Señor Moreno,
Si el propósito es unir y no dividir, me alegra mucho no tener el mismo estilo… (que Rafael Correa), dijo usted en Teleamazonas. Es obvio que las personas prefieren ser tratadas con cordialidad y no a las patadas. Es obvio que una esfera pública sana se fortalece con tolerancia y debate de ideas y no con tribunales de la inquisición y agravios. Usted volvió con la mano tendida; señal inequívoca de que también usted es consciente del hastío que produce la guerra inmisericorde a la cual el gobierno, del cual usted ha hecho parte, ha sometido al país.
No cabe duda, sin embargo, de que siempre será mejor una mano tendida que un puño cerrado. Hay que celebrar su propósito de hacer una campaña respetuosa en la cual se puedan contrastar ideas y propuestas. Hay que celebrar su decisión de romper con la letanía correísta que impone recitar proclamas y sofismas propagandísticos. El estilo cuenta porque con su amigo Rafael dejó de ser forma y pasó a ser política de Estado.
Por eso convendría esclarecer lo que usted entiende por estilo. Lo que se ha visto, en estos días, es que ese estilo sosegado le permite pintar puertas en las paredes y escabullirse por ellas sin responder lo que le preguntan. Sin asumir sus responsabilidades. Le dicen que usted no podía recibir fondos del Estado para estar en Ginebra. Usted responde que recibió premios estando allá y que aquí no se informó. Le dicen que la Ley de Comunicación acabó con medios, tiene algunos sobreviviendo y otros autocensurados y convirtió la libertad de expresión en un servicio publico. Y usted responde que tiene que examinar la ley… porque cree que dice otra cosa. Usted afirmó en el sur de Quito no entender por qué no hay empleo y por qué el país no es una potencia turística… Y luego, ante Correa, usted obvió esa parte de su discurso. Usted usa el aparato del Estado para presentarse como candidato oficial de Alianza País y cuando le preguntan por este abuso de bienes públicos, dice que el Presidente explicó que como él estuvo ahí, todo está en regla.
Así, su estilo devuelve a todo el mundo al pasado. A esos seis años al lado de Rafael Correa durante los cuales usted aceptó que el estilo de él produjera intolerancia y abuso, ataques y cárcel para los activistas sociales, persecución para los medios de comunicación, derroche de las finanzas públicas, opacidad y corrupción en el gobierno. Vuelve usted, señor Moreno, a ese doble estándar en el cual, guarecido tras su estilo, se pone al abrigo de lo que hace el gobierno mientras proclama ser totalmente diferente de lo que hacen y dicen sus amigos. Empezando por Correa. Curioso desdoblamiento el suyo, que le permite decir que es cuidadoso con las finanzas públicas… mientras escribe una carta para pedir, desde un cargo inexistente en la función pública, que le atribuyan $1.6 millones por año. Curioso desdoblamiento que le permite decir que todos los candidatos debieran tener a su disposición los medios del Estado para presentar su candidatura… mientras es usted el único que goza de esa prerrogativa. Y usted lo sabe.
Usted quiere hacer pensar que su estilo anuncia una etapa nueva; no ese correísmo que hastía, al punto de que el propio Correa desistió de competir porque sabe que el país desea cambios. Empezando por cambiarlo a él. ¿Cómo creerle si desde que usted llegó produce desdoblamientos impensables, característicos de actores consagrados? Su estilo hace pensar en un biombo formal y discursivo para justificar lo que, a pesar del miedo que ha sembrado su gobierno, el país ya no tolera a la revolución ciudadana: cinismo, falacia, mentira, atropello…
Usted dice querer adecentar la política; confesión no pedida que muestra la conciencia que tiene de lo bajo (hasta el grado cero) que su amigo Rafael y Alianza País llevaron la cosa pública. Pues bien: para hacerlo quizá lo más urgente sea, viniendo de usted, que haga el favor de decir al país ¿cuándo hará coincidir lo que dice que es y lo que dice que cree, con lo que hace?¿Cuándo cesará usted de proceder como si fuera normal y ético que su mano derecha ignorara lo que hace su mano izquierda? ¿Cuándo dejará de pintar puertas en las paredes para huir por ellas?
Usted se guarece tras su estilo diferente. Pero en este punto ya no importa porque lo que revela su estilo lleva, otra vez, a la misma pregunta: ¿quién es usted, realmente, señor Moreno? ¿Es el cínico que muchos describen que ha aceptado todo y justificado todo con cara de yo-no-fui? ¿Es el hombre consciente de haber tolerado una guerra del correísmo contra el país, como convidado de piedra, porque no tenía las manivelas esenciales del poder? ¿Es usted el tramoyista audaz que pretende proseguir este proceso pero exhibiendo una mano tendida porque ya no funciona el puño cerrado?
