La actitud asumida por María Mercedes Cuesta, en el debate sobre la despenalización del aborto por violación (que expuso en 4P.) es valiente. Basta, para comprobarlo, ver el número y el tono de las felicitaciones pero también de los ataques rastreros que ha recibido. Pero más allá de esto, su actitud es emblemática de lo que puede pasar, en la política o en la esfera pública, cuando una persona -en su caso una asambleísta pagada por los ciudadanos para votar leyes- se hace cargo de la complejidad de la realidad. Ella salió de aquello que Edgar Morin llamó la ceguera paradigmática: es decir, esas doctrinas (mitos, creencias o ideologías) que controlan el pensamiento y destruyen o devoran los hechos.
¿Qué hizo María Mercesdes Cuesta? Cotejar la realidad-real con sus creencias íntimas y concluir que esa realidad no se procesa ni se resuelve reduciéndola o simplificándola a unos axiomas religiosos. La sociedad no es un templo. Y el mínimo de racionalidad invita a dialogar con los hechos; no con valores personales de los políticos, por excelsos que sean. Y los hechos en el caso de la violación son crudos. Al punto que no se sabe, a ciencia cierta, cuántos casos de violación (y de violación de niñas y mujeres que resultan embarazadas) hay realmente en el país. Hay cifras, por supuesto, que son incompletas y que son tenebrosas. Se sabe que 17 448 niñas, menores de 14 años, víctimas de violación, parieron entre 2009 y 2016. Se sabe que, en promedio, unas 2200 niñas, de esa edad, llegan cada año a centros de salud por esa causa. Se sabe que más del 60% de esas niñas no comunicaron lo que les pasó porque temieron que no les iban a creer, no hablaron o les pidieron guardar silencio. Se sabe que la Fiscalía registró 18 154 casos de violación en los últimos cuatro años. Se sabe que Ecuador es el segundo país de la región con mayor número de casos de violación de niñas hasta 14 años, después de Venezuela. Y que si nada se hace, según la propia Ministra de Salud, las estadísticas serán dramáticas en los años venideros. En fin, se sabe, que las políticas que tiene el Estado para enfrentar esta realidad, son extraordinariamente limitadas.
Esas son algunas de las cifras. Pero el drama de cada niña, de cada mujer violada, es un infierno que no cabe en las estadísticas y que no se puede encarar dando cursos de teología. De ahí la importancia que reviste el debate que ha habido en la Comisión de Justicia de la Asamblea Nacional para reformar el artículo 150 del Código Orgánico Integral Penal que solo admite el aborto en dos casos: cuando la madre corre peligro (que no puede ser evitado de otra manera) y si el embarazo “es consecuencia de una violación en una mujer que padezca discapacidad mental”. Se quiere incluir una nueva causal: el aborto no punible por violación en general.
Esa comisión, presidida por Marcela Aguiñaga, ha invitado abogados, genetistas, un sacerdote, la Defensora del Pueblo… que, en definitiva, han demostrado algunas de las aristas que tiene este tema y que no cabe en las convicciones personales de los asambleístas. Una de ellas, clave para la ley, es entender que este es un tema de salud pública que involucra niñas y mujeres a quienes el Estado debe reconocer el derecho de decidir si prosiguen o no un embarazo fruto de una violación. En vez de esto, lo que la ley prevé, en este momento, es castigarlas obligándolas a proseguir con el embarazo y encarcelándolas si abortan.
María Mercedes Cuesta no comulga, desde sus principios espirituales, con el aborto. Pero entendió cuál es su tarea como asambleísta: dar una respuesta pública a un problema público como parte de una política pública desde una ética pública. En su testimonio, dado a 4P., ella habla de la evolución que siguió durante semanas para llegar a la conclusión de que ella no puede, en los hechos, sumar dos castigos a las niñas o mujeres violadas: encarcelarlas y decidir por ellas, desde el Estado, lo que tiene que hacer con el fruto de una violación.
