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Periodismo: el gobierno fabrica otro cuento chino

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“Los medios públicos se renuevan para la ciudadanía”: con este título diario El Telégrafo dio cuenta de los cambios que el gobierno está operando en los medios que controla. Rafael Correa sumó 29 en ese, que pasó a ser el mayor monopolio mediático del país. El Fantasma, propietario de El Comercio, tiene 17 medios y 87 frecuencias.

Por supuesto este cambio se hace en un ambiente de mayor libertad, es impulsado por personas de buena voluntad y el discurso que lo ampara es más amigable: hacer periodismo y no propaganda; ser inclusivo en vez de ser partidista; devolver la voz a la gente e ir a su encuentro… y tratar de ser autosustentables para no ser una carga para el fisco.

Las personas cambian, el discurso varía pero la situación de fondo permanece: el gobierno de Lenín Moreno recibió ese pool de medios y, en vez de deshacerse de ellos, se inventa, para conservarlos, un plan de modernización que se basa en una teoría: convertir esos medios, que fueron usados por Correa y su gobierno, en medios públicos. No hay una ley que diga a los ciudadanos ecuatorianos a qué se debe parecer un medio público. No se sabe, entonces, cómo esos medios harán para lograrlo ni qué debe esperar la sociedad de ellos.

No obstante, la teoría que está vendiendo el gobierno ya ha sido comprada por periodistas y actores sociales. En esa teoría, el gobierno mete mano en los medios, pero no los usará para sus intereses. Operativiza todo este cambio desde el campo político, pero dejará que en los medios florezca la lógica periodística. Paga a los periodistas, como si fueran funcionarios públicos, pero los dejará pensar, escribir y actuar como librepensadores. En esa teoría, se da por sentado que el gobierno modernizará el periodismo y aceptará que los periodistas escudriñen todas sus costuras…

Si esa teoría pudiese ser verosímil implicaría que, al fin, se resolvería la contradicción que existe entre el poder político y el periodismo. Y no: esa contradicción es irremediable. Ecuador vuelve al falso dilema que plantearon hace años ciertos periodistas que saltaron a la arena política. Algunos dijeron que era necesario en este oficio conocer los dos lados del espejo: conocer la verdad en una redacción; aprender a ocultarla en el otro. Como si la estructura y la lógica del pensamiento político y sus mecanismos de acción pudieran ser concebidos al margen de la deontología periodística, y no la afectaran. Pues no: no hay puerta giratoria posible entre los dos oficios.

Correa también había prometido mejorar la calidad del periodismo. Lo dijo dando a entender que él, como poder poder político, quería tener mejores críticos delante. Con ese cuento, que algunos periodistas también compraron, Correa fabricó un monopolio mediático al servicio de su Estado-de-propaganda y por poco liquida el verdadero periodismo en el país.

Tras una década de ese tipo de falacias, es inquietante ver lo que el gobierno de Moreno hace en el campo de la comunicación: mantener el monopolio mediático, gastar en él alrededor de $100 millones anuales, generar una competencia desleal con la industria periodística que Correa casi quiebra y, sobre todo, aupar un embuste: que el poder cambiará para bien el periodismo y, en este caso, lo volverá público.

Esa tarea –como modernizar el periodismo en general, tras diez años de correísmo– es un trabajo que, por las dinámicas que conlleva, se debe hacer desde la sociedad y contra la lógica del poder. De los poderes. Porque ningún gobierno puede mejorar el periodismo; tampoco el público. Ningún periodista que acepte ser funcionario, puede seguir pensando y actuando como periodista. Porque ningún gobierno tiene por qué tener medios de comunicación a su disposición.

Esas verdades han sido corroboradas por la historia del periodismo. No tienen que ver con la actitud más o menos bonachona de Lenín Moreno o con la calidad humana de Andrés Michelena. Tampoco tiene que ver con el discurso prefabricado y fervoroso de los periodistas contratados para esa tarea imposible. Tiene que ver con la lógica intrínseca del poder político.

El gobierno, como cualquier gobierno, debe tener órganos, pocos y especializados, de difusión. Pero los medios que tiene debe devolverlos a la sociedad y no conservarlos bajo el pretexto de inaugurar con ellos el periodismo público. Ese periodismo, que es una necesidad en el país, no puede depender, como depende en este momento, de la buena voluntad presidencial.
Mientras tanto lo más sano es exigir al gobierno que saque sus manos de la comunicación (nada ha hecho sobre la Ley de Comunicación) y acabe con todos los organismos que creó el correísmo para eliminar a todos aquellos que no se comieron el cuento de que es tarea del gobierno hacer buen periodismo…

Foto: El Telégrafo

18 Comments

  1. Este gobierno pretende rescatar la confianza y credibilidad que por diez años se fue por sólo hablar “cosas bonitas” . Este falso periodismo trajo pérdidas millonarias a la institución porque nadie compraba el diario. Esta pagina anteriormente describió acerca de esta cruda realidad. Por esta razón el periodismo es serio y honesto, esto resulta en un modo democrático de darle vida a un periodismo veraz y confiable

  2. Para qué necesita el gobierno tantos medios?
    Sería suficiente como medios públicos nacionales: 1 Canal de TV, una radio y El Telégrafo, pero autosustentados y no con financiamiento del presupuesto nacional. No se justifica medios “propios” de cada función del Estado.
    Para cadenas o enlaces, la ley faculta incorporar a los medios privados.
    El licenciado debe demostrar con hechos que realmente quiere hacer cambios, de lo contrario su credibilidad inicial se erosionará rápidamente.

