Algo más de 24 horas han pasado desde que la Plataforma Financiera sufrió una espectacular inundación y las únicas explicaciones oficiales sobre el caso son unas pintorescas dadas por el presidente Correa y un boletín de prensa del Servicio de Contratación de Obras, Secob. En ambas versiones se dice que los colectores de agua lluvia del fueron los culpables, aunque Correa lanza una tesis muy curiosa, sobre todo si se toma en cuenta que el costo de la obra bordea 240 millones de dólares: descubrió que cuando llueve con mucho viento puede entrar agua por ciertas partes que se van a cubrir. Las declaraciones las hizo en Tababela, poco antes de tomar su avión para ir hasta Argentina donde recibirá otro Doctorado Honoris Causa, esta vez en la Universidad de Quilmes.
Correa, además, anunció que para evitar otro colapso como el ocurrido el lunes 15 de mayo en la tarde, se construirá un nuevo colector de agua lluvia que costará 800 mil dólares. Es decir que a los 238 y pico de millones que costó el edificio habrá que aumentar esa cifra para construir un recurso que no se tomó en cuenta durante la construcción. El Presidente también sostuvo que en la terraza del flamante edificio hay unos jardines y que por ahí se filtró agua. La versión de Correa, a pesar de lo trivial y poco responsable tomando en cuenta la envergadura de la obra y su costo para el fisco, tiene al menos una virtud: trata de explicar el origen de las cascadas de agua que caían del techo porque de lo que dijo el Secob ese fenómeno no tenía explicación posible.
#plataformafinanciera Pdte: se descubrió que cuando llueve con mucho viento puede entrar agua por ciertas partes, se va a cubrir @ecuavisa pic.twitter.com/LXdyVb9I5Q
— Jacqueline Rodas (@JacquelineRodas) May 16, 2017
Las declaraciones de Correa y el boletín del Secob tratan, en todo caso, de exculpar a la responsable de la construcción: la empresaChina Camc Engineering Co. Ltda. Ni Correa ni el Sercob han dicho que pedirán explicaciones a la firma constructora ni a la empresa que hizo la fiscalización de la obra. Para Correa todo se soluciona con pagar algo más por el colector y la impermeabilización del techo, mientras que para el Sercob el que tiene que responder es el Municipio de Quito.
“Después de la visita técnica a esta edificación, el Servicio de Contratación de Obras, Secob, desmiente información replicada en redes sociales, en las que se sostiene que estas afectaciones se debieron a problemas con la infraestructura, ya que el problema o situación extraordinaria se dio, sin lugar a dudas, por el colapso de los colectores externos existentes en las calles Villalengua y Ayora”, dice el boletín que el Sercob distribuyó pasado el mediodía del martes 16 de mayo. El Secob responsabiliza del tema de los colectores al Municipio de Quito que, por su lado, dijo en un boletín que lo que ocurrió con los colectores es que se taponaron con material de construcción generado en la misma obra de la empresa china.
Según el Municipio la empresa china hizo un desvío del colector, que aún no es entregado oficialmente a la ciudad, estaba taponado con escombros y materiales de construcción que se encontraban en la zona donde está la Plataforma Financiera.
La Secob, con su boletín, pretende dar por cerrado el caso atribuyendo la responsabilidad de lo ocurrido al Municipio y a la naturaleza. Resulta, sin embargo, insólito que en un tema que implica la construcción del edificio público más grande y probablemente más caro del país no haya salido un solo funcionario de alto nivel o contratista a responder preguntas que son obvias y a entregar información que los contribuyentes, que tarde o temprano pagarán lo invertido en el edificio, se merecen. ¿Cómo es que el agua entraba por los techos si la culpa es de los colectores? ¿Cómo es que otras edificaciones de la ciudad no sufrieron una estragos similares si fue, como sostienen, la lluvia más fuerte de los últimos 42 años? ¿Cómo pueden explicar la construcción de edificio que si no fue capaz de tolerar ese aguacero tampoco lo hará si el próximo aguacero resulta ser el más grave de los últimos 52 o 62 años?
[Boletín oficial] #PlataformaFinanciera se encuentra operativa tras soportar intensas lluvias. @MashiRafael pic.twitter.com/LMHxWtyezn
— SECOB (@SECOB_Ec) May 16, 2017
La evidencia apunta a que lo que sucedió se debe a una pésima e improvisada construcción del edificio. 4Pelagatos conversó con tres ingenieros expertos en construcciones civiles que conocen de cerca el caso de la Plataforma. Todos coinciden en que hubo deficiencias arquitectónicas y de ingeniería en la construcción. Problemas que se deben a que la empresa China Camc Engineering Co. Ltda. al parecer pagó a otras similares del Ecuador -que subcontrató- montos muy inferiores a los que ellos cobraron al gobierno. “Al menos ganaron entre 60 y 70 millones ahorrándose en la construcción, sin contar con los intereses del préstamo”, dijo a 4Pelagatos un importante constructor ecuatoriano que conoce de cerca el proceso con la Plataforma.
