorme torpeza con que ha manejado la crisis, ¿con qué cara sale a la calle? Esquivando toda fiscalización, despilfarrando los recursos, pagando cifras inverosímiles por cada pendejada que hace, ¿con qué cara pretende que la gente decente no le haga una mala seña en la calle? Creo que ya es suficiente. ES hora de pedirle que se haga a un costado, que el país tiene una cita urgente con el futuro y él todo lo que ha hecho es empujarnos cada día más y más hacia atrás. Rafael Correa, presidente del Ecuador desde el 2007 hasta 1984, año en que dejó al país en soletas.
…partidarios buscan un “extreme makeover”…los demás esperamos impacientes la definitiva autopsia. ..
Patético el señor Ironside, no propone nada nuevo ni una palabra de cambiar este país proyectándose a un post-correato. Falta auto critica. Quien garantiza que con este señor no se fiscalice y se descorrease al país??? Fuera correa sus panas y acólitos fuera.
A quién en su sano juicio le convendría desatar una disputa con Correa en este momento? Sobre todo cuando precisamente le pueden acusar de tener rabo de paja! Nadie lo va a hacer a través de una carta que puede hacerse pública por favor! Ni Moreno ni los otros que tientan las aguas en AP (Ramirez, Rivadeneira, Serrano, etc) van a empezar por cuestionar al lider que todavía tiene la sartén del aparato de propaganda por el mango. Lo que van a intentar es atraer a ese aparato a su lado en negociaciones directas. Eso no quiere decir que sus intenciones sean necesariamente compatibles con las de Correa. Cualquier político con dos desdos de frente va a permenecer subido en la camioneta de la RCiudadana hasta el último minuto para luego diferenciarse de Correa cuando éste esté aún mas disminuído.
Como siempre José Hernández correcto en sus apreciaciones