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El planeta de los simios

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La lucha entre los taxistas amarillos contra los servicios de las plataformas móviles Uber y Cabify  saca los instintos primitivos de los primeros. El paro nacional de taxistas del 17 de julio no fue la excepción: bramaron consignas, lanzaron piedras contra los vehículos de la competencia, pincharon las llantas de los compañeros que se negaron a unirse al paro… mostraron que en esta lucha no ganará la razón sino como de costumbre la fuerza bruta.

No tomaron en cuenta es que la ley de Darwin no se trata de la supervivencia del más fuerte, sino del más apto y para sobrevivir hay que evolucionar. Uber y Cabify no tienen acogida por ser extranjeros o ser plataformas digitales: lo tienen porque ofrecen un servicio superior: tarifas fijas, mejor precio, mejor trato, posibilidad de compartir el viaje en tiempo real, mapa de la ruta, hora de llegada y salida y hasta nombre del conductor y placa del auto. Mientras que los taxistas han perdido clientes por tener taxímetros dañados o alterados, sobreprecio, inseguridad y (a veces) maltrato al usuario. Claro que nada de esto les importa a quienes se han acostumbrado a imponer su reglas a gobiernos timoratos que sucumben ante la fuerza amarilla.

¡Qué escándalo que los usuarios prefieran las plataformas que dan mejor servicio! Hay que obligarlos a seguir en la era de la fuerza amarilla. Y este discurso no es solamente de los taxistas sino de políticos como María José Carrión quien, por razones electorales, busca convertirse en la madrina del taxismo.

El gobierno de Moreno plegó con subsidios ante los pedidos absurdos de los taxistas y ahora coquetea con la teoría disparatada de restringir las plataformas… Cuando  Cabify se muestra  favorable a la regulación. Chamorro, fanático de Jane Goodall, retrata a ciertos primates de la jungla de concreto.

Caricatura Marcelo Chamorro

9 Comments

  1. Todo se va ajustando a los tiempos, el teléfono celular prima, ya no el convencional, los e-mails son los usuales y ya casi no se usa el correo, los taxis amarillos igualmente están el via de extinción porque Uber y cabfly son mas confiables, efectivos, reciben tarjetas, son muy corteses y sabiendo que Llosa gozan del derecho al trabajo honrado como cualquier otro ciudadano, uno prefiere eso al sistema obsoleto, prepotente y grosero del taxi amarillo,

  2. Soy usuario diario de Uber, al solicitar servicio e indicar destino, me indican la tarifa.
    Si no me conviene, llamo a Cabify. Ambas plataformas indican marca y placa del carro, así como nombre y apellido del conductor. quien generalmente es educado y de vestir aseado ademas de conducción prudente.
    No creo que vuelva a utilizar los amarillos, nunca tienen el vuelto completo, no conocen bien la ruta, hay desaseo personal y vehicular, es mas caro y peligroso.
    Si algún político atenta contra nuestra libertad y derecho a escoger el mejor servicio,debemos negarle nuestro voto.

  3. Lo de Jane Goodall esta totalmente desubicado, raya en la ignorancia del tema y del personaje. Solo eso.

  4. Leyendo este sesudo analisis de la situacion taxis vs el pais, constato que es nuevamente el caso de “dando y dando”; uds me dan los votos para yo llegar al puesto xyz y cuando gane, no importa a costa de que, todas las prebendas y demandas de uds les seran otorgadas. En otras palabras todos tienen derechos, que lastima pero las responsabilidades son del que viene atras……… o sea la ciudadania a la que para cubrir tanta generosidad se la aprieta con mas impuestos.

    Habiendo visitado otras latitudes, nunca escuche que los taxistas tuvieran “derecho a subsidios”; es como si una persona particular que no tiene otra que usar su vehiculo para ir a su trabajo, insistiera en que tambien le ayuden con el combustible, las llantas, y ni se que mas sera. A donde iriamos a parar!!!!!! Somos muchisimas las personas que tomamos taxi para atender nuestros asuntos; (en un par de ocasiones he expuesto este punto al taxista que estuviere llevandome a mis diligencias, y que tal me han dado la razon, algo que me llamo la atencion. Varios taxistas que nos atienden explican que ellos tienen que pasar dos revisiones por año, deben por ley tener seguro para ellos, para terceros o sea los pasajeros, y por cierto para el vehiculo, algo que consideran muy costoso y que dicen la nueva competencia ni tiene ni las autoridades exigen. Desconozco cuanta verdad haya en ello, no obstante me permito acotar que habiendo conducido por muchisimos años mi vehiculo siempre tuve seguro para mi y para terceros y el vehiculo estaba asegurado, ah y nadie me subsidio ni se me hubiera ocurrido semejante idea…….).Entonces nosotros optamos por usar los servicios de compañias serias, cuyos taxistas se comportan con respeto, seriedad y son cumplidos, el taximetro funciona, y si uno pide un taxi para x hora, ahi estan. Entonces esas empresas se han ganado el tenernos como clientes. Hemos oido mas no hemos usado las nuevas plataformas de taxismo que planean entar al mercado nacional, por tanto no podemos comentar al respecto.

  5. Esperemos que los cocheros tirados con caballos no hagan paro contra los taxistas y pidan su dasparicion, pues ellos llegaron primero y merecen el patrimonio unico del transporte. Buena Chamorro, buena.

  6. El avance de la tecnología es irreversible. Mejor que los taxistas se pongan competitivos frente a Uber y otras plataformas o se busquen otro trabajo.

  7. Como de costumbre, la mediocridad, xenofobia y el facilismo sale a relucir en éstos actos retrógrados..y nos sorprendemos y enojamos cuando nos dicen tercermundistas!!!

  8. Los taxistas, perdón, los dirigentes de los taxistas, reflejan lo peor de nuestra sociedad. En lugar de adaptarse y evolucionar, han optado por la irracionalidad, la fuerza bruta y el cómodo ejercicio de culpar a todos de todo. Si los dirigentes fueran líderes, esto es los llevaría a adoptar la tecnología, a definir metas para mejorar el servicio y la seguridad de los pasajeros y, a competir con el propósito de incrementar la preferencia de sus clientes. En lugar de eso aterrorizan a los gobiernos endebles para que acepten sus caprichos, a comprar a políticos corruptos que los “defiendan” y a intentar conseguir algo anacrónico: el monopolio absoluto del transporte de pasajeros. Al taxista honesto y trabajador: pongan frente al grupo, a líderes y no a “gorilas” retrógrados y medievales.

  9. Les cuento algo personal. Vivo a dos cuadras del City Mall en Guayaquil. mi hija vive en la vía a Samborondón. El viaje, por el nuevo puente lleva como 10/15 minutos dependiendo del tráfico. A veces he tenido que tomar un taxi amarillo y me ha cobrado $9.oo. Cuando he tomado un taxi ” pirata ” el valor fué de $ 7,oo. Una vez mi hija llamó a Cabify para que me recoja y el valor fué de $ 4.85. Los taxis amarillos quieren estar solos en este tipo de transporte y eso se llama MONOPOLIO. Si sòlo ellos prestan este servicio, pueden cobrar lo que le da la gana. En resumen, A moreno, las dos Espinozas y los taxistas lo tienen cogido por las p…artes íntimas.

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