El FMI es magnánimo con el gobierno de Moreno

lectura de 5 minutos

La caminata del Acuerdo con el FMI es de tres años con 12 pasos trimestrales en cada uno de los cuales existen ciertos deberes a cumplir. A junio de 2019 se ha dado el segundo pinito en la tarea de aprender a caminar en el sendero del orden fiscal, monetario y económico. El cumplimiento de ciertas metas a junio refleja la incapacidad del gobierno para cumplirlas y la indulgencia del FMI al mirar hacia otro lado.

En el primer semestre del presente año el déficit del presupuesto del Estado se ubica en unos $900 millones; esto es, 40 por ciento superior a igual período de 2018. A junio de 2019 el compromiso del gobierno fue obtener $890 millones de superávit en el sector público no financiero (SPNF). Si hasta junio el déficit del presupuesto fue $900 millones, para cumplir la meta del acuerdo con el FMI el superávit del resto del sector público debería ser unos $1.800 millones, algo imposible de cumplir, a tal punto que la nueva propuesta de superávit a junio se ha rebajado a $59 millones. Al mismo tiempo, el objetivo de superávit de $24 millones del SPNF a fines de 2019 se ha revisado y se espera un déficit de $291 millones, el cual es posible también se incumpla, pues, será superior.

El gasto corriente del presupuesto continúa creciendo, entre enero-junio de 2019 aumenta 8,7 por ciento en relación a igual período de 2018. La reducción de $66 millones en al pago de sueldos en el presupuesto entre los dos períodos, es pálida en relación con la meta de disminuir $653 millones en la masa salarial del SPNF en 2019.  Otra vez el FMI se muestra magnánimo y ubica en $260 millones el objetivo de reducción de la masa salarial pública.

Entre los períodos citados el gasto en bienes y servicios del presupuesto estatal aumenta 7,8 por ciento. Según el acuerdo con el FMI este rubro en 2019 debe reducirse en $639 millones en todo el SPNF. El FMI sigue condescendiente y relaja la meta a $353 millones al término de 2019, propósito aún de dudoso cumplimiento dada la debilidad del gobierno. De otra parte, entre enero-junio de 2019 el pago de intereses de la deuda pública en el presupuesto alcanzó a $1.708 millones, 20,1 por ciento más que igual período de 2018. Tal pago significó cinco veces lo pagado por el Bono de Desarrollo Humano, superó a lo transferido a los GADs y casi triplicó los gastos del plan de inversiones, el cual está casi paralizado, pues sólo se ejecutó alrededor del 17 por ciento. El servicio de la deuda pública constituye un elevado peso en el presupuesto público.

En primer semestre de 2019, para cubrir el déficit, las amortizaciones de la deuda pública interna y externa y otros pasivos, el gobierno consiguió créditos externos de organismos multilaterales y gobiernos por unos $2.300 millones, entre ellos $652 millones del FMI, $500 millones del Banco Mundial, $551 millones del BID y otros flujos de la CAF y gobiernos. Además, en enero se emitieron $1.000 millones de los bonos basura y se vendió por anticipado el petróleo por $200 millones. También se recompró $1.175 millones de los Bonos 2020 con la emisión de $1.125 millones de bonos basura a 10 años con el 9,07 % de interés.

En la revisión del FMI de las cuentas del primer trimestre de 2019, las fuentes de financiamiento para este año se han aumentado. En el acuerdo original estas fuentes eran de $5.902 millones y ascenderían a $8.109 millones, valor que incorpora   la emisión de $1.125 millones de los bonos 2029 para la recompra de parte de los bonos 2020. De fuentes bilaterales se obtendrían $458 millones adicionales y $472 millones más de otras fuentes. La acumulación de depósitos del sector público a fines de 2019 se rebaja de $2.719 millones a $1.899 millones.  Desde nuestro análisis ya habíamos previsto la insuficiencia de las fuentes de financiamiento consideradas en el acuerdo con el FMI. El flujo futuro de estos recursos presenta interrogantes.

