Juan Pablo Pozo se gana un espacio en el muro de la ignominia en el cual figuran, entre otros, Omar Simon y Domingo Paredes. Todos han sido funcionales en el CNE al autoritarismo del gobierno de Rafael Correa. Todos tienen por lema “Todo para él, nada para el resto”, como lo prueba -otra vez con maestría-, el pelagato Chamorro.
Suena irónico y risible que el gobierno y sus esbirros hablen de pacto ético. Hablar de ética con los robolucionarios enquistados en todos los poderes del estado, es como hablar de orejas con el burro.
Rima y verso maestro, jajaja, que detallaso. El bufonero de la corte, ni corto ni perezoso ya salió con el edicto maquillado, proclamar el pacto ético amarrado con piola y anzuelo, y quien no cumple pasa al garrote del verdugo.
Lo malo de la caricatura, es que la escalera debe ponerla hacia abajo, hacia el infierno.
Juan Pablo Pozo, otro asqueroso y caretuco esbirro del correísmo.
Ver http://milhojas.is/612287-juan-pablo-pozo-el-hombre-que-archivaba-expedientes-3.html