Los funcionarios no dan información. Es la regla. Claro que hay excepciones, pero lo común es no darla. La frase más repetida en todos los noticieros de los canales de televisión que no pertenecen al aparato de propaganda del gobierno es la siguiente: “Este noticiero pidió información al ministerio X (o pidió ser recibido por el funcionario Z) y hasta el cierre de la edición no hubo respuesta”. Así todas las noches. La transparencia es el gran mito correísta.
Fundamedios quiso saber hasta dónde llegaba esta conducta gubernamental. Emprendió dos monitoreos sobre el acceso a la información pública. Estableció una lista de organismos del Estado que cubría todos los ámbitos de la administración pública y les envió solicitudes de información específica a nombre de la propia Fundamedios, en el primer monitoreo, y de personas naturales en el segundo. El resultado fue desalentador: sólo la mitad de las solicitudes fueron respondidas y sólo el 14 por ciento lo fueron satisfactoriamente, es decir, con información completa. El informe con los resultados de ambos monitoreos se puede encontrar en la página Web de Fundamedios e ilustra de manera bastante fidedigna el sistema de opacidad informativo impuesto por el correísmo.
Sin embargo, las leyes aprobadas por este mismo gobierno exigen lo contrario. La Constitución, para empezar. El artículo 18 garantiza el derecho de “todas las personas, en forma individual o colectiva”, a “acceder libremente a la información generada en entidades públicas”. Y añade: “No existirá reserva de información excepto en los casos expresamente establecidos en la ley”. Más aún: en el capítulo correspondiente a las garantías jurisdiccionales, la propia Constitución crea (artículo 91) la figura de la Acción de Acceso a la Información, un recurso judicial a disposición de aquellos ciudadanos a quienes les ha sido negada.
Además, el correísmo aprobó una Ley Orgánica de Transparencia y Acceso a la Información Pública (Lotaip) que establece la obligación de todos los organismos del Estado de entregar información a cualquier ciudadano que la requiera en un plazo de diez días prorrogable a quince. No más. Sólo se exceptúa aquella información considerada como reservada, es decir, calificada de manera motivada como tal por el Consejo de Seguridad.
Eso dice la ley. La verdad es que no hay ley ni artículo constitucional que valga en este país a la hora de conseguir información. En la práctica, las instituciones del Estado a las que se solicita información, simplemente, se abstienen de responder en la mayoría de los casos. O se inventan confidencialidades y reservas no contempladas en la ley. O remiten al solicitante a la página Web del organismo, al laberinto de las páginas de transparencia, donde apenas consta una porción de los datos relevantes, o a otros organismos más elevados y más opacos. Entre los organismos que se niegan sistemáticamente a responder los pedidos de información, según el informe de Fundamedios, se encuentra precisamente aquél que más plata maneja: el Ministerio Coordinador de Sectores Estratégicos. Territorio del vicepresidente Jorge Glas. Qué raro.
Así, gran parte de la información que en teoría es pública, en la práctica termina siendo reservada. Simplemente porque es imposible acceder a ella. Los funcionarios a cargo no lo permiten. Aparte de la información solicitada en los estudios de monitoreo de Fundamedios, este organismo incluye en su informe una lista de casos de solicitudes de información negadas a varios medios. Información pública convertida en información secreta.
- Es un secreto la situación financiera de los canales de televisión TC y Gama, incautados por el gobierno y administrados por un organismo público: la Unidad de Gestión de Medios (Ugemed). Fundamedios solicitó esa información y no obtuvo respuesta. Interpuso una Acción de Acceso a la Información, garantizada no sólo por la Lotaip sino por la Constitución, y la jueza Sofía Irigoyen la rechazó, acogiendo el argumento de los abogados de la Ugemed. ¿Cuál fue ese argumento? Que el organismo “no culmina (aún) su proceso de institucionalización, que incluye la implementación de todos los mecanismos de transparencia”.
- Es un secreto el estado en que se encuentra el parque nacional Yasuní luego de que se inició en él la explotación petrolera autorizada por el gobierno. El programa Visión 360, de Ecuavisa, solicitó tanto a Petroamazonas como al Ministerio de Ambiente autorización y guías para ir al sitio (el presidente Correa había dicho en una sabatina que cualquiera puede ir, con autorización y guías) pero no obtuvo respuesta.
