Golpe de Estado en Bolivia: ese es la última consigna lanzada por Evo Morales y reproducida, en masa y alegremente, por los mamertos internacionales. Y los nacionales, faltaba más. Su resumen de lo sucedido es tan escuálido como un mandamiento: Morales, ex presidente de Bolivia, ganó las últimas elecciones en la primera vuelta. Y la derecha, la oligarquía, la extrema derecha y el imperialismo le dieron golpe de Estado.
Los mamertos son así: de una simpleza necia. Y de maniqueísmo atroz. Ese es su mundo. Resulta que Morales ganó la primera vuelta con fraude. Se lo demostraron la OEA y una empresa particular (Ethical Hacking) contratada por su propio Tribunal Supremo Electoral. Resulta que en los hechos reconoció haber querido robarse la Presidencia para después de 14 años, seguir en ella hasta el 2025. Eso no es grave para los mamertos. Tampoco lo fue que en 2016, tras un referendo, organizado por su gobierno, con sus jueces electorales, él desconociera el NO mayoritario y se inventara un chaquiñan constitucional, tan retorcido como ilegal, para inscribir su candidatura.
Esos no son golpes a la legalidad democrática y cualquiera que los cometa puede seguir en su cargo. Golpe es, en cambio, que ante el pedido popular para que renunciara, Morales haya decidido dimitir y ahora quiera construir el relato de víctima tan propio de los mamertos. Porque en su visión, ellos o son próceres. O son perseguidos. Ese es su mundo: una película en blanco y negro.
Los mamertos hacen parte de una raza aparte. Tienen un ADN tan singular que los ubica siempre del lado correcto de la historia. Porque creen que la historia tiene un lado reservado a los mesiánicos. Creen en la Historia, con H mayúscula. Historia con rumbo y sentido heroico. Historia que no admite bagatelas de contador sino ilimitado horizonte de macroeconomista. Con título foráneo. Los mamertos siempre tienen la razón. Porque su referente está en su cabeza; no en la realidad. Si Venezuela está en ruinas y si hay 4 millones de venezolanos deambulando por el continente, soportando hambre y xenofobia, no es porque ese modelo fracasó. Es porque Estados Unidos, es porque la derecha, es porque el bloqueo, es porque la oligarquía… Además, la mitad de eso es puro invento. Propaganda.
Ser mamerto es un raro privilegio: no hay que pensar. No hay que hacer mea culpa alguno. No hay que aprender. Hay que recitar. Hay que estar atento a la consigna. Porque las consignas sí varían. Cojan, por ejemplo, el caso de Lula da Silva; ese obrero metalúrgico que llegó a la Presidencia de Brasil, se granjeó un respeto mundial y luego se corrompió. Igual que su hijo que aprovechó la posición de su padre. Esos detalles de dineros públicos o privados que terminan en los bolsillos de sus líderes, no interesan a los mamertos. La corrupción es de la derecha, de la oligarquía. Para ellos Lula es un héroe, un demiurgo. Decir que se corrompió, traducirlo ante los jueces y llevarlo a la cárcel solo puede ser persecución, crapulosa persecución de la derecha, de la oligarquía, del imperialismo. Y para eso existe una explicación: el lawfare. La guerra judicial. No es que Lula sea corrupto. Es más sencillo: sus enemigos decidieron perseguirlo usando a los jueces. Y ya: Lula es inocente. Porque un héroe revolucionario es, además, una buena persona.
Así viven los mamertos: celebrando sus virtudes y sus mundos perfectos (al margen de la realidad-realmente-existente) y escupiendo contra la derecha, la oligarquía y el imperialismo. ¿Y quiénes hacen parte de la derecha, la oligarquía y el imperialismo? Todos aquellos que cuestionan ese mundo idílico, mentiroso y cínico que ellos refriegan en la cara al resto de la humanidad.
Es fácil entenderlos: ser mamerto es también tener un alto sentido de la autoestima y de la superioridad moral que los habita. Los mamertos detestan a los derechosos que son todos los ciudadanos que no hacen parte de su mundo. Y es entendible viniendo de gentes que tienen ADN con sentido Histórico, que son intérpretes y operadores de conducir masas enteras a paraísos insospechados. Hay que admitirlo: es una ventaja inconmensurable ser vocero de un mundo metafísico que rehusa ser cotejado con las realidades mediocres y de miseria que producen sus teorías. Ser mamerto es eso: tener a quien culpar. La derecha, el imperialismo, el bloqueo…
Ese síndrome del chivo expiatorio es congénito en los mamertos. Gracias a él pueden, por ejemplo, denunciar un supuesto golpe de Estado en Bolivia. No importa si aquellos que lo hacen son los mismos que hace pocos días estaban tratando de dar un golpe de Estado a Lenín Moreno. Esa lista la encabezan los líderes de la Conaie. Pero, por favor, están lejos de ser los únicos expertos en golpes de Estado y golpes de pecho.
