Lo que faltaba: Carlos Ochoa salió en una cadena de radio de la Supercom a hablar en nombre del “verdadero periodismo”. Reportero mediocre de tercera fila devenido en director de noticiero por estrategia matrimonial; mercenario del oficio que pasó de rabioso comentador anticorchista de radio La Voz del Tomebamba a obsecuente orquestador de campañas sucias correístas en GamaTV por 8 mil dólares mensuales; perro bravo de superintendencia… Escuchar a Carlos Ochoa dando lecciones de “verdadero periodismo” es como oír a Sasha Grey alabando las virtudes de la virginidad.
Lleva tres años persiguiendo a los medios de comunicación independientes del país, acosándolos con informes semiológicos que acaso es incapaz de comprender, negándoles el derecho al debido proceso, imponiéndoles multas, manteniéndolos ocupados en trámites absurdos. Comportándose, en fin, tal y como sus propios compañeros correístas lo ven y lo pintan (o lo pintaban cuando todavía se podía hablar en off con ellos): como un perro. El perro puesto por Rafael Correa para acabar de una vez por todas con un oficio en nombre del cual hoy pretende hablar y dar lecciones.
Después de tres años de trabajar denodadamente para aniquilar al periodismo (tarea en la cual ha conseguido incontestables progresos) tiene el descaro de dirigirse a los medios que ha contribuido a acosar y echarles la culpa por el estado de postración en que se encuentran. Esos medios, salió a decir en su cadena de radio, son los responsables de la falta de información que se produjo en las horas que siguieron al terremoto. Son ellos los que “no estuvieron preparados para responder de manera inmediata a una tragedia que desbordó su propia organización”. Hay que tener jeta. Y la de Ochoa es tan grande que se la pisa.
Antes de que el gobierno emprendiera su guerra contra el periodismo, no había medio de importancia en el país que no dispusiera de un corresponsal en Manta y otro en Portoviejo, por lo menos. ¿Quién puede mantenerlos ahora, al cabo de nueve años de acoso financiero? Nueve años durante los cuales el gobierno ha presionado para disminuir la inversión publicitaria privada en los medios, mientras manejaba la pública con criterios políticos y privaba de ingresos importantes y legítimos a muchos periódicos y canales de televisión. Nueve años durante los cuales se ha convertido a los medios en empresas inviables, limitando por ley hasta lo absurdo las posibilidades de inversión en el sector, desalentando las capitalizaciones, prohibiendo la expansión de las empresas con falsos argumentos antimonopolio, en fin, haciendo imposible todo crecimiento. ¿Qué empresario es lo suficientemente patriota o lo suficientemente imbécil como para invertir en medios en el Ecuador? ¿Para que el presidente de la República lo declare enemigo y le azuce sus perros? No, gracias. ¿Y qué posibilidades hay de hacer buen periodismo a escala nacional sin inversiones, sin una redacción con periodistas suficientes y bien remunerados, con corresponsales, con tecnología, con capacidad de movilización? Para el gobierno es simple: primero, se declara que el periodismo no es un negocio sino un servicio público; luego se impide a los medios de comunicación ganar dinero y, finalmente, se les echa la culpa por no bridar un servicio adecuado.
Y eso por no hablar del miedo. Desde que el presidente ganó el juicio a diario El Universo, por 80 millones de dólares (¡80 millones! Los correístas hablan de millones con la extraviada facilidad de quienes están acostumbrados a embolsárselos sin esfuerzo), todos los medios del país viven con una advertencia sobre sus cabezas: la certeza de que el poder puede quebrarlos en cualquier momento. Para eso se sirve de funcionarios que los propios correístas consideran sus perros. Ochoa, el primero de ellos. Por eso los medios, sobre todo en condiciones extraordinarias como una emergencia nacional, tienen miedo de decir y publicar las cosas que antes decían y publicaban sin conflicto. Nadie quiere arriesgarse en vano. Hay canales de televisión y estaciones de radio que saben que pueden perder su frecuencia si se indisponen con el gobierno. Ecuavisa, por ejemplo, cuya oportunidad de conservar la frecuencia de canal 8 en Quito depende únicamente de una decisión política del correísmo. ¿Qué pueden hacer medios así presionados y chantajeados, sino esperar las versiones oficiales para no dar motivo de queja? ¿Y cuando las versiones oficiales no llegan porque los organismos supuestamente a cargo son unos incompetentes? Para comunicar que no había alerta de tsunami el gobierno tardó dos horas. ¡Dos horas! Tiempo suficiente para que un tsunami arrase la costa ecuatoriana. ¿Y la culpa de esta desinformación es de los medios?