- Es un secreto el estado en que se encuentra la zona de Pacayacu, provincia de Sucumbíos, donde el gobierno se precia de haber emprendido una exitosa remediación ambiental luego de cuatro décadas de extracción petrolera. Visión 360 solicitó a Petroamazonas y al Ministerio de Ambiente que presentaran los planes de esa remediación, los documentos que la respaldan, las pruebas de las indemnizaciones que el gobierno dice haber entregado a la población afectada, los resultados del monitoreo ambiental que el ministerio dice estar cumpliendo… Ambiente no respondió. Petroamazonas arguyó que en la solicitud de Visión 360 faltaba “la determinación concreta de la información”, es decir, para qué la quiere. El programa respondió, obviamente, que para un reportaje. No hubo más respuesta.
- Son un secreto los detalles de la construcción de la Refinería del Pacífico. Visión 360 envió una solicitud de acceso para conocerlos y una entrevista con un vocero calificado. La refinería, por toda respuesta, les remitió a la página Web de la entidad, donde no hay nada relevante.
- Es un secreto la lista de bienes inmobiliarios del sector público, su extensión, su avalúo catastral. Otra vez Visión 360 solicitó esa información al Servicio de Gestión Inmobiliaria del Estado y les respondieron que para qué la querían. El programa lo explicó y no obtuvo respuesta.
- Son un secreto las condiciones del contrato con la empresa China International Water & Electric para el proyecto Toachi Pilatón. Diario El Universo solicitó esa información y no obtuvo respuesta.
- Son un secreto los proyectos a cargo del Ministerio de Seguridad. El Universo solicitó información y no obtuvo respuesta.
- Son un secreto las contrataciones realizadas por las Fuerzas Armadas en relación con los helicópteros Dhruv. El Universo solicitó información y no obtuvo respuesta.
- Es un secreto el detalle de los proyectos del Comité de Reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto. El Universo solicitó información y no obtuvo respuesta.
- Es un secreto lo que ocurrió en la sesión número 9 de la Comisión Ciudadana de Selección de jueces para el Tribunal Contencioso Electoral. El Universo solicitó el acta y el video de esa sesión y no obtuvo respuesta.
- Son un secreto los movimientos migratorios efectuados desde enero de 2012 hasta la fecha por 18 personas vinculadas a los casos de enriquecimiento ilícito y cohecho en Petroecuador. El Universo solicitó información y no obtuvo respuesta.
- Es un secreto la información relacionada con el concurso de frecuencias de radio y televisión. Fundamedios la solicitó y la Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel) se negó a entregarla aduciendo el artículo 66 de la Constitución, que garantiza la protección de datos de carácter personal. Según la Agencia, la información sobre los postulantes en dicho concurso cabe en esa categoría.
La parafernalia de medios correístas, la profusión de cadenas de radio y televisión, el teatro de las rendiciones de cuentas, la abundancia de páginas oficiales en el Internet con sus toneladas de información inservible, la retórica semanal de las sabatinas… Sólo están ahí para producir la ilusión de la transparencia. La realidad que Fundamedios documentó con estadísticas y casos específicos (a los que se podría añadir otros cientos) es que el derecho a la información garantizado por la Constitución es violado todos los días por el gobierno de Rafael Correa.
Arriba: mientras su gobierno niega información a los diarios, el presidente los critica por estar mal informados. Foto: Presidencia de la República.
Estimados 4PELAGATOS, buen artículo, pero tienen una equivocación en su cuarto párrafo que sería factible que lo corrijan. Mencionan: “… Además, el correísmo aprobó una Ley Orgánica de Transparencia y Acceso a la Información Pública (Lotaip)…”. La citada Ley no fue aprobada por el correismo, sino en el gobierno de Lucio Gutiérrez, pues apareció en el Registro Oficial N.o 337 de 18 de mayo de 2004. Al parecer el error al redactar el citado párrafo se da al confundir la Ley Orgánica de Transparencia (LOTAIP) con la Ley de la Función de Transparencia y Control Social, la cual fue publicada el 7 de agosto de 2013, en el suplemento segundo del Registro Oficial 053, y esta última normativa sí fue aprobada en el actual periodo de gobierno de Correa.
Excelente artículo, con los casos concretos de opacidad del gobierno.
Qué esconden?, por qué no informan?. Ahí hay material para el “sagrado deber de informar” que ocuparía varias sabatinas si realmente hubiera la intención de informar.
El daño yá está hecho, ahora tenemos que concentrarnos en lo que viene, que puede ser decisivo para la supervivencia del Ecuador, que son las próximas elecciones. Los ECUATORIANOS Deben estar atentos y vigilantes, para que sus votos no sean amañados. Ya sabemos que el CNE es correista y quién reparte la torta se lleva la parte mas grande.
Lo que no deja de sorprenderme es, porque a la mayoría de ecuatorianos no les interesa estar informados y enterarse leyendo sólo leyendo. Es mas cómodo sentarse a escuchar programas que como se ha visto les han convencido que vivimos en un país de libertad y oportunidades para todos y no solo para ellos que es la única verdad.