María Mercedes Cuesta entendió que ella no está en la Asamblea para pasear y promocionar sus creencias personales: está para procesar la complejidad de una sociedad que, en los deseos puede ser de una forma pero en la realidad es lo que es. Y requiere de buenas políticas públicas, no de sermones, para que cambie. Ella usó lo que Edgar Morin llama la racionalidad abierta, cuya tarea es dialogar con la realidad; no pretender regularla desde los mitos o las creencias. María Mercedes Cuesta habla del dolor que le causó tomar la decisión. Se entiende que ella tocó los límites de su propia fe y entendió que la función pública debe ejercerse desde la visión laica y que una verdadera actitud ética le exige comprender y argumentar, no ocultarse tras vagos principios pensando que así, con buenos sentimientos, se gobierna una sociedad.
Los insultos y anatemas que le han lanzado muestran cómo ciertos grupos prescinden de la realidad y confunden la esfera pública con su iglesia. Las sociedades se gobiernan con leyes no con dogmas (respetables para cada uno en lo privado), pero irracionales para administrar realidades dolorosas.
Foto: Asamblea Nacional.
De verdad no fue a votar? De verdad Sra. Cuesta?
Excelente señor Dr. Fernando manzo Flores, aquí no se trata de defender dogmas o religiones, me considero cristiana y no religiosa. Usted lo ha manifestado con claridad científica la formación del ser humano empieza desde su concepción y por qué atropellar al ser que no tiene voz y no castigar al infractor que que comete la violación con leyes más duras, desde luego no estoy deacuerdo con que la mujer violada aborte por su propia voluntad vaya a la carcel, pero eso no me da la facultad para pensar que se tiene que matar dentro del vientre para evitar tal situación con leyes que no protegen la vida ni el bienestar físico, mental y espiritual del ser humano. El Estado con tanto impuesto que nos ahogan deberían crear centros de apoyos para estas mujeres ultrajadas ya que no hay un Estado que promueva leyes fuertes contra tales delincuentes que ultrajan a niñas y mujeres indefensas. Me entristese que el señor HERNANDEZ se alinie a esta voz mostruosa de los abortistas que por supuesto si hubiera tenido una madre pro aborto no estuviera escribiendo en esta página digital.
Hay un error la palabra es monstruosa
Sobre el aborto:
Promulgar leyes, imagino debe ser complicado o quizá los seres humanos lo hacemos complicado para permitir la manipulación de algún grupo que quiere obtener alguna ventaja sobre los demás. Las leyes en su esencia son y deben ser para permitir una convivencia humana en armonía, que impida la agresión de unos a otros. Y las leyes deben ser pensadas, escritas y promulgadas por las mentes lo más sabias posibles de una nación. Y leyes hay, lamentablemente, muchísimas que el común de los ciudadanos las desconocemos y, para complicar aún más, leyes a las que cada cierto tiempo le cambian su redacción y su sentido que incluso los juristas no se ponen de acuerdo en su interpretación. Hay leyes que aparecen por novelerías políticas, ideológicas o por la presión de algún colectivo social en un momento determinado. Y son este tipo de leyes las peligrosas, las que distancian, las que enfrentan y no concilian, las que retrasan el progreso, las que cobijan las injusticias, las que no tienen razón de ser y deben ser echadas al tacho de la basura, aunque lo mejor sería: evitar su promulgación.
Para proclamar una ley sobre un tema determinado, los autores deben conocer el tema, investigar, asesorarse, oír diferentes opiniones, escuchar a los expertos y luego sí, con todo ese conocimiento recogido, reflexionar y con una alta capacidad de síntesis y conocimiento gramatical redactar una ley que cumpla con los objetivos generales de toda ley y con el objetivo específico de la ley que quieren proponer. Pues bien, se está discutiendo la emisión de una ley que permita a la mujer tomar la decisión de abortar. En mi condición de ciudadano y de médico me permito hacer llegar mi opinión con la esperanza de que sea leída, estudiada, analizada y verificada. Tengo la firme convicción de que en algo ayudará a tomar la mejor decisión.
No obstante que la ciencia ha demostrado desde muchísimo tiempo atrás que la vida humana comienza desde el momento de la concepción, no lo consideremos en esta toma de decisión, pero puede tomar cualquier libro de Embriología Médica y constatará que en ellos se describe el crecimiento ordenado del nuevo ser, y tan exacta y maravillosa es la evolución del ser humano en el vientre materno que en meses, semanas y hasta en horas sabemos por qué etapa de su proceso de desarrollo se encuentra. La ecografía es el examen que confirma lo que expongo y es más, nos permite ver al nuevo ser desde que tiene 2 a 4 milímetros de longitud –sí, 2 a 4 milímetros–; la actividad vital del nuevo ser se la evidencia desde que tiene apenas escasos centímetros de longitud: polo cefálico, latido cardiaco, movimientos de flexión y extensión de su cuerpo, movimientos de pataleo de las extremidades inferiores y lo que más alegra y emociona a la madre es cuando ve a su hijo llevar sus esbozos de extremidades superiores a la boca. A pesar de estos argumentos científicos, no tomemos a la ciencia como sustento para una correcta promulgación de ley.