El viernes inmediatamente anterior al lunes de la inundación, ya hubo problemas con agua empozada en la plazoleta que queda a la entrada del edificio. A pesar de que ese día hubo lluvia tenue, el agua se acumuló y mucha gente tuvo problemas para salir y entrar cómodamente al edificio. La plazoleta no tiene caída o es tan mínima que no funciona cuando hay lluvias fuertes. Uno de los constructores contempla la posibilidad del problema causado por los colectores de agua. Para construir el edificio se cerró una vía de acceso que iba de Este a Oeste, por donde pasaba un tubería de alcantarillado. La empresa china debió haber construido un nuevo sistema de evacuación de agua lluvia por debajo del edificio o alrededor del mismo y haber aumentado la dimensión de dichas tuberías por el aporte del agua producida al haber cubierto la zona con materiales impermeables. ¿Por debajo del edificio pasaba un colector al cual se le hizo desvío o bypass en forma de C? ¿Ahora debe sortear el agua tres codos de 90 grados hasta volver al colector original? Esas versiones corrieron por las redes. ¿Y qué dice la Secob? “El Servicio de Contratación de Obras -dice en su boletín- presentará al Municipio el diseño para el sistema de alcantarillado pluvial del sector para garantizar que tanto la Plataforma de Gestión Gubernamental Financiera y las otras instituciones bancarias y comerciales de su entorno no se vean perjudicadas por este tipo de eventos”. No da fechas ni mayores detalles.
Este problema deja intacto otro: la existencia de cascadas que caían del techo y corrían escaleras abajo como se observa en los cientos de videos de circularon en redes. ¿Qué culpa tienen los colectores del agua que caía por el techo?
Los constructores consultados afirman que esas cascadas están relacionados con la construcción de la estructura y del techo mismo. Por ahorrarse dinero, la empresa china colocó en la cubierta una estructura de cerchas (barras rectas unidas entre sí en sus extremos) que se usan en los galpones pero que no logran tapar herméticamente al edificio. Era obvio que el agua se iba a colar por los costados, sostiene uno de los expertos consultados. Otro problema que podría explicar la cantidad de agua que ingresó al edificio, es el que ingenieros y arquitectos llaman las tapajuntas: al parecer las juntas fueron tan mal colocadas que quedaron espacios sin cubrir. Uno de los constructores sostiene que, desde hace meses, se había detectado, además, problemas con unas aperturas horizontales que eran parte del diseño arquitectónico y que impedían que se instalen bien los cielos rasos y las instalaciones eléctricas.
Aquí entra la curiosa explicación de Correa: el agua ingresó al edificio por la terraza donde, según dijo, hay jardines. Esto y el viento son los causantes, a sus ojos, de que la lluvia se filtre. Dos problemas que para él tienen solución. El primero, con una impermeabilización y, el segundo, con la extensión de la cubierta. Lo que no dijo es si esos costos, como debe ser obvio, correrán por cuenta de la contratista china. Tampoco habló de sanción o multa al constructor por no haber hecho dos cosas que, aparentemente, son tan obvias para evitar las inundaciones.
Para los expertos consultados, no hubo una adecuada planificación en la construcción de la Plataforma Financiera. Ejemplo: el edificio se diseñó para más de tres mil empleados y apenas hay 500 estacionamientos. Amén de los problemas en la ingeniería del edificio, está la falta de transparencia e información sobre la empresa china que hizo la construcción. La China Camc Engineering Co. Ltda. es una empresa que fue vetada por el Banco Mundial para hacer trabajos por las acusaciones de corrupción que se han hecho en su contra. Entre esos escándalos está el que saltó en Bolivia donde una novia del presidente Evo Morales aparecía como representante de la empresa. La BBC de Londres publicó además un reportaje sobre el oscuro trayecto de la empresa en América Latina. Diario El Universo publicó reveló en 2016 que en dos hospitales en Guayaquil esa empresa cobró mucho más dinero que el pactado originalmente con el gobierno a través de la figura de “contratos complementarios”.
Para Correa y el Sercob lo ocurrido fue simplemente una circunstancia que puede ser solucionada pagando algo más dinero. Ni para el uno ni para el otro hay responsables que tienen que dar explicaciones o pagar por las fallas. Esa impunidad consentida la terminan pagando los contribuyentes.
Estimado Martín: los urbanistas consultados están equivocados al menos en un aspecto. Los 500 estacionamientos son un problema, pero por que son demasiados, no por muy pocos. Es un absurdo suponer que los 3 o 5 mil empleados que trabajarán ahí tienen que ir en sus autos particulares, y peor todavía que se les deba proveer de lugares de parqueo.
