Que Cuba es un ejemplo de dignidad es una afirmación de la presidente de la Asamblea, que no tiene ningún valor. Y comentarla es pertinente por lo pedestre. Y porque la postración conceptual, de la que adolece esta izquierda conservadora que paradójicamente se expresa a través de estos personajes etariamente jóvenes, hace apología de ideas que sobreviven a costa de provocar mucho sufrimiento.
Cuba muestra las miserias de la dictadura hereditaria. De los gobiernos eternos que perduran sobre la pobreza, el atraso y las restricciones económicas y políticas. Cuba no es ejemplo de dignidad. No es ejemplo de decencia. No es referente de democracia. Puede entenderse que eso crean tozudos dinosaurios que detuvieron su entendimiento al tiempo de la guerra fría, que aun acarician la imagen mítica del comandante de Sierra Maestra, como un Aureliano Buendía, que la sesentera mística de la revolución convirtió en ícono. Hace un pila de años, la izquierda romántica, acá en latinoamérica y en Europa, canonizó a Fidel Castro. Pero eran las épocas en que la beneficencia soviética encubrió la economía parasitaria que lo sostenía, como luego fue la dependencia de la opulencia benefactora de Chávez. Es hasta entendible que esas mentes anquilosadas, a las que se les detuvo el reloj de la historia, piensen en Cuba como el modelo.
Hace falta mucha ignorancia. Hace falta tener el cerebro hueco. Hace falta improvisación, nada de formación e información para que jóvenes, que nacieron a la política cuando se derrumbaron los falsarios íconos del socialismo real, repitan –con severa insolencia a la integridad intelectual– el mensaje repleto de horrendos eufemismos para promocionar un régimen antediluviano.
Cuba es una isla de misérrima calidad de vida. Debe servir como otro penoso ejemplo práctico del rotundo fracaso del socialismo. Cuba vive una dictadura que expulsa miles de angustiados en escuálidas balsas o en engañosos viajes. Gente desesperado por abandonar el infierno que la presidenta de la Asamblea ensalza. Ella brincó, con enormes vacíos, de un reinado de pueblo a una función a la que se debería arribar con algo de condumio neuronal.
A la par de los de masa gris que se anquilosaron o de los que nacieron anquilosados –y en el correísmo hay abundantes ejemplos– hay otras mentes que militaron en la izquierda marxista de las épocas en las que pensaron posible una utopía. Entonces, mantenían una ética humanista y pensaron, honesta pero erradamente, que ese modelo haría posible la igualdad. Pero hace lustros dejaron de pensar en Cuba como la ruta utópica. De esas mentes que se sostienen dinámicas por la dialéctica y el sentido de realidad, difícilmente se les arranca frases tan contemporizadoras con la represión y la humillación como las que, con la liviandad del carente, ha escrito la presidenta de la asamblea. Tan pedestre ella.
¿Qué parlamento fue a visitar ella? El que se integra por los obsecuentes del partido único. Es probable que no le haya resultado del todo diferente al que ella dirige. Pero en una democracia, la característica es la variedad de representación política, resultado del libre juego de organizaciones diversas. En la Cuba digna de la pedestre presidente de la Asamblea aun la competencia dentro del partido único fue erradicada. Como dinastía, la sucesión es familiar y ni siquiera ha sido posible la renovación del liderazgo por fuera de la gerontocracia. Por eso en 2002 Fidel expulsó con deshonra a Robaina (¿habrá oído de él?) por haberse “promovido” como candidato a la transición poscastrista. Como antes expulsaron a Aldana en 1992, con la acusación de intentar convertirse en el Gorbachov cubano.
¿Qué Cuba es digna? Sin duda es por aquellos héroes que enfrentan a la nomenklatura con los riesgos del totalitarismo y que terminan acosados por el Estado policial. Es digna por el testimonio de las madres de blanco. De los presos políticos a los que el Papa niega oídos. De aquellos que por preservar su dignidad se humillan emigrando. Las dilmas, los franciscos, los correas que peregrinan a retratarse con un tótem nefasto que reina en la Isla no blanquean 57 años en los que cubanos pasaron de ser ciudadanos a víctimas. Por algún motivo será que aproximadamente un cuarto de la población cubana ha emigrado.