Tampoco demos importancia a aspectos teológicos, sin embargo conozcamos lo que enseña nuestra tradición judeo-cristiana en la Biblia, leamos sobre la visita que hace María a su prima Isabel, la mamá de Juan, ¿acaso no está escrito en Lucas 1, 41: “Y aconteció que cuando oyó Isabel la salutación de María, la criatura saltó en su vientre…”? Claramente en este versículo vemos la referencia a Juan, que aún estaba dentro de la matriz de Isabel.
Aunque científicamente y teológicamente se dan las pautas que sostienen que la vida del ser humano comienza con la fecundación no los consideremos en nuestra toma de decisión porque somos una sociedad que ha evolucionado, que ha dejado atrás procederes arcaicos y ahora somos progresistas, evolucionados, de mente abierta, somos modernos; sin embargo, no se puede negar -¿o también lo negarán?- que la fecundación se da, en promedio, 5 días después del coito, tiempo suficiente para que –en caso de una violación- se impida la fecundación con el uso de la pastilla del día después. ¡Qué incongruencia de conciencia, se promulgan leyes para defender a los criminales y a los animales, pero se quiere poner leyes que maten a seres humanos en la etapa inicial de su existencia! Pretenden con leyes destrozar lo más hermoso del universo: ¡La Vida Humana!
Pero, insisto, que no sea la ciencia ni la teología lo que ordene el proceder frente a un embarazo producto de una violación, personalmente aspiro que sea nuestra condición de seres humanos lo que inspire a promulgar leyes que impidan la agresión a nuestros hermanos más pequeños e indefensos. Que sea la conciencia humana en su más alta sabiduría la que analice y decida el correcto proceder. Ansío que en este tema hable el corazón…, el suyo, el mío, el de aquel, que hablen todos los corazones de hombres, de mujeres, de niños, de ancianos, que hable el corazón del pueblo.
Si acaso se cree que esas criaturas en el vientre materno son insensibles y sin vida, vean los videos en los que se constata la huida defensiva que hace el embrión cuando el criminal instrumento irrumpe en el útero gestante para destrozar su mínimo cuerpo; También es necesario que se conozca y se entienda que todo acto de violencia produce lesiones físicas y lesiones psicológicas que en algunos casos son de consecuencias más graves. Las lesiones psíquicas se pueden agrupar en trastornos por estrés agudo y trastorno postraumático, siendo este último –así lo reconocen los psiquiatras y psicólogos clínicos– difícil de tratar. La violación sexual es uno de los traumas con afectación psíquica grave y está demostrado por estudios científicos que, en caso de producirse un embarazo, el aborto inducido es el puntillazo final que ahonda aún más el sufrimiento de la mujer. Tampoco lo es enviarla a la cárcel si se provoca el aborto, puesto que la mujer violada también es una víctima, actuemos como sociedad contra el violador; pero, también preguntémonos ¿todos los casos de abortos provocados son productos de una violación? Cuidado el remedio resulta peor, averigüen sobre las complicaciones de un legrado uterino.
Hasta el término que usan o pretenden usar: “aborto terapéutico” está equivocado, no existe tal cosa; el aborto es espontáneo o inducido, no hay más. No se debe intentar con sofismas cambiar la verdad y pretender fomentar asesinatos castigando a los inocentes con la pena máxima, cuando en una violación el culpable es el violador y no el ser que pudiera haber sido gestado. Además, la medicina ya tiene establecido que el aborto inducido solo se justifica en casos en los cuales el embarazo pone en gravísimo peligro a la gestante y no queda otro recurso para preservar la vida de la mujer, caso contrario ambos morirían y, cuando el producto de la gestación presenta atroces deformaciones que le son incompatibles con la vida extra uterina.