En el análisis de las cuentas monetarias del primer trimestre, eran evidentes las dificultades del sector público para acumular recursos en el Banco Central por $2.719 millones al término de 2019. Esta obligación se ha reducido a $1.899 millones. Al mismo tiempo, a fines de 2019 la meta de $5.518 millones de la Reserva Internacional (RI) se reduce a $5.198 millones, al tiempo que la Reserva Internacional Bruta (RIB) bajaría su objetivo de $4.999 millones a $4.679 millones. No obstante, la acumulación de la Reserva Internacional (RIN) se mantiene alrededor de los $3.100 millones, hecho posible mediante la disminución en $321 millones en la meta de reservas en el Banco Central del sistema financiero privado.

Tantas metas y números pueden despertar la migraña al lector que la padece, no obstante, es importante para el Ecuador efectuar estos seguimientos que atañen a la vida de todos. La magnanimidad del FMI sólo ayudará al gobierno a sobrevivir. La consecución del bienestar de la sociedad ecuatoriana se dilatará en la misma dimensión de la insuficiencia de un conjunto de políticas económicas y fiscales, cuya concreción, esperamos en la dirección correcta, será tarea del próximo gobierno.

Jaime Carrera es economista.

4 Comments

  1. Ecuador mantiene un programa de ayuda económica por USD 4 189 millones con el FMI desde marzo del año pasado, en el que el Gobierno se comprometió a cumplir metas trimestrales en temas fiscales, monetarios, entre otros. En diciembre del 2019, el ente aprobó el último desembolso de recursos para Ecuador y relajó algunas metas. En febrero de este año, un equipo del Fondo debe revisar las cifras del último trimestre del 2019. Y, en marzo debería realizarse un nuevo desembolso por USD 350 millones si el Gobierno cumple las metas

  2. Como entender que en el gobierno de correa el endeudamiento fue desorbitante y su orientación fue los bolsillos de los verdes flex, las megas obras mal hechas, los sobornos y otros pasteles más. En el gobierno de Moreno esta situación es igual o peor, nuevas deudas sin límite, nuevas preventas de petróleo, oro, plata, cobre y seguimos “cuesta abajo rodando como bola de nieve. La orientación del gasto sigue siendo GASTO CORRIENTE, es decir pagos para los burócratas que están calentando el puesto. ¿Quien pone orden en este endeudamiento incontrolado con los multilaterales?, quienes oyen oro y creen que sus dineros están respaldados sin embargo la economía está a punto de paralización.

  3. No entiendo, pensé que el objetivo era cambiar deuda cara por deuda menos cara, pero resulta que consiguen algo de plata y corren a promover nuevos planes en que gastar, “toda una vida” “manuelas” “silla para todos” “mi primera casa” “mi primer empleo” etc, que en la práctica significa mas empleados públicos con unos chalecos en camionetas doble cabina 4×4 tomandose fotos que NUEVAMENTE empiezan a bombardearnos por TV. Propaganda del Banco del Estado, para que ? a quien le interesa que este organismo preste plata que no tiene a los municipios lambones del gobierno, así jamás se reducira el deficit, peor eliminar, lo que si es seguro es que subirán el IVA.

  4. El dolor de cabeza está atenuado por ahora que hay un grupo enorme de multilaterales prestamistas(buenas gentes) que apuestan a la dificultad del país para cumplir con los compromisos de pago. Hasta ahora flotamos en un mar de préstamos y sin salvavidas, llámese salvavidas al petróleo fresco, pues todo el que produzcamos ya esta destinado para pagar deudas . Dolores de cabeza a la vista, es decir, cuando no tengamos quien nos preste,cuando no tengamos empresas que vender, cuando no exista deslizamiento de la pared que recibe los balonazos(problemas) mientras pateamos, cuando el pueblo se ponga pilas al entender que no es negocio seguir pagando impuestos(rebeldía tributaria) para financiar las estupideces de los estúpidos (políticos) ; el dolor será parte de la cabeza . A Lo último que tengamos para la venta sea la desdolarización , sálvese quien tenga padrino(información privilegiada al estilo de Marcelo Dotti).

Comments are closed.