El viernes pasado cambió el panorama político del país. Motivo: la votación en la Comisión de Fiscalización, donde dos votos del oficialismo evitaron que el juicio político a Diana Atamaint pase al pleno. 4P. pone sobre la mesa piezas del rompecabezas que puede ser armado a voluntad.
- Semana de miedo para el gobierno: haber evitado que el juicio político a Diana Atamaint vaya ante el pleno de la Asamblea, haber perdido la alianza parlamentaria con CREO, tener un vicepresidente en plena carrera electoral, ver trepar el riesgo país, ser sujeto de un examen especial por parte de la Contraloría (sobre las 450 funciones del circo sobre hielo)… no son buenas noticias.
Lo primordial es que el gobierno se queda sin aliados y prácticamente sin margen de maniobra política en la Asamblea. Esa debilidad incidirá en la agenda legislativa que ya era volátil y se torna impredecible. La subida del riesgo país es un indicativo de cómo miran los mercados el fin de la alianza de CREO. En un reciente viaje al país, representantes de esos bancos de inversión la veían como el único seguro con que contaba el gobierno. - El gobierno acortó su ciclo de vida política útil: la Asamblea Nacional era el reducto que le quedaba para moverse. La alianza con CREO le permitía mirar con relativa tranquilidad compromisos contraídos y que deben ser viabilizados: las reformas previstas en el acuerdo con el FMI, por ejemplo. Sin esa alianza, el gobierno vuelve a un panorama de incertidumbre en un momento en que todos los actores estarán más enfocados en la campaña 2021, que en el destino del país en el año largo que le queda a Lenín Moreno. El gobierno cuenta con que las leyes que estaban en curso sigan mereciendo el apoyo de CREO. Pero el ambiente de desasosiego es tal, que más parece destinado a multiplicar los ruegos que hizo el Presidente cuando dijo que contaba los días para irse de Carondelet.
- Lenín Moreno sale fauleado por culpa de los suyos: el presidente no puede invocar circunstancias atenuantes. La ruptura de la alianza con CREO corre por cuenta de su bancada. Daniel Mendoza, asambleísta que dice ser íntimo del Presidente, mandó a su suplente Pinuccia Colamarco. Y Karina Arteaga, que estaba en la Asamblea, desapareció. No la localizaron. Finalmente, la suplente de Mendoza votó en contra de que el juicio político a Atamaint vaya al pleno.
En el gobierno se habla de sorpresa. De estupor. Hay conciencia de la gravedad y las consecuencias de la ruptura con CREO. No pensaban que Atamaint sería censurada en el pleno (no había los votos) pero admiten que había el compromiso de que -tras la formulación de cargos graves, como lo ocurrido con Luis Loyo- Atamaint responda y se evidencien los hechos por los cuales este CNE produce desconfianza en el país. Ahora, solo atinan a decir que Karina Arteaga debe ser expulsada del bloque oficialista y que lo mismo debería pasar con Mendoza que jura, aunque nadie le cree, que nada tuvo que ver con la forma como votó su suplente. - ¿Moreno tiene pactos y cartas desconocidas? En el CNE, entre asambleístas y en CREO corría el viernes una versión similar y sorprendente: Esthela Acero es una consejera que opera con la aquiescencia de Lenín Moreno. Desmentido inmediato en el gobierno. Un alto funcionario, muy cercano al Presidente, dijo a 4P. que el Presidente no habla con Acero y que ella se toma su nombre para avanzar en sus movidas. Que ella es una rueda suelta funcional quizá a Correa, pero sobre todo a sus intereses.
El hecho cierto es que políticamente el gobierno se ha manejado con dos estrategias. La primera, la anima (o animó) el propio Lenín Moreno con Jaime Nebot. La segunda corre por cuenta de María Paula Romo con Guillermo Lasso. En la primera, Nebot jugó a ser el factor de estabilidad de Moreno. Y esto hasta hace algunos meses cuando se instaló decididamente en la dinámica electoral 2021. Lasso hizo un acuerdo parlamentario alrededor de 10 puntos en mayo de 2019. Pero fue más lejos: en octubre defendió al gobierno y, en ese empeño, según dijo en radios de Guayaquil y Quito, llamó a Nebot, valiéndose de un intermediario, para que por encima de sus rivalidades, garantizaran apoyo a Moreno y estabilidad política al país. Nebot no devolvió la llamada. El juicio a Atamaint se da en esos contextos. Y nadie ignora que Atamaint conforma, con un socialcristiano y una correísta, la mayoría del CNE.