Usted quiere generar credibilidad con su estilo. Al parecer ya no basta: lo que cualquier elector espera de un candidato es que haga coincidir sus palabras con sus acciones y sus actitudes. ¿Lo hará algún día, señor Moreno?
Un saludo pelagato.
Mañana, segunda carta: ejercicio a pulmón libre
Para mí simplemente aquí están jugando al policía bueno y policía malo para conseguir la confesión, es decir que trasportandolo a la realidad de esta campaña electoral simplemente el Sr. Moreno muestra esa cara para obtener los votos necesarios para ganar la presidencia o por lo menos suficientes votos para manejar la asamblea.
Excelentemente bien retratado este Sr Moreno que es con sus maneras suavecitas, un mojigato, cómplice codicioso y aprovechador de los recursos públicos. Tan responsable del gobierno más corrupto de la historia republicana del Ecuador como el mismo Correa y todos sus adláteres sumisos y sumisas aprovechadores.
[…] Primera carta: http://4pelagatos.com/2016/10/11/senor-moreno-cuando-dejara-de-pintar-puertas-en-las-paredes-para-hu… […]
Es costumbre usar un adjetivo para identificar a personas como Lenin Moreno: MOJIGATO.
Para mí simplemente aquí están jugando al policía bueno y policía malo para.conseguir la confesión, es decir, que trasportandolo a la realidad de esta campaña electoral simplemente Moreno muestra esa cara para obtener los votos necesarios para ganar la presidencia o por lo menos suficientes votos para manejar la asamblea.
Cambio con Moreno no habrá ni siquiera si él lo quisiera.
Ellos mismos identifican a la robolución y su corrupción como la “red de tesoreros”, éste señorcito es otro “gran cajero” por donde emigran los dólares del pueblo, $1 ´600.000 anuales de ingresos privilegiados y favorecido nepotismo familiar establecido en Ginebra, Suiza, otro paraíso fiscal, donde progresa su buen vivir y vanagloriarse sus propias interesadas proclamas.En caso no gane, volverá al país?
Aparenta solidaridad, pero con el discursillo de que “han traicionado a la revolución” sus coidearios de la red, su camaradería lo delata, ya no no es creíble sólo se confirma el saqueo. Y el pueblo que? a actuar en contra y rechazo del continuismo impune y no quedarse a llorar atrás un cajón.
Ya empezó a contar su mejor chiste : “Si gano las elecciones voy a mandar yo”.
Mientras Correa es transparente y honesto en su pensamiento troglodita, Moreno es tan sibilino que espanta hasta al propio Correa, que no consigue confiar en él. El camaleonismo, la verdad, produce serios escalofríos.
En verdad alguien aquí cree (el editorialista incluido) que Lenin Moreno responderá alguna de esas preguntas? unicamente lo haría ante una denuncia en la Contraloría y Fiscalía, pero si la oposición gana las próximas elecciones, algo que hasta ahora es impensable dada la fragilidad de la union que prometían.
Porque por ahora no hay nadie que asuma esa responsabilidad, ni políticos, peor periodistas.
De todos modos, si se diera el caso de que la oposición recapacite y se una para derrotar al correismo, y claro, gane las elecciones, Moreno seria de los primeros en salir de vacaciones como Delgado y ahora Yanuzeli, y así sucesivamente hasta que la justicia no tenga a nadie a quien investigar y también salga de vacaciones
Esto no es un insulto.
Felicitaciones señor Hernández por su claridad y frontalidad al presentar a Lenín Moreno de cuerpo entero.
Al sacarle la careta de buenito y chistosito no se ve más que otro corrupto robolucionario.
¿De verdad hay personas, fuera de AP que crean que Moreno es diferente.?
Lenin Moreno es un cómplice silencioso de los abusos de poder de Correa. Juega a ser diferente cuando es lo mismo. Su carita de bobalicón podrá engañar a muchos, no a todos.
Este fulano discapacitado es lobo disfrazado de oveja. Es más radical ideológicamente hablando, militante comunista confeso. Es un teórico puro sin ninguna experiencia administrativa a más de cómplice del daño causado por” atraca país “Debemos impedir que gane las elecciones. Sería caer de guatemala a guatepeor!!!! ( con el debido respeto a Guatemala)
Ojalá muchos lean este importante artículo.
La hipocresía sublimada en éste personaje, taimado en la forma, tunante en el estilo.
Cómplice silencioso de la corrupción absoluta de 10 años y como tal responsable de atracos, atropellos y toda clase de desmanes en el país.
La ciudadanía debe dejar de lado el sentimentalismo de las limitaciones e identificar claramente la carta marcada con la que se quiere timar nuevamente al electorado.
Si los ecuatorianos pensamos que Lenin Moreno es capaz de generar credibilidad, pues entonces nos merecemos otros 10 años de de revolución ciudadana.