Asimismo es prudente que se conozca que, cuando nosotros nos incorporamos de médicos prometemos: Velar con sumo respeto e interés por la vida humana, desde el momento de la concepción y aún bajo amenaza, no emplear mis conocimientos para contravenir leyes humanas. (Promesa de la Convención de Ginebra). No existe un verdadero Médico que acepte reeditar la masacre de Herodes Antipas; podrán poner las leyes que quieran para favorecer el aborto intencional, pero –insisto- los verdaderos médicos no lo haremos y nos acogeremos al derecho de resistencia si se pretende obligarnos.
¿Qué hacer en caso de una violación?
1) Prescribir la pastilla del día después.
2) Apoyo médico y psicológico a la víctima y a su entorno más íntimo.
3) Encarcelar al violador con la pena máxima que debe purgarla en la cárcel común, tenga la edad que tenga.
¿Cómo prevenir una violación?
1) Mejorando la educación, fomentando la moral y las buenas costumbres.
2) Fomentando cursos de educación para padres.
3) Impidiendo programas que incitan el morbo y estimulan de manera inadecuada la sexualidad.
4) Impartiendo una verdadera educación sobre sexualidad humana.
5) Con leyes que condenen la agresión sexual con extrema severidad, sin opción a rebajas de la condena.
6) Con jueces y fiscales probos que apliquen esas leyes con justicia.
Las buenas leyes deben propiciar el perfeccionamiento de la convivencia y el desarrollo humano y son esas leyes las que esperamos sean promulgadas por nuestros gobernantes.
DR. FERNANDO MANZO FLORES
[email protected]
La difetencia entre la razón, la racionalidad y la racionalización aplicadas a fuerza a una temática tan dolorosa.
Que impotencia con lo que ocurre en mi país.
Este debate cobra especial relevancia ahora, en momentos en que todos contemplamos aparente o auténticamente estupefactos lo que hizo la manada chola, esa del 4to mundo, la de la Quito Norte, en contra de Martha. Se imaginan si ella hubiera quedado embarazada después de la brutalidad de la que fue víctima? Si decide abortar, tendría que ir presa? Dejémonos de ser una sociedad hipócrita, por favor!!
Porque no es hipócrita, es mujer valiente y entera y todos debemos identificarnos con su pensamiento: eliminar y para siempre la penalización del aborto y respetar la decisión de la víctima sobre el destino del producto y por encima de todo crear una entidad de apoyo médico, psicológico y legal para respaldar a las afectadas por éste flagelo y sacar a la iglesia y sus adláteres de todo discusión sobre el tema pues ha sido la sotana protectora de pederastas y violadores desde su nacimiento.
Entre la religión y la política en muchos casos hay y seguirá habiendo tremendos insalvables antagonismos pero así ha sido siempre, el problema es creer o no creer; no hay espiritualidad cuando se cambia una creencia, en el caso de su magnifico análisis veo que la asambleísta, aceptando que la vida empieza desde la concepción , quiere permitir por ley el exterminio de esa vida.
No sería mas valeroso mantener sus principios y orientar la ley al castigo de los violadores?…esos son los culpables, no la madre ni el ser que se está gestando.
Porque ya alguien le dijo que era presidenciable, también!