Moreno era consciente de la fragilidad de la alianza parlamentaria con CREO y de lo que una posible ruptura implicaba para su gobierno. ¿Cómo, en ese contexto, dos asambleístas de su bloque corren en auxilio de Atamaint en la comisión, cuando, además sabían que si el juicio pasaba al pleno no habría los votos para censurarla? Salvarla en la comisión significaba cerrar urgentemente este capítulo y evitar que, de pronto, en el pleno pudiera surgir más información susceptible de poner en jaque esa mayoría cuestionada que llevará a cabo las elecciones de 2021.
Se entiende por qué el presidente, aunque los suyos digan que está muy contrariado por lo que pasó en la comisión, queda en una zona de sospecha. Por dos razones: Daniel Mendoza, quien hizo la movida a favor de Atamaint se dice íntimo suyo. También es pana de Santiago Cuesta que, a su vez, es el pana mayor del presidente. O Moreno nada supo y, en ese caso, sale muy mal parado porque gente suya atentó contra la única alianza que tenía su gobierno (¿qué tipo de líder permite que eso ocurra?). O las obligaciones políticas de Moreno son intrincadas que está privilegiando su futuro personal al presente político de su gobierno. En cualquier caso, Moreno sigue siendo un misterio. - El vicepresidente hace cama aparte: si algo sorprende en la entrevista de Otto Sonnenholzner, de este 29 de enero, es la forma como él ocupa el espacio político y simbólico en detrimento de Lenín Moreno. Él, él, él, él… Como si Moreno, le hubiera pasado el testigo desde ahora. Como si, al aceptar que use el aparato del Estado (como lo usó él y lo dejó usar a María Fernanda Espinosa para su cargo en la ONU), Moreno hubiera decidido que Sonnenholzner llene el espacio electoral que reclaman adherentes y asambleístas de Alianza País. Es obvio que Moreno requiere jugar ese papel o aceptar que alguien lo haga. De lo contrario habría desbandada en sus filas. En su tablero electoral hasta ahora era claro –como dijo en Guayaquil- que él apuesta por Nebot. No se sabe si Sonnenholzner es su outsider. Una cosa es segura: el Vicepresidente no podría estar en campaña, y además en forma abierta y desaforada, sin su acuerdo.
- Las razones de la ruptura de Lasso: en sus cuentas sociales, el líder de CREO escribió este sábado: “La falta de actuación acorde con el compromiso de llevar a cabo procesos transparentes en contra de la corrupción han obligado a CREO dar por terminado el acuerdo”. Lasso reprocha al gobierno “la protección a la Presidenta del CNE luego de haberse comprobado incorrecciones en el cargo y la falta de transparencia en el proceso electoral de 2019”. Conclusión: él presume que al gobierno “poco le importa la transparencia de las elecciones de 2021”. Tener un CNE escriturado y tener que competir, otra vez, con un candidato-Estado, son los dos motivos que explican la decisión de Lasso de romper con el gobierno. Hay también en CREO un sabor amargo que, traducido, es lo más parecido a un sentimiento de traición. Lo expresan así: Moreno es un desleal. Así paga tras el apoyo y todo lo que han hecho por sostener su gobierno; sobre todo en octubre.
- Cuesta, la pieza suelta: Santiago Cuesta no fue ajeno, en absoluto, a lo ocurrido esta semana. En una entrevista con Anderson Boscán, ratificó, con sus cifras, que el vicepresidente Otto Sonnenholzner está en campaña y dijo que 60% de los que ya decidieron su voto, votarían por él. Dos declaraciones que en el propio gobierno son leídas como dos actos de irresponsabilidad. Cuesta echó por la borda los beneficios para la democracia, que el gobierno reclama como suyo, presentes en el nuevo Código de la democracia. Reformas que buscan, precisamente, reducir las posibilidades de que haya candidatos-Estado que compitan con enormes ventajas contra sus adversarios. Este fue, como se anotó, una de las causas de la ruptura con Guillermo Lasso. Ahora bien, si Cuesta promueve a Sonnenholzner y está tras su candidatura y si Cuesta es el alter ego de Moreno y el pana de Mendoza, ¿a qué juega Cuesta en el gobierno? Amigos y detractores de Cuesta, cercanos a Moreno, no atinan a responder.
