Rafael Correa no se cansa de tener la razón. De repetirse. De hacerse monumentos por los diez años de su gobierno. No se cansa de sabatinas extenuantes en las cuales, además de echarse flores, pasea su ego, habla de él en tercera persona, lanza piropos, regaña a funcionarios, hace chistes y proselitismo abierto y desembozado por los candidatos del oficialismo. Volvió a hacerlo hoy en Atacames, en el enlace ciudadano 509.
No se cansa de hacer lo mismo, de decir lo mismo. De recitar un rosario de lemas, frases hechas y consignas que sin duda serán la marca de esta década. En cada sabatina lo hace. En la de hoy, por ejemplo, dijo: “esto es un sueño compartido”. “La década ganada”. “La patria donde los sueños no son imposibles”. “El nuevo Ecuador que hemos construido juntos”. “Esta revolución que ya está en las entrañas del pueblo ecuatoriano”. “Esta obra de la revolución ciudadana que nos llega de orgullo profundo”. “La década en la que todo el mundo ha ganado”. “Nadie puede negar el cambio histórico que ha tenido la patria”.
Correa no se cansa de decir y hoy dijo “El Ecuador que ya cambió”. “Los ojos del mundo están puestos sobre la revolución ciudadana”. “Somos un ejemplo para la región y para el mundo”. “Esta es la patria nueva, eso es lo que no podemos perder”. “A reaccionar , compañeros” “Día histórico para la salud (la educación, el medio ambiente…). “El pasado nunca más”. “Que no nos vengan con cuentos”. “Los que nunca hacen nada y juegan con la buena fe de la gente”. “Los que mienten, mienten y siguen mintiendo”. “Nos quieren robar hasta la esperanza”. “Buscan quitarnos la alegría” . “Huyan de esa gente, compañeros”.
No se cansa de decir y hoy dijo la década en que “El país ha pasado de los imposibles a los grandes logros”. “De los últimos lugares a ser los primeros”. “La década ganada para la inmensa mayoría del pueblo ecuatoriano”. “Esto no es que fuera imposible, era impensable hace diez años”. “Esto no se ha visto en la historia del Ecuador y probablemente del mundo”.
Dice y hoy dijo: “No han podido desestabilizarnos”. “Los volveremos a derrotar, compañeros”. “Les duele en el alma la victoria de la revolución ciudadana”. “Con nosotros se les acabó la fiesta”. “Si no tienen la decencia de luchar, aunque sea respeten a los que estamos haciendo mucho”. “Los que nunca han hecho nada”. “Basta de tanta mediocridad”. “Estos son lo peor de lo peor”. “Esta gente ya no sabe que inventarse”. “Gente que perdió hace rato hasta vergüenza”. “Los culpables son los mismos de siempre”. “Todos estos que nos avergüenzan”. “A no dejarnos engañar por los mismos de siempre”. “Esa gente es una contradicción ambulante”…
Correa no se cansa de decir y hoy dijo, contra tanta evidencia: “Somos gente buena, gente ética”. “Este es el gobierno de manos limpias”. “Somos gente de manos limpias y corazones ardientes”. “Los que nos hemos jugado hasta la vida por combatir la corrupción”. “Estos sepultureros del país no nos van a venir a dar lecciones de moral y buenas costumbres”. “Todos a rechazar la prensa corrupta”. “Qué bruto, póngale cero”. “A huir de la mediocridad como de la peste”. “Ya basta de abusos y basta de tanta politiquería”. “Si la naturaleza se opone a nuestros designios, lucharemos contra ella y la venceremos”. “Compañeros, a hacer las cosas extraordinariamente bien, extraordinariamente rápido”.