Los parqueos encarecen la construcción y tienen una utilidad social negativa: es mejor no consturirlos aunque fueran gratis. Los parqueos generan tráfico y, viceversa, hoy es un precepto aceptado por urbanistas y expertos en transporte que la mejor manera de disminuir el tráfico es limitando y encareciendo los lugares de parqueo. En ese sentido se están revisando las políticas de parqueo de las ciudades. Ahora se aconseja: a) limitar parqueos, b) encarecerlos, c) no ubicarlos en sitios bien servido por transporte público ni cerca de estaciones de transporte público, d) no ubicarlos en sitios generadores de viajes, e) si se los hace, ubicarlos en las periferias de las centralidades, nunca dentro de ellas.
Es por eso que cada vez más ciudades, incluso en Latinoamérica, están eliminando las requerimientos de parqueos mínimos en las construcciones y en los comercios , e incluso estableciendo máximos. En Inglaterra, varios municipios han establecido un impuesto para las empresas que proveen parqueos a sus empleados y el edificio más alto de Europa, el recién construido The Shard, en Londres, con una población de 12 mil usuarios diarios, tiene solo 48 puestos de parqueo.
Aquí, tanto en el sector de la plataforma como en la ciudad en general, las políticas son exactamente las contrarias, las que generan tráfico y empeoran la movilidad, la economía y el ambiente. En el sector del corral de borregos motivo de tu artículo el absurdo al respecto es enorme. Además de los 580 puestos construidos allí (aunque no haya una cafetería), están la enorme cantidad parqueos de los centros comerciales, los cientos de parqueaderos de cada edificio de los que están construidos o proyectados en la Naciones Unidas, los parqueos subterráneos en La Carolina que el municipio está empeñado en hacer y, necedad de necesades, el edificio de parqueos para el que el municipio acaba de dar permiso a tan solo unos metros del corral.
Pero toda la ciudad camina hacia allá: hace poco se aprobó con el auspicio del concejal Patricio Ubidia, una ordenanza boceteada por los dueños y administradores de parqueaderos, con la que se promueve la construcción de parqueaderos, se les brinda incentivos y subsidios y se controla a la baja su precio. Es decir, una receta para el desastre.
EL Licenciado electo al ver la inundación ha preguntado: QUANTICA agua se ha entrado en la Plataforma ?
De acuerdo a los datos de los rótulos de información financiera del edificio y los costos de construcción del mismo, colocados al frente durante la construcción , el costo por metro cuadrado es alrededor de 2000 USD, esto ya es una infamia de sobreprecio porque en edificios particulares nuevos e inteligentes, alrededor del parque La Carolina, se encuentra precios por metro cuadrado alrededor de 1600 USD, en este costo está incluido además del costo directo, los costos de financiamiento, la utilidad del constructor, la utilidad de la inmobiliaria, la utilidad del financista, el costo de oportunidad, etc. (en obra pública algunos de estos costos no se consideran) y donde usted tiene derecho a que le arreglen inmediatamente cualquier daño y nunca se topará que el agua lluvia caiga por el techo de su departamento.
La inundación de la plataforma financiera es un insulto a la ingeniería básica, pero es la insignia del modelo de gestión de la revolución y de este gobierno, que sin empacho y con todo descaro sale el mandamás a decir que “eso es normal en una construcción nueva”, no puede haber alguien con más desvergüenza que eso…..”cuaaaanta doble moral”.
Mucha gente no abrió los ojos en abril y el CNE decidió que tengamos un periodo más de este tipo de gestión, donde muchos facinerosos seguirán haciendo su agosto…..hay que tener fé, nada es para siempre, tarde o temparano tendrán que pagar.
Cuanto tarifa Correa como defensor de contratistas truchos, o funcionarios involcrados en temas de corrupción ? Se le paga para que defienda los interses del pais, no de sus amigos ni de sus benefactores
Otro castigo a la sobervia y vanidad de este pobre Gobierno. Y como de constumbre el pueblo ingnorante se quedara callado por miedo.
ESTE MARAVILLOSO GOBIERNO CREE QUE PUEDE HACER “CHINOS” A TODOS LOS ECUATORIANOS. YA LE CONOCEMOS DEMASIADO, PERO DA MUCHA PENA QUE TODAVÍA TENGA ESBIRROS QUE LE SIGUEN EN TODO
Para la entrega de una obra por parte del contratista al cliente, se deben realizar las pruebas que exigen el “Control de Calidad” para comprobar el buen funcionamiento de la obra, como son : instalaciones eléctricas, sanitarias, hidráulicas etc, que exige las especificaciones técnicas del contrato. En este caso la obra no ha sido probada seguramente por la premura de la inauguración y esas son las consecuencias.
Contratista y Fiscalización tienen que responder por daños y perjuicios.