//

Correa perdió los pedales en Teleamazonas

lectura de 5 minutos

¿Por qué Rafael Correa fue a Teleamazonas? Sencillo: sabe que sus periodistas asalariados no son creíbles y que se abrió la cacería de votos. Sabe, además, que Lenín Moreno ya empezó –por motivos electorales y por razones de estilo– a visitar los canales que el oficialismo vetó y se dedicó a perseguir, denostar y multar. Correa reactivó ese ADN que lo lleva a usar los medios en campaña, para luego dedicarse a destruirlos.

Por supuesto se inventó, en la sabatina, una excusa peregrina para que sus fans no se pregunten por qué va –con corbata– a un canal corrupto. Voy –dijo en sustancia– porque comprometí mi palabra con Andrés Carrión. No avanzó hasta la siguiente pregunta: ¿Y por qué comprometió su palabra?

Desde el comienzo se le vio incómodo. Su lenguaje corporal lo delataba: ansiedad, nerviosismo, mirada esquiva, temblor inhabitual de manos. Más tarde, los televidentes descubrirán que no fue a responder las preguntas de Carrión. Se preparó para demolerlo. Lo confesó: revisó tuits, retuis y textos de un periodista que en vez de puntas se mueve con más holgura en los círculos. Lo confesó y pareció no sorprenderse de que, como jefe de Estado, haya pasado horas dedicado a esa miserable tarea. En cambio, para las cifras llevó al Ministro Coordinador de la Política Económica, Patricio Rivera, quien no tiene quién le gane: es insoportable.

Carrión tuvo un cuarto de hora impecable: preciso e incisivo, mantuvo el mano a mano con Correa cuando éste trató de irse por las ramas y negar la agresión contra Cynthia Viteri. Luego se esforzó en que los televidentes oigan, de boca de Correa, los datos de la economía, de la deuda con los chinos, con el IESS, con el Banco Central. No los cuestionó. Prefirió dejar fluir el ejercicio hasta poner fuera de lugar al profesor que, incómodo, confesó a su ministro que le estaban tomando la lección.

Ver a Correa, el gran economista, titubear con los datos, buscar en su fajo de hojas, pedir abiertamente ayuda a sus ministros, es un gran momento para la televisión, inusual en este gobierno. Verlo a la defensiva, buscando argumentos, retorciéndose en sus automatismos, reducido a tener que equiparar sus errores con los que achacó a Carrión, reconcilió por un momento a los televidentes con las bondades del periodismo.

Esa entrevista pudo haberse terminado ahí. Porque de hecho ahí se terminó. La fiebre del primer segmento desanimó a los protagonistas a mantener el ritmo. Carrión facilitó la tarea de Correa. La entrevista derivó en un popurrí de preguntas que permitieron al presidente efectuar sobrevuelos sin entrar en materia.

Las preguntas se tornaron abiertas y Correa aprovechó para refritar lo que ha dicho en las sabatinas. Carrión no lo llevó a anunciar decisiones. Es una pena porque a estas alturas el país podría saber si faltando seis meses para dejar el poder, Correa contraerá una deuda monstruosa con China y Corea para construir la refinería del Pacífico.

En vez de lanzar flores a Alexis Mera (y a Carlos Pólit, muy merecidas por haber cerrado los ojos durante diez años), era urgente saber si el oficialismo va a candidatizar o no a Mera para contralor. Carrión remó al lado de Correa contra Fernando Villavicencio, quien ha dado a conocer 180 contratos y la danza de millones en Petroecuador. Correa evadió los hechos y ni siquiera se vio forzado a reconocer que la investigación no es de la autoría del gobierno. Por lo menos eso. Pudo decir mentiras de ese calibre.

¿Qué pretendían los cuestionarios picados, como dijo Carrión, al estilo Proust? ¿Aligerar la entrevista? ¿Dar a conocer algo de la sicología del invitado? Tratándose de Rafael Correa que lleva diez años en el poder, tratándose de su retorno a un set de la prensa corrupta tras años de ausencia, tratándose de la primera oportunidad en mucho tiempo de hacerle preguntas no amañadas… Pues se antoja que había muchísimas cosas para preguntarle. Los cuestionarios picados sobraron sobremanera.
Carrión tuvo un gran cuarto de hora que será recordado. Pero hubiera podido ser la entrevista del año.

 

41 Comments

  1. Me parece que ni Rafael Correa estuvo muy bien ni Andrés Carrión los dos salieron de los límites de la entrevista se supone que debe existir el respeto entre las dos personas pero como se supone que fue la entrevista entre gritos? Tampoco estoy de acuerdo con el tuit de Andrés Carrión puede que Correa lo haya mencionado para tratar de cambiar de tema de lo de Cinthia Viteri pero tampoco es correcto que el señor retuitee eso debe tener en cuenta que es una persona de los medios muchas personas lo siguen y a la larga igual influencia sobre las demás personas Aunque Carrión ni siquiera se hizo responsable de esos tuits.

  2. Corrael simple hecho que sea presidente no teniede derecho amezar al gente y peor publicamente como es en la television, tambien se habla de un tema de etica y respeto porque no puede tambien tener respeto a los demaz y no estar amenazando que se va a detener a la persona por el siemple hecho de queres saber lo que realmente sucede con el pais.
    Por otro lado el teleamazonas tenia que haber preparado un buen planteamento de preguntas, ya que el Presidente Correa sabe muy como defederse y atacar a todo el que se le oponga.

  3. Yo no se para q invitan a jente q no se merece ser entrevistado q antes de una entrevista analiza las preguntas mejor ponian una buena pelicula q era más interesante q ese entrevistado. Pero para ofender a las personas los sábados para eso si es bueno el si puede burlarce de todos pero hablar de el no se puede si eres crítico aprende a ser criticado. Una cosa más solo le pedimos aprenda a se respetuoso parece muchacho malcriado.

  4. A Carrión le falto , se le notó lento , oxidado , con temores , ya Correa transformado e ido de sus cabales amenaza con irse, hubiese sido una perfecta oportunidad para que el Ecuador vea la clase de Presidente que nos gobierna en televisión Nacional, por lo contrario Carrion se baja , se allana , paso a ser un entrevistador de farándula, que pena , nos privó de observar al verdadero Correa

  5. Correa el peor economista de la historia del Ecuador…..como obtuvo el un PH en Economia en USA y otro en Belgica..falsifico el titulo o lo compro..como mas de una docena de universidades a nivel del mundo le han otorgado un :
    “honoris causa” como que algo aqui no cuadra???

    • Claro lo que no calza, es que tienes sólo la información que te dan los medios que solo desinforman, porque puedo apostar que jamás contrastas para saber si te dicen la verdad. Por eso te preguntas como es que entes universitarios de alto nivel mundial, que si saben de economía, no los mediocres que creen saber de economía, le han otorgado no uno o dos doctor honoris causa, sino más de doce precisamente en materia de economía.

      • Señor Geovanny, los “honoris causa” debería decir horroris causa en este caso, nunca se dan por méritos académicos sino por razones políticas.

      • Que Pena que exist an personas que defined an a este Bobo que tenemos de presidente, debris so organizarnos para quitarle el titulo que a lo mejor Es como el del primo, el mimo hermano le dijo desde el principio, por el Ojo tuerto te Roban, lo completo que le Han Ronaldo y ha dejado robar por los dos Jo’s bien abiertosro,manos limpias, corazones ardientes, que Pena da.

Comments are closed.