El comunicado del gobierno, a propósito de la filtración de un audio del Consejo de Seguridad, publicado en La Posta, en vez de aclarar, enreda. Y enreda porque ese comunicado no luce inspirado en las obligaciones que Lenín Moreno tiene como jefe del Estado sino en la percepción que la opinión tiene de él. Y esa percepción, a su vez, obedece a la fama que se granjeó desde que estaba en la Vicepresidencia: él es, solo puede ser, el policía bueno. El comunicado publicado no aclara nada, como se verá a continuación, porque está hecho para proteger una imagen política construida de la cual es rehén el Presidente. Y para hacerlo, el gobierno no rehusó meter la pata por lo menos cuatro veces.
1: ¿Qué dice el comunicado? Que el audio filtrado corresponde a un Consejo de Seguridad que se reunió después de conocerse que los periodistas de El Comercio fueron asesinados. Y que el audio filtrado descontextualiza las palabras del Presidente. Pero ¿qué dice Moreno en el audio filtrado? Que el Estado no puede ser arrinconado por los terroristas. Lo cual, como principio, se antoja absolutamente correcto. ¿Ese audio descontextualiza lo que dijo Moreno? ¿Entonces lo contradice? ¿Desnaturaliza tanto lo que dijo que invalida el principio anunciado en la filtración?
2. El comunicado dice que la posición de Moreno “fue buscar una salida negociada al secuestro de los periodistas”. Y que así actuó hasta su asesinato. “Posterior a esta demostración de vileza, la posición del Presidente de la República ha sido la de cero tolerancia ante la delincuencia y el intento de extorsión”. Dicho de otra manera, ¿el Presidente llegó al principio de que con los terroristas no se cede sino luego de que esos terroristas probaron lo que son? El comunicado, escrito para probar que el Presidente es un tipo bueno, lo muestra en definitiva como jefe de Estado embarcado en la lógica de los narcoterroristas y engañado por ellos. Lo que era un principio no censurable, en el audio filtrado por La Posta, aquí se vuelve un acto de gobierno errático en el cual la opinión ya no sabe cuál fue el principio rector del Estado en este asunto, cuál fue la estrategia y por qué, con esa supuesta voluntad conciliadora con los secuestradores, esa negociación en curso desembocó en la muerte de los periodistas. El efecto del comunicado es mucho peor que la filtración que pretendió aclarar.
3. Para salvar al Presidente (¿de qué? ¿De inspirarse en un principio correcto?), se pide que se desclasifique toda su intervención. Eso agrava el caso. Porque ahora con todo derecho, familiares y otros interesados pueden reclamar que se desclasifique toda la sesión del Conejo de Seguridad. ¿Y por qué solo esa sesión? ¿Y por qué no las otras conversaciones que tuvieron las autoridades alrededor de ese tema? Así de golpe, la opinión, toda la opinión, se encuentra metida de cabeza en discursos, conversaciones o propósitos que determinaron (o no determinaron) los hechos que llevaron al desenlace que todo el país lamentó.
Una cosa es un principio, un juego de escenarios o las premisas de una estrategia, y otra, muy diferente, es la orden que inspira acciones, mensajes, mecanismos de negociación, incluso tretas para ganar tiempo o ganar posiciones ante gente decidida a asesinar para obtener sus objetivos. ¿Qué puede probar en ese marco oír al Presidente discurrir ahora que, según el comunicado, estaba hablando tras los hechos consumados? Esa intervención puede salvar la fama de hombre humanitario a Moreno, pero no permitirá conocer la verdad de lo ocurrido. El gobierno sigue cazando tilingos en este tema y saliendo al paso de lo que aparece. Eso no es una política: son parches.
4. Mientras se anuncia que se va a desclasificar la intervención del Presidente, se advierte que esas sesiones son secretas, que una filtración es una infracción penal y que jurídicamente se podría considerar como un atentado a la seguridad nacional interna y externa del Estado. Es una advertencia que concierne únicamente a aquella persona que filtró el audio. Fue ella la que violó el juramento o el compromiso, siempre reiterado en esas sesiones, de que todo lo que allí se dice, se oye o se ve, no puede ser comunicado al exterior.
Es una advertencia que sobra puertas afuera, pues solamente concierne a los miembros de las altas cúpulas del Estado. Moreno no salió mal de esa filtración, como se puede comprobar viendo los comentarios en las redes sociales.
Conclusión: el comunicado del gobierno nada aclara, nada aporta y deja mal parado al Presidente. Un comunicado innecesario. Un error político.
Foto: Presidencia de la República
El señor presidente Moreno en unos sus dichos dijo que los ecuatorianos perdonamos los errores pero no las mentiras…pero bien mentiroso nos resultó este señor y no se hasta cuando lo seguiremos perdonando…nada cambia, este gobierno repite las mismas practicas del gobierno anterior del cual fueron parte y los parió…
Excelente artículo José Hernández. Ya empezaron a meter miedo por hacer conocer las incongruencia del morenismo y de Moreno. Y si lo vieron además en una nota periodística de Teleamazonas, que Moreno en sesión de gabinete, dijo que iban a rifar una joya de otro entre los “excelentes” ministros y el gabinete ampliado. Y le avisaron que la prensa “corrupta” estaba presente. A éstos, les vale el país, mientras sigan gozando de los placeres del cielo azul de la corruptela correísta morenista.
Lo que a mí particularmente me alarma es que sea integrante del Consejo de Seguridad Nacional el irresponsable que se dedicó a grabar subrepticiamente un tema por demás delicado ¿con qué fin? ¿Se puede confiar la seguridad nacional a gente de estas características?
La continuidad de este desconocido personaje en el Consejo de Seguridad es un riesgo para el país. Hay que detectarlo y excluirlo. ¡Es la seguridad nacional!
Efectivamente es asi como Ud lo comenta perfectamente tamaño error politico…otra metida de pata
Me permito discrepar esta parte de su comentario….”obedece a la fama que se granjeó desde que estaba en la Vicepresidencia: él es, solo puede ser el policía bueno….”
Moreno no vio, no escuchó y lo que es peor , calló ante todas las barbaridades acontecidas y hasta lucró de las mismas (viaje a ginebra como dizque delegado)
Ese no es un policía bueno, es un pícaro licenciado.
Saludos y mis deseos de una fiestas felices para 4 pelagatos, su entorno periodistico y los amigos que los leen
San,
Lo de Policía bueno solo está referido a sus actitudes comparadas con las asumidas por Rafael Correa. Nada más. Cordial saludo.
Ya parece la serie de los “Expedientes secretos X” si no es por el periodismo investigativo tantas atrocidades que se cometen sin que salgan a la luz pública, imaginemos por minutos que se llegara a saber todo lo que fraguan entre telones los que se creen dueños del país aquí no habría marcha de chalecos amarillos sino que serían rojos por la sangre vertida por los defensores que buscamos que brille en todo el horizonte la luz de la verdad, el pendejometro no funciona para las mentes nobles.
Recuerde que el licenciado tiene lógica y asesores CUÁNTICOS.