La falta de transparencia, la opacidad garantizan la impunidad de la corrupción. Todo esta orquestado para robar sin sanciones.
En que quedó que la ley y los medios de comunicación están para dar “servicio de información”, reformaron entre ellas y ellos, los dementes lúdicas, la Constitución para los 300 años y ocho cuartos, y se burlan del pueblo con cinismo, lo que prevalece es la transparencia del secretito. Decretitos y reformitas cómplices para tapar, encubrirse, cambian por abajo lo que les conviene ilegal, anticonstitucional, de que institucionalidad democrática pueden hablarnos? Aqui establecieron “la ley del depredador” la “ley mordaza”, las “leyes: del montaje, chantaje, propaganda amarillista, manipulación, la ley del florón, del maquillaje, billete en fuga, del loco, ciego, sordo y mudo, del yo no fui, quién tan será, ya estaba ahí robando antes que le pusieramos, recién me desayuno, llegaron los papeles hace fu, el debido proceso,??? Como se puede notar todas éstas leyes vienen rigiendo en el régimen de la revolución ciuadadana que mas transparencia se puede hablar. Se refundó con 🐀🐀🐀la honorable corrupción impune e indemne con Alianza Atraca Pais, y vamos por más…mañoserias y falta de escrúpulos…fuera Correa fuera.
La verdad es una sola Roberto: el país está quebrado, tanto es asi que los empleados públicos deben pagar de su sueldo toda la aportación al IESS para ser atendidos, e inclusive están impagos hasta 3 meses de sueldo en muchos casos y a esta entidad le deben $7 mil millones, al menos eso dicen, pero debe ser mucho mas; hay una larga lista de proveedores esperando pagos desde el año anterior y que sigue creciendo; no sabemos cuanto dinero deben al BCE y tampoco cuanto se han gastado de la reserva monetaria.
Esa es la verdad y obviamente las autoridades que deben dar la información requerida, prefieren violar la ley antes que el pueblo se entere de la realidad económica del pais; Moreno lo sabe y ha comenzado a tomar distancias de Correa de manera directa y creciente, para curarse en salud si es que llega a Carondelet y que no le acusen de encubrir la realidad económica del pais.
El próximo gobierno, sea quien sea, va a tener que tomar durísimas medidas económicas, entre ellas declarar como ilegal parte de la deuda, y renegociar otra, amén de que no tendrá un solo dolar por la venta del petróleo porque toda la producción hasta el 2020, es para pagar a China; no le quedaría más que acercarse al FMI, y tratar de que el país comience a salir del pozo que esta ahora; debemos tener clara la película y preparamos desde ya a lo que venga; tenemos palpable el ejemplo de Argentina, cuyo Gobierno esta tomando medidas extremas para sacar a su país del estado de postración que le dejo Cristina Fernández, acá va a pasar exactamente lo mismo: sólo cuando termine este reinado, aparecerán verdaderas y dolorosas sorpresas.
Están preparando el fraude electoral para salvar el pellejo de no ir a la carcel
La impunidad se alimenta del secreto.
NO desmayar en seguir desenmascarando al gobierno, sus mentiras y contradicciones para evitar que sigan en el poder. El pacto ético del que habla el fulano presidente no es más que una cortina de humo para tapar toda la opacidad que ha caracterizado a los robolucionarios, y los ecuatorianos concientes tenemos la obligación de difundir las corruptelas del gobierno evitando que la masa sea engañada otra vez y reelijan a estos individuos. Los 4 pelagatos y sus fuentes deben acentuar el nivel de denuncias como contraparte a las atosigantes y ridículas cadenas informativas diarias del gobierno.
Tipica actitud de un socialista de pacotilla( abusador, inconsecuente, inhumano, codicioso que solo piensa en su conveniencia y se rie de los ilusos a los que convencen fácilmente ofreciendoles actuar al estilo Robin Hood, y solo esperan les den votos para atracar lo que mas puedan una vez que estan en el poder ), como el cuentero maneja un doble discurso usan medios públicos para gritar a los cuatro que estan apegados a las leyes, engañando, manipulando, tambien usan a periodistas vendidos.
Tanto se jactan de ser manos limpias y transparentes y no se entiende x que no permiten el acceso a la información?, x que secuestran documentos, x que tanto sigilo?
Los socialistas del siglo XXI a ke le temen, acaso tienen una olla de grillos, llena de irregularidades?
Muy bien Roberto. Aqui se podría aplicar eso de que “EL QUE NADA DEBE NADA TEME”, y sabemos de las corruptelas que hay que tapar. No se entiende de otra manera, el miedo para entregar información, que debería ser pública.