Ser mamerto, hay que confesarlo, es una suerte.
Foto: Cancillería de Ecuador
La suerte es que la mamerteria no es una propiedad exclusiva de la izquierda, sino que es un bien que está adecuadamente repartido también al otro lado, que da buenas muestras actuales en países como Chile, el modelo, o Argentina, dónde los expertos económicos que la iban a salvar también resultaron mamertos; o en cualquier país donde se quiera aplicar las recetas económicas que nunca funcionaron; o en los países exitosos en los que el momento que la gente se levanta, se busca el chivo expiatorio de los agentes de los gobiernos del siglo 21, y se apresa a conductores de taxi venezolanos. Qué suerte que esté tan bien repartida la mamerteria!
La foto esta incompleta!!!!!!!!!!! faltan otros/as mamertos y mamertas (de la decada robada rivadeneira, patiño y muchos que se me escapan al momento) – maduro, ortega y lopez obrador, el compasivo protector de los illuminati del siglo XXI. Caramba debe ser el cansancio de leer tanta noticia desconcertante, como se me olvidan vargas, iza y demas cabecillas de la conaie y otras organizaciones indigenas, que con indescriptible insolencia y prepotencia se han convencido de que sin haber sido electos a ninguna dignidad nacional tienen el derecho de imponer su voluntad y descabellados planes, pues dizque hablan por todo el pais!!!!!! y osan amenazar con mas levantamientos……… (y todos los pobrecitos guaguas indigenas, los eternos oprimidos victimas) Ignorantes de conveniencia, defienden la mentira de morales. Y los de por estos lares diriase que estan jugando con fuego……. estan confundiendo el don de gentes, paciencia y tolerancia de la ciudadania ecuatoriana con tontera, convencidos de que la justicia no les va a cobrar por los daños, perjuicios, maltrato a miliatares y policias, pues creen que la ley no es para ellos………
A todos estos creo que les viene como anillo al dedo la siguiente frase:
“actions speak so loudly, I can’t hear a word you are saying”
(La voz de los hechos es tan potente, que no puedo escuchar lo que dices)
Muy buena fotografía para entender con este trío el significado de mamerto. En nuestro Ecuador en los últimos días han aparecido un trío de mamertos de la dirigencia indígena, con mentalidad correísta, ellos son: Jaime Vargas Leonidas Iza y Yacu Pérez, quienes se creen los amos y señores de la sociedad ecuatoriana.
El mamerto mayor resulta ser el demagogo López Obrador, que abusando del poder, está convirtiendo a México en una cueva de ratas, con el cuento de dar protección “humanitaria” a tantos criminales que robaron el futuro de los pueblos.
Únicamente los imbéciles, muy bien calificados como MAMERTOS, repiten robóticamente que hubo golpe de estado. Al respecto, bien vale citar lo dicho por Almagro, que el verdadero golpe lo dio el mismo indígena Morales, cuando desconoció la voluntad soberana del pueblo, que le dio un rotundo NO en el referéndum para no aceptar la reelección presidencial; y, porque aquel fatídico día Morales hizo trampa para ilegítimamente continuar en el cargo.
Buen artículo el suyo, señor Hernández. Felicitaciones.
Que foto mas patetica!!!son los tres chiflados.
Definitivamente el mundo esta al reves, resulta que ahora los corruptos, miserables, sinverguenzas como morales, correa, etc son victimas y pensar que en un pais como Mexico les reciben a estos ratas como heroes, que indignacion!!!, mas bien ese Presidente amlo deberia preocuparse de la angustiosa situacion que viven alli causada por los carteles en lugar de conceder asilo a rivadeneiras, buendias y las otras ratas innombrables.
Una vez mas felicitaciones 4Pelagatos.
Excelente. Mejor explicado no podía ser. Felicitaciones!!!!
Además, los mamertos se creen muy ilustrados, se dicen de manos limpias y tienen cuentas millonarias inexplicables en paraísos fiscales a los que tanto denostan.
Poco falta para que se declaren enviados celestiales a salvar al mundo.
Caretucos, pillos, sinvergüenzas!!!