No. La culpa de la desinformación es, en primer lugar, de la incompetencia de las autoridades. De una secretaría de riesgos que decía estar preparada para la erupción del Cotopaxi y que, a la hora del té, no tenía ni siquiera megáfonos para arrear a la población como les gusta. Y en segundo lugar (y aquí nos reafirmamos en lo que 4Pelagatos publicó la noche del 16 de abril, cuando era imposible saber lo que estaba ocurriendo) la culpa es de de una Ley de Comunicación y de una política oficial de comunicación que mantienen a los medios atemorizados y en soletas. Hoy, tras nueve años de gobierno correísta, el periodismo en el Ecuador es peor de lo que era. Empeorarlo ha costado millones. Montar una ley, crear una institucionalidad para la censura y el acoso, contratar a mediocres como Ochoa para que muestren los dientes… Empeorar el periodismo ha sido un esfuerzo constante, sistemático, consciente. La culpa de la desinformación, toda la culpa, es del correísmo. Y de sus perros.
Foto: El Ciudadano
Por supuesto, quise decir hiena.
Yo no lo compararía con un perro, animal noble. Este es una verdadera hinea que se alimenta de sus propias heces y de la carroña que encuentra en el camino.
Al Sr.Ochoa le escuche recién en una entrevista, se creen dueños de la verdad, pero la verdad es que su tiempo en el poder es corto y la historia los juzgara, la caída será fuerte!!
Muy bueno su comentario, la ciudadanía hace suyo su pensamiento, así se habla FUERTE Y CLARO, no a medias tintas. Felicitaciones y gracias por representarnos a los sin voz
Carina z–la Robolucion Ciudadana es un Regimen de Izquierda Socialista Corrupto ,miren los ministerios ,secretarias y subsecretarias llenas de vagos izquierdistas son la pero escoria del Ecuador, como siempre estos socialistas No asumen su Responsabilidad,estos cinicos izquierdistas defendian y defienden hasta hoy a un vulgar grupo de hampones delincuentes peligrosos como los AVC ,y sin embargo llaman terroristas a estudiantes , a hombres que portan monigotes o a gente que pide agua.
Falta solamente un año para que todos los abusadores del poder rindan cuentas al pueblo ecuatoriano. Entre los más grandes abusadores esta este sujeto. Esta claro que cumple su papel a cabalidad, al pie de la letra que contiene la orden del abusador mayor. Lo único bueno de todo esto es que pronto comparecerán ante una justicia despolitizada y pagarán por todo el daño que han causado durante tanto tiempo.
Un saludo. Envío otra vez, con correcciones de tipeo.
No sé por qué, al inicio del artículo se habla del burro hablando de orejas y, después, de que tal o cual es un perro. Como autor del libro Animalanzas -sin ánimo de ninguna ofensa ni defensa- me permito llamar a la reflexión para que no se utilicen a los animales con comparaciones de ningún tipo. Hay que seguir las opiniones de Fernando Vallejo, en este sentido. Espero que mi comentario no me genere ataques y comparaciones con otros animales. Como espero, la comunicación es amplia, así que comparto un artículo escrito en el diario público El Telégrafo (por favor, no decir que el diario es un pasquín, que ya me referí a ello).
Defensa de Don Burro
Amarrado con una soga azul, corbata y sombrero de paja toquilla, Don Burro -como así lo llaman sus seguidores- es el hazmerreír porque pretendían inscribirlo como candidato. “Por lo menos sabemos que él solo va a rebuznar a la Asamblea y no solo va a alzar la mano para dar el voto”, explicó Daniel Molina, quien lo promociona en las redes sociales.
Pensé en qué diría sobre el asunto Fernando Vallejo, ese sí defensor de los animales y autor de “La puta de Babilonia”, quien cuando recibió el homenaje en Guadalajara nombró al burro, uno de los personajes clave en el pesebre de Belén. Ni hablar del asno de Sancho Panza.