  3. La verdad es que no entiendo hasta cuando la sociedad ecuatoriana es capaz de no hacer nada más que observar, oír y esperar hasta que “alguien” haga algo que finalmente pueda parar tanta porquería, corrupción, sinvergüencería, cinismo, abuso, etc, etc…

    TODOS los delincuentes con descarada y grosera burla pasean sus nauseabundos huesos cuantas veces se les viene en gana frente a las mismas narices de TODOS, toda la gavilla AP se sienten impunes, invencibles y bien sapos porque es clarísimo que solamente tienen que inventarse cualquier huevada para convencer a todos los pendejos que hasta su dignidad la han perdido y saben muy bien que de ahí en adelante NO PASA NADA.

    El tramposo licenciado tuvo la oportunidad de ORO para hacer que los pendejos se olviden de la FRAUDULENTA y sinvergüenza forma que lo llevo a la “presidencia”, lo único que debía hacer es cumplir con los 10 mandamientos bíblicos NADA MAS… quien sabe tal vez lo hubiese conseguido, pero claro eso es sencillamente IMPOSIBLE cuando se tiene semejante RABO DE PAJA.

    HORA DE DESPABILARSE MAMITICOS …. YA BASTA CARAJO!

  4. Más importante aún: los medios de comunicación, referidos en el artículo, fueron incautados para supuestamente pagar a los deudores de la AGD. La pregunta es : cuándo los venden ? Y la respuesta es ¡ nunca! mientras estén en las sucias garras de los ladrones cuánticos atraca país.

  5. Para qué necesita el gobierno tantos medios?
    Sería suficiente como medios públicos nacionales: 1 Canal de TV, una radio y El Telégrafo, pero autosustentados y no con financiamiento del presupuesto nacional. No se justifica medios “propios” de cada función del Estado.
    Para cadenas o enlaces, la ley faculta incorporar a los medios privados.
    El licenciado debe demostrar con hechos que realmente quiere hacer cambios, de lo contrario su credibilidad inicial se erosionará rápidamente.

  6. La vigilia debe extenderse a la asamblea, fiscalia, cne, algo se esta cocinando y hay que presionarlos para que se quemen……..

    • Lastimosamente se quedaran los del CNE, en funciones prorrogadas, y eso sería vital para que Moreno al menos tenga los resultados esperados por todos (de sacar a todos los corruptos de AP).
      Aunque no debemos esperar mucho, reflejándonos en nuestro espejo Venezolano.

  7. Si queremos tener un medio público, y no más que uno que con ese sobra, solamente debemos asesorarnos con la BBC y copiar; nada más, ser buenos copiones. Entonces sí , viviremos aires de libertad. El resto debe salir a subasta inmediatamente.

  8. Creo que si se debería meditar en lo que dice el articulo, no escribir por escribir, existen periodistas y existe personas creativas en las noticias (creativas para alterar la realidad de las cosas a su conveniencia), y de esos hay en ambos lados, pero mas en los medios de comunicación privados,

  9. El gobierno del Lcdo se cree de izquierda, y este tipo de gobiernos se expresan a través de una prensa propia u oficial. La necesitan. Tarde o temprano la utilizarán a su favor. Si no fuera así, la pregunta para derogar la ley de comunicación ya estaría en la consulta.

  10. Por definición ningún gobierno puede administrar el país y a la vez medios de comunicación colectiva. Puede tener sanas intenciones Moreno Garcés, pero será misión imposible que El Telégrafo, por ejemplo, con esta “nueva cara” de aparente independencia de los poderes del Estado, pretenda rescatar la CREDIBILIDAD que por diez años se diluyó por sólo hablar “cosas bonitas” del gobierno de turno. Este falso periodismo trajo pérdidas millonarias a la institución porque nadie compraba el diario. 4pelagatos en artículo anterior describió magistralmente esta cruda realidad. Por esta razón, apartándose de su objetivo principal -el periodismo serio, honesto y ético- es que imprime libros para las escuelas fiscales, lo que salva los muebles y ¡¡¡hasta utilidad tienen!!! con una práctica insana, pues como bien dice el señor Hernández, es una competencia desleal.
    Debe el señor Moreno Garcés vender todos estos negocios que sólo han servido, siguen sirviendo, para que unos cuantos ciudadanos llenen sus barrigas y sus bolsillos a costa del sacrificio del pueblo, puesto que las pérdidas por mala y corrupta administración el gobierno se la carga a los más giles. Debe recordar el mencionado ciudadano Moreno Garcés, que todas estas empresas fueron INCAUTADAS por la AGD a la banca cerrada, por lo que se constituye en una obligación moral venderlas para devolver valores a clientes perjudicados.

  11. El Licenciado ha pulsado la tecla PAUSA, eso es todo.
    Los 4 Pelagatos son la voz de los que creemos que estamos en el mismo pantano de hace 10 años, la diferencia: una suave brisa bonachona que aún no acaba con el hedor de la década correista. Ni creo que lo haga.

  12. Gracias Sr. Hernandez. En mi opinión, un medio de comunicación para ser público debe ser mantenido por el público; me explico: mediante donaciones de empresas e individuos que valoran la libre expresión. De esta manera el estado no se involucra en lo público ni tiene injerencia alguna sobre dicho medio. Esto resulta en un modo democrático de darle vida a un periodismo veraz y honesto, y de hecho existe en ciertos países desde hace ya mucho tiempo.

  13. Moreno seguirá chupando ese caramelito que le permite seguir abobando pendejos que le creen…..Moreno defiende a Correa con los hechos…punto.

  14. Según su criterio, solamente los que no están en medios de comunicación públicas son verdaderos periodistas? Eso sí es una falacia

    • El gobierno sigue teniendo ingerencia en los medios privados a los que se les obliga a transmitir cadenas.
      La Ley de Comunicaciones debe ser revisada. No puede estar dedicada a los intereses de un grupo minoritario.

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