Bueno, eso es lo que los susodichos pretenden que los creamos que son: unos mamengues o mamertos, pero en el fondo son unos “vivísimos”; se levantaron con el santo y la limosna y luego se declaran perseguidos políticos. Para que estos “sapos de la Grecia” no nos tomen por tontos, es necesario mejorar la educación de nuestros jóvenes porque hoy, la mayor preocupación de ellos (y hasta de los adultos) es la farándula, la moda, el fútbol o el trago. Una lástima. No se lee; el promedio de lectura en el país es de un libro al año. Lo que sucede en el país se desconoce, no se informan porque dicen que las noticias y la política les entristece. Se tacha al profesor exigente; se busca el facilismo que ya está estatuido; no hay esfuerzo. ¿Y los programas o proyectos de educación? Mejor ni hablar; se desconoce hasta el significado de los títulos que otorgan las instituciones educativas y peor aún, su equivalencia internacional. A este nivel se oyen (y se ven) absurdos que avergüenzan. Entonces, esta patria es tierra fértil para los “avispones y avispados”. Por estas causas es loable el trabajo que Uds. señores de 4-Pelagatos, realizan. Se esfuerzan por mostrar los problemas que nos incumbe conocer como ciudadanos, más allá de lo superficial. Y, además, nos dan la oportunidad de opinar. Adelante.
Me pregunto: ¿por qué en Bolivia el movimiento indígena en el poder no construyó un proyecto de país incluyente y democrático? Era una oportunidad histórica irrepetible. Tenía que demostrar una construcción de sociedad diferente a aquella que significaba exclusión y pobreza del mundo indígena, que efectivamente ocurría. Sería bueno que 4 Pelagatos describa a Camacho, el líder en Bolivia, que asusta por sus posiciones también fundamentalistas y violentas -diría equilibrio en el análisis-. Por otro lado, lo sucedido en Bolivia y Ecuador con el mundo indígena y su actual hegemonía, preocupa o debe preocuparnos; debemos procurar que la CONAIE cambie en sus discursos y prácticas y se enrumbe por un proyecto de país incluyente, democrático y con justicia social.
Excelente análisis Sr. Hernández! Esta mas claro que el agua: son mamertos!! Y en Bolivia no renunció pillin Morales, lo renunciaron, por pendejo y muy mal cantante! Democracia para Bolivia!!!
Que verdadera es la frase que dice: “No hay peor ciego que el que no quiere ver”!
Todo su artículo refleja una triste, dura e indignante realidad, sin embargo LO PEOR de todo el rebulicio que el sufrido Ecuador atraviesa es porque TODA su población también son una sarta de mamertos, pero este otro grupo son mamertos porque cómodamente se quedan sentadotes en “sus” casas (todavía), viendo los toros de lejos, criticando a más no poder a “los demás”, a “los otros”, a los que “deberían hacer algo” y lo que es peor esperando que “los políticos” hagan algo para enderezar al país, como prueba de ello al final de todo se permitió a un licenciado llegar al poder consolidando un descarado FRAUDE electoral, peor aún sabiendo muy bien que el ilegítimo licenciado es parte de la nauseabunda gavilla de sátrapas que se robaron nuestro dinero y nos tienen a todos en la misma mierda pagando su inmoral farra de más de 10 años!
Sin duda los pueblos tienen los “líderes” que se merecen… MAMERTOS!!!
PRESO correa PRESO!!!
Don José, buenas noches.
Esperar integridad de estos es inútil. Esta gente ha ido demasiado lejos, y lo que menos le importa es la coherencia.
Pero siempre es bueno que los periodistas nos recuerden cuán bajo pueden llegar los Maduro y compañía.
Mamertos son también los que votan por estos aun cuando todo mundo sabe que son corruptos y mediocres. Entonces que pasa con el Ecuador y muchos países de este continente? Somos tan estúpidos para no darnos cuenta de los ladrones que quieren gobernar? Lo ideal es que la propia sociedad se gobierne sin mediaciones ni personalidades. Directo y claro. La sociedad es la única que puede dirigir su destino. El problema es que para llegar a eso hay que recorrer mucho camino y en el caso ecuatoriano aun no damos el primer paso.
Que queda? Quitar la obligatoriedad del voto. No se puede seguir dando el voto a cualquiera, al que hable mas bonito, al que aparezca mas en medios, al que ofrezca casas y bienes. La gente que tiene ese criterio son los verdaderos mamertos que ponen en el poder a mamertos mayores. No. Tenemos que mejorar la calidad del voto para que las personas conscientes y responsables pongan coherencia y sentido común a la política. No es lo ideal, pero si empezamos por ahí, algo estaremos haciendo.
Cuando las derechas cambian de gobierno por razones como la de Bolivia llaman golpe de estado. Cuenta las izquierdas lo hacen está plenamente justificado por que lo hacen por el progresismo.
La descripción es clara: estamos ante lo peor de lo peor. Lo terrible es que la condición de mamerto viene acompañada de un súperpoder envidiable: nunca muere (al igual que la mala hierba y las sabandijas).
Don José, solo agradecerle. Usted me ayuda a entender muchas cosas.
Un buen día.