Bueno, lo comparto porque me hizo falta y podría hacerle a otros:
pedestre. Del lat. pedestris.
1. adj. Que anda a pie.
2. adj. Que se hace a pie.
3. adj. Dicho de un deporte: Que consiste particularmente en andar y correr.
4. adj. Llano, vulgar, inculto, bajo. <<<———-Esta es la que aplica
No se merecía ese pueblo cubano, la castración que sufre a causa de una dictadura hereditaria, donde se le negaron las oportunidades al desarrollo de todas sus capacidades como es la tecnología, pensamiento, libertades y oportunidades para su bienestar. No se pueden imaginar ahora los que viven en la isla habitar en una casa como la que ostenta Dña. Gabriela…ni en sueños…!!! Ojalá termine esta pesadilla en la que le han sumido los Castros a toda Cuba…
Entonces la ex reina del yamor deberá vivir en Ecuador con el sueldo básico de Cuba.
Una persona ignorante (no es insulto) puede hablar de Cuba de esta manera. Sólo falta que vaya al Corea del Norte y salga maravillada con el dictador.
Por la historia que abraza a nuestro querido país, ésta señora es una mas de las que han desfilado por una opción definida en la captación de votos,nuestro pueblo no discrimina la formación académica de la intelectual,los que saben de nosotros ,usarán por los siglos de los siglos nuestra carencia política y por los bombos y platillos(novelería)eligiéremos por siempre a nuestros verdugos.Cómo cerrarles el paso antes de dedicarnos con frases rebuscadas a criticar sus hazañas?esa es la tarea que anulan los dueños del Ecuador,con todo su aparataje comunicacional capaz de convencernos que con el cambio de rostros, vienen las mejores intenciones para superar esta inercia político-intelectual.Tenemos una colección de estos personajes que por sus cargos no son tan evidentes,la presidenta de la asamblea es ecuatoriana y es parte de nosotros,por lo mismo que estamos haciendo para seleccionar mejor a nuestros representantes?.
Las palabras de la Sra. Ribadeneira me recuerdan a una expresion popular que solia escuchar años atras: “hablas bonito pero huev…s”.
Eso es lo absurdo y ridiculo de los politiqueros que quieren ignorar la realidad de un pueblo oprimido por tantos años victima de una dictadura miserable como es el caso del pueblo Cubano, no creo que sea porque les guste veranear o dedicarse a viajar es que han salido Cubanos por millones de su isla natal desde muchos años atras hasta hoy en dia.
Esa realidad no la observa ni la puede palpar la doña en cuestion ya que no vive en aquel pais, vive en el Ecuador feliz y contenta de ganar el sueldo que gana, de disfrutar de lo mundano que tanto se queja su faccion politiquera atacando al capitalismo y con la gracia de tener el poder en la mano que generosamente aunque con exigencias de sumision a cambio, le ha dado su jerarca a quien se debe hasta la muerte por gratitud.
Estimado Diego he leído y reeleido su artículo y la verdad no entiendo su indignación por la postura de Rivadeneira en Cuba; es totalmente congruente su discurso, si manifestaba lo contrario, ahí si había que comentar ampliamente el mismo.
Es imposible que algún correista vaya a Cuba a decirles las verdades a los tiranosaurios comunistas; máxime si Fidel es el padrino de Correa, Maduro, Fernandez y Morales; ellos y el finado Chavez fueron catequizados y formados ideologicamente en Cuba, entonces si algun subdito del autocrata en Cuba enzalsa al comunismo caduco e infame de los Castro, no hay nada de que alarmarse ni asombrarse, están cumpliendo el pacto robolucionario, nada mas
Nunca me ha defraudado la Sra. Licenciada, cuando habla esas barbaridades su lengua es mas rápida que su cerebro, turistear en Cuba seguramente le hara creer que está en la sociedad perfecta. Debería quedarse a vivir un tiempo en ese paraiso y olvidar su humilde casita y los deliciosos alimentos que consume, por supuesto a costilla del pueblo.