Reconozco y felicito la actuación de la asambleísta cuesta. no se puede castigar y arruinar la vida a una mujer que fue violada sea esta especial o con facultades completas. La concepción por violación debe ser una pesadilla sobrellevar para cualquier ser humano. Se debe aprobar el aborto, pero procurar que sea en los primeros días u horas de ser posible. El estado debe ser muy responsable en este caso para que no se mal utilice este recurso si se aprueba la reforma. personalmente eso espero
la vida desde la concepción no es algo demostrado por la ciencia, la religión tampoco es clara en estos temas recuerden que la iglesia prohibía el uso del preservativo y también se inventó el celibato para que las herencias no salgan de sus dominios, lo que terminó siendo la causa de tanto cura pederasta; lo único claro por el momento es la necesidad de una política de salud pública y de justicia que no vulnere los derechos de los seres vivos, y por ser vivo (científicamente hablando) entiéndase la mujer violentada; porque aunque nos conduela el proyecto de feto no está claro si aun es ser vivo, mas allá de esas discusiones, son los preceptos religiosos los que se quieren interponer entorpeciendo una solución viable al problema de las mujeres violentadas, los mismos preceptos que siempre se basan en teorías e ideas absurdas que por lo general impiden el sano desarrollo de una sociedad
para terminar, quisiera saber si por si acaso alguno de los que defiende la vida del feto producto de una violación tiene alguna familiar que haya resultado embarazada producto de una violación
valiente el testimonio y la determinación de mercedes y muy acertado y explicativo el artículo de José
la vida desde la concepción no es algo demostrado por la ciencia, la religión tampoco es clara en estos temas recuerden que la iglesia prohibía el uso del preservativo y también se inventó el celibato para que las herencias no salgan de sus dominios, lo que terminó siendo la causa de tanto cura pederasta; lo único claro por el momento es la necesidad de una política de salud pública y de justicia que no vulnere los derechos de los seres vivos, y por ser vivo (científicamente hablando) entiéndase la mujer violentada; porque aunque nos conduela el proyecto de feto no está claro si aun es ser vivo, mas allá de esas discusiones, son los preceptos religiosos los que se quieren interponer entorpeciendo una solución viable al problema de las mujeres violentadas
para terminar, quisiera saber si por si acaso alguno de los que defiende la vida del feto producto de una violación tiene alguna familiar que haya resultado embarazada producto de una violación
valiente el testimonio y la determinación de mercedes y muy acertado y explicativo el artículo de José
En una sociedad, en un país ideal, por supuesto que deberíamos defender en todos los casos la vida y, en lugar de atacar las consecuencias de un crimen: es decir el nacimiento de un niño producto de una violación, atacar las causas, es decir, la existencia de violadores: enfermos mentales de todas las clases sociales que prevalidos de su calidad de machos, destrozan la vida de todo lo que han tocado: la mujer violada, el ser producto de la violación, la familia, la sociedad, en general. Pero eso, en una sociedad ideal, mientras no se combatan de verdad, las causas, no tenemos otra alternativa que apoyar la decisión de la mujer violentada respecto de si desea o no continuar con un embarazo producto de semejante aberración. Estoy de acuerdo en que revictimizarla metiéndola a la cárcel no ataca al verdadero culpable de este flagelo, sino a la víctima. Cuando se combata efectivamente a los violadores podremos descartar esta opción que es muy dura, pero no veo alternativa.
Sin duda alguna, no estoy de acuerdo con el aborto, pero tampoco puedo condenar a una mujer o niña que ya ha Sido violentada y en esa violencia ha Sido ya condenada, estamos luchando por las mujeres y niñas que no tienen voz, y que no quieren ser madres, no estamos hablando de mujeres o niñas que “metieron la pata” estamos hablando de mujeres/niñas que fueron violentadas, violadas, abusadas, agredidas, es un hecho tan atroz que no hay palabras el asco y repudio que causa esa acción, pero sin duda igual no estamos tratando el foco del problema puesto que se trata a la mujer dentro de todo esto como el foco del problema su embarazo. Que sucede con el agresor, por qué no se busca una lección, castigo, condena que realmente sea importante empezando por dejar de proteger sus nombres o sus rostros, personas así sólo merecen una castración química. Recuerden que seguimos buscando la solución en el lugar incorrecto
Puesto que se repite recurrentemente la palabra “matar”, recuerdo lo siguiente para que podamos conducirnos de mejor forma por este difícil camino:
Toda persona tiene derecho a la vida.
En el proceso de devenir de la persona humana, el nacimiento representa una ruptura esencial para determinar la “vida” como un bien legalmente protegido (Prof. Martin Schubarth, 1977). El embrión no tiene capacidad legal.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos.
Art. 3: Toda persona tiene derecho a la vida …
Por lo tanto, se considera como individuo sólo a quien ha nacido.
Al preparar la Declaración, se rechazaron las propuestas para proteger el derecho a la vida desde la concepción (Cook, 1992).
La Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
Preámbulo: “… el niño … necesita … protección legal apropiada, antes y después del nacimiento”.
Art. 1: “A los efectos de esta Convención, un niño significa todo ser humano menor de dieciocho años …”
La edad se calcula desde el nacimiento! Por definición, la caracterización de niño comienza en el nacimiento.
Art. 6: “… todo niño tiene un derecho inherente a la vida”
inherente = en alemán: “ein angeborenes Recht auf Leben” = un derecho que le pertenece desde el nacimiento.