En esta capítulo, queda otro interrogante: ¿Por qué Moreno aprueba la operación electoral que lleva a cabo Cuesta con el vicepresidente Sonnenholzner? Porque es obvio que si deja que Cuesta entre y salga de Carondelet y despache con él (no lo ha desmentido), es imposible que no sepa lo que hace su pana y su vice.
El rompecabezas, como se ve, es complicado. Y difícil de armar, en forma segura, con piezas y actores tan impredecibles
Foto: El Universo.
Este análisis se publicó este domingo 2 de febrero en el boletín semanal de 4P. Si desea recibirlo, suscríbase por favor gratuitamente aquí: GPS4P.
La presencia de esta gente en el CNE no genera ninguna confianza para las elecciones presidenciales. Moreno tiene experiencia en fraudes y cualquier cosa (nada buena) puede pasar.
Cuando mas siniestro son los deseos de un politico desdeal al censurar lo inmoral y el cinismo mas pomposa , en general, se vuelve la corrupcion de su lenguaje corporal y grupal . Los verdugos actuales del CNE no se mantendrian en la cumbre o el poder si no fuera por sus complices Asambleistas que le sirven de soporte ya que estos venden sus votos o se abstienden de votar a los intereses del mejor postor por unos cuantos dolares verdes y cargos para sus familiares. El precio de desentenderse de la politica criolla es ser gobernados por los peores hombres que pario esta nacion.
Alguien que viva en el Ecuador debería ponerse los pantalones y llamar a plantones pacíficos frente al CNE y frente a la Asamblea para pedir que el montón de mamarrachos/as de esas dos instituciones se vayan a sus casas.
García Márquez dijo pertenecer al club del “Mamagallismo”. Veo que nuestros politiqueros de m… (que han llevado a la ver…güenza más grande al país) han formado otro, pero no de intelectuales sino del lado opuesto, del oscuro, son los “mamadores de teta” del Estado y tomadores del pelo a los ciudadanos. El asunto está claro: socialcristianos, correístas e indígenas dueños del CNE. Luego, el próximo presidente ya se sabe quien será. Los votos contará el “yoyo” y listo. Nos toca arrear nuestras carpas, mear y echar. O si gusta puede hacer mutis por el foro que la función del circo ha terminado; no se entretenga en la pelea simulada de los payasos. Si le duele la patria, tómese agua de mejorana y reconfórtese en sus paisajes.
Torpe análisis, moreno no diferencia entre tiza y tuza.
Julio Cësar Trujillo fue tan iluso y cándido que estuvo convencido de que los personajes que provenían de los movimientos sociales (argollas que creen en el marxismo) y grupos étnicos, darían transparencia, legitimidad, capacidad, eficacia y eficiencia. La “primera mujer shuar” (palabras de su autorretrato) es un fiasco completo en cuanto a capacidad administrativa y conocimientos para una función tan delicada y compleja como la presidencia del CNE, así como una completa vergüenza en el ejercicio de sus funciones por las anomalías y los entronques al conformar la entente con los socialcristianos y los mafiosos de Alianza País (correístas y morenistas juntos).
Cavilando un poco y atando cabos, ¿por qué está entente salvó a Atamaint? Porque los socialcristianos, correístas y morenistas les deben favores a esta experta en amarres (fue esa mayoría que legalizó a los correístas el partido Compromiso Social y entregó el informe exculpando al correato de los ilegales aportes para gasto electoral vía sobornos). En segundo lugar, a la entente conviene tener semejante ficha en la presidencia del CNE porque en tiempos de elecciones los mafiosos de la politiquería siempre recurren a prácticas corruptas para sostener o captar el poder. No olvidemos que el sistema informático de conteo de votos del correato sigue vigente y la jugada es aprovechar lo eficaz para ganar campañas electoreras.
Finalmente, lo más grave, podría ser una jugada premeditada de Don Voltaire mantener a Atamaint en el CNE. Una vez fuera del poder en el 2021, los correístas y la misma justicia podrán resucitar el caso Inapapers y los aportes ilegales a la campaña del 2017. Entonces, Don Voltaire, consciente de lo que se viene, buscará protegerse conservando el poder o parte del poder y evitar el camino a Latacunga. Sólo así se explica la confesión del amigazo Cuesta de que Otito es el ecuatoriano con perfil impecable para ser presidente y que, según su encuesta, tiene el 60 % de aceptación popular. No sería nada extraño que, con apagón de por