Dice y repite (y hoy lo hizo) “Nunca más ese viejo país”. “Nuevamente se quedaron con los churos hechos”. “No nos desestabilizarán, no nos derrotarán”. “Esta revolución no la para nada ni nadie”. “El pasado nunca más”. “Prohibido olvidar compañeros”. “En la patria nueva, nadie se encuentra solo compañeros”. “Ni eso entienden los fundamentalistas de siempre”…
Correa no se cansa de ensalzarse. De creerse macanudo. El mejor. De otorgarse diplomas de gran economista, de excelso administrador, de extraordinario gobernante. De concebirse, mostrarse y presentarse como un ser superior. Debe ser agotador sentirse inigualable, inconmensurable, insustituible. Debe ser abrumador llamarse Rafael Correa.
En esta lógica, de ser un gigante más allá del bien y del mal, es evidente que nada puede afectarlo. Ni siquiera las denuncias de Odebrecht que, en principio, señalaban directamente a su gobierno. En la sabatina, quedó claro que él retoma la iniciativa en ese tema. Para él, los corruptos son los socialcristianos y (aunque lo dice con pinzas) Rodas-Terán-Sanmiguel. No solo insistió en la lista de parceros de Odebrecht en la cual aparecen Jaime Nebot, Heinz Moeller y otros miembros del socialcristianismo. Señaló como jefe de la mafia de Petroecuador a Charlie Pareja Cordero y eso desde el gobierno de Febres Cordero (en el cual estuvo Alexis Mera que tiene a su lado).
Poner el acento de la corrupción en el socialcristianismo le da algunas bocanadas de oxígeno a su gobierno. Y le sirve para construir una nueva teoría sobre la corrupción en la refinería de Esmeraldas: ahora resulta que Charlie Pareja infiltró a Carlos Pareja Yannuzzelli en la Revolución Ciudadana; tan sana ella, tan ética. Pareja Yannuzzelli no solo es un corrupto y un traidor: es un sicópata. Entregó la revolución a un enemigo acérrimo… Lo dice enfáticamente, para que le crean. Lo dice y produce igual ternura que la que genera Alexis Mera mostrando correos de supuestos corruptos y contando cómo el gobierno investiga a Pareja Yannuzzelli en otros países… donde no han encontrado nada.
Correa se defiende atacando y lo hace tan histriónicamente que da la impresión de estar declarando la guerra a Jaime Nebot. Es evidente que no cree lo que dice el alcalde de Guayaquil para defenderse y que, además, se burla de él. Correa sabe que la lista de supuestos corruptos socialcristianos, que publicó en su cuenta de Twitter, es para él una mina de oro que va a explotar. Por eso anuncia que enviará un grupo de altos funcionarios a Brasil para buscar más información sobre ese y otros gobiernos. Mientras no salga la lista con nombres de su gobierno, divertirá la galería, como lo hizo en la sabatina, con Nebot, Moeller, Rodas, Terán, Sanmiguel… Y si esa lista apareciera, dirá que es falsa. No aceptará -también lo dijo en la sabatina- que le digan corrupto. Sí, corrupto.
Foto: Presidencia de la República
Sólo quisiera preguntarle porque sigue escribiendo sobre Correa?? Ya lo dan por destruído, acabado, es un don nadie, profugo,etc etc. No entiendo….. como decía Alvarito.
Muchos de los problemas de Ecuador aún están para resolverse, respeten al presidente y estén orgullosos de él. Cada uno forme un criterio libre de individualismos, el egoismo no es una sensata cualidad humana, es una repugnante actitud.
Miren y aprendan de esto
https://www.youtube.com/watch?v=xEZwuJ_lMY8
Antes que nada se debe tener en cuenta que nadie es perfecto y no se puede tapar el sol con un dedo, no basta con hablar y alzarse con flores para evitar los problemas, se necesitan soluciones practicas que lleven a dicha conclusión, para el presidente Rafael Correa le basta con hablar y tratar de mejorar su imagen para que las cosas mejoren cuando claramente no se puede dar de dicho modo.
En lo personas siento que cada vez la política de este país se esta convirtiendo en un dialogo más no en una búsqueda de los problemas con acciones reales.