La convención, por tanto, garantiza el derecho a la vida desde el nacimiento. No se indica en el preámbulo, a partir de qué hora antes del nacimiento debe comenzar la “protección legal apropiada” y qué forma debe tomar. Más bien, es la protección de la mujer embarazada antes del nacimiento. Además, el preámbulo no tiene fuerza vinculante. En lo que respecta a la cuestión de la interrupción del embarazo, nada puede deducirse de él.
El preámbulo también reconoce que “para el desarrollo armonioso de la personalidad, el niño debe crecer en un entorno familiar, en un clima de felicidad, amor y comprensión”. Según el art. 27, el niño tiene derecho a las condiciones de vida necesarias para su desarrollo.
sólo me has hecho pensar que personas como la Sra. Espinoza están allí en esos organismos internacionales y !ella como nuestra representante!, en defensa de esos derechos ….
No sé si sean derechos humanos, pero ciertamente no tienen alma
Cuándo comienza la vida Victor, cuándo debe terminarse?; acaso lo sabes?; acaso tú debes decidir?
Para la persona que comento que donde están los miles de violadores le recuerdo que gran parte de esas estadísticas son de niñas que quedan embarazadas por VIOLACIÓN, si amigo las niñas no se embarazan a las niñas las violan.
Con todo mi respeto Lucía, aplaudo vuestro comentario, que digno!, cuánta calidad humana.
Así de simple como lo has puesto es el hecho y nos quieren enredar y ponernos a discutir en temas religiosos y emocionales para hacernos olvidar nuestra humanidad y la obligación de cuidarnos como tales.
Lo que se debería estar planteando y debatiéndose son leyes que encierren de por vida o maten a esos violadores, el abrir instituciones que den alberge , un buen cuidado y proceso seguro de adopción a esos bebés y de atención a esas madres. Porque el abortar también las destruye psicológicamente a ellas, muchas veces las mutilan e incapacitan. Osea a más de ser violadas serán motivadas a una muerte en vida!.
El estado debería estar proponiendo planes para detener esa “escorias social”, que al amparo de “cultura” destruye la vida de miles. Son Niñas, adolescentes, quiénes son los victimarios? ; y el estado qué pretende con esos “schow manipulador emocional”, eliminar completamente sus derechos como mujer?.
Allí hay dos víctimas la madre y el niño y dos victimarios, el maldito violador y el estado !
Uno como espectador mira el schow y dice claro!.. cómo hacerle sufrir más y ponerle esa carga más a esa pobre víctima?, olvidando completamente que el bebé podría ayudar a esa víctima de violación a superar ese horrible acto, si no logra tener empatía con el bebé, darlo en adopción es lo más humano y noble que podría hacer.
El Finlandia donde también se aprobó el aborto, hoy quieren volver al Referendum, porque entre ese paquete de leyes está el no permitir que ese niño sobreviva a pesar de estar a término y si eso ocurriera la obligación, por ley del médico es no permitir que viva. Acto igual ocurre en Italia, cuando el pueblo se dió cuenta de lo que aprobaron fué un motivo más para -todos- salir a protestar y exigir el cambio de la ley.
La gente está tan ciega -aquí y allá- que está olvidando lo básico: La Vida, es para vivirla. Mujeres como Mercedes, están siendo usadas una vez más, porque no ven el TODO, no pueden ver el panorama completo, y sus emociones sólo reflejan el dolor que ella sufrió. Lo que no ha entendido es que con la aprobación de esas ley, hará que más sufran tanto mujeres como sus hijos.
La salida del estado es fácil -maten al débil- , el más fuerte ya ganó, ya la violó ahora el más fuerte quiere ganar – no hacer nada, por su pueblo-
Y algo más, las que suelen abortar – no son las nenas violadas- , son aquellas mujeres que tienen parejas estables y que utilizan el aborto como medio de control natal… porqué no sacan eso en sus estadísticas?
Aveces hay que ser extremista, hablamos de violadores, de muerte de niñas en abortos clandestinos ,,,, cual es el causante de esto? el violador punto, la ley debe ser dura extremadamente dura…. Castración y condena de por vida para el violador,,,,, tiempo al tiempo no mucho y veamos luego las estadísticas les aseguro que bajaran en un 90% por decir un numero pero con el tiempo no mucho veremos resultados.
Lo expresado por la asambleísta esta correcto para mi parecer.
Leyes mas duras para estos casos…..,,