Un poco más relajado, consulté el inicio de esa obra magistral de Juan Ramón Jiménez, escrita en 1917: “Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Solo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro… Lo llamo dulcemente: ¿Platero?, y viene a mí con un trotecillo alegre, que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal”…
Recordé el poema de Walt Whitman: “Creo que podría vivir con los animales / son tan secretos y tan plácidos / me detengo y me demoro mirándolos… / Ni uno solo anda en esa locura de tener cosas/ Ni uno solo es más decente o más desdichado, en toda la faz de la Tierra”. En este punto, me dije que no valdría la pena escribir a la Sociedad Protectora de Animales porque -a fin de cuentas- quién se iba a preocupar por un burro arrastrado por las populosas calles.
Como acabo de publicar un libro titulado “Animalanzas” –adivinanzas en torno a los animales, donde se incluye a un borrico- creo tener cierto conocimiento de estos menesteres y por eso miro no el hecho político de mofa sino las cuitas que debe estar pasando el jumento. Eso me recuerda a ese extraordinario libro “El asno de oro”, de Apuleyo, escrito en el siglo II de nuestra era, donde detalla las aventuras del joven Lucio que tras su búsqueda de la magia es transformado en burro y, desde esos ojos, puede hacer una crítica en tono picaresco de la sociedad de su época.
Esa misma estructura, ese mismo detonante, pero esta vez en el personaje de Ximen Nao, un terrateniente que es llevado al inframundo donde lo condenan a reencarnarse en un burro, es utilizada por el reciente Nobel de Literatura Mo Yan en su novela “La vida y la muerte me están desgastando”, una hilarante historia que deberían leer los seguidores de Don Burro. Porque esta es la pregunta en cuestión: ¿con qué ojos mirará el borrico a quienes pretendían conducirlo a una curul? Don Burro tiene la palabra.
http://telegrafo.com.ec/opinion/item/defensa-de-don-burro.html
Sus palabras expresan la frustracion de todo el pueblo Ecuatoriano. Antes de que llegara la opresion del Correismo, los ciudadanos eramos libres de elejir la prensa que queriamos leer y sacar nuestras propias conclusiones. Ahora se nos da unicamente la informacion que al gobierno le conviene y se siembra el temor hacia quienes digan lo contrario. Si eso no se llama dictadura no como mas describirlo.
Que valiente el Sr. Roberto Aguilar escribiendo este articulo desde la cárcel, porque en la cárcel debe estar si el Mashi tiene a todos los periodistas que critican a su gobierno en la cárcel y siendo torturados. Eso es valentía, escribir contra el tirano, sin importar ser torturado y en la cárcel porque en el Ecuador los periodistas serios están encarcelados y sin libertad para escribir, ¿Verdad Sr. Aguilar?
CON LA SUPERCON, OCHOA SE CONVIRTIO EN EL SUPERCAN
Como siempre su columna es digna de admiración y respeto. Al final de esta oprobiosa dictadura U., será reconocido como uno de los adalides de la oposición y al que muchos y entre esos yo, nos sumaremos. U., hace honor a su apellido. Malaparte.
Cuando se acabe el mandato de estos ROBOLUCIONARIOS , tu , Ochoa puedes irte con tu amo a Belgica para que hagas perro faldero , no queremos verte aquí en Cuenca.
supercan ladra pero no muerde , cobarde
Hemos leído su magnífico artículo en el que Ud. Pinta con todas las verdades y d cuerpo entero a uno de los principales alcahuetes de correa.El asunto es que toda esta gente, incluido este baboso, son tan mediocres que no entienden,desde el líder para abajo cuál es la realidad desastrosa del país en la que le están dejando. Todos estos vivos del socialismo del siglo XXI son cortados por la misma tijera, se aprovechan de la ignorancia para dar rienda suelta a su estupidez y cometer toda clase de atropellos y poner en juego su principal característica: la corrupcion, el robo descarado y el abuso. Sigan adelante co su periodismo de la verdad y la justicia. Gracias.
Acertado, preciso y conciso empleando los términos con los que se les debe tratar a estos esbirros de este gobierno despilfarrador y prepotente , que como tiene maniatado a los poderes del estado a hecho y desecho a su beneficio las leyes y en ellas se escuda para tratar de callar la opinión del pueblo que opina diferente a estos sinvergüenzas….¡sigan adelante, que no los calle este dictadorzuelo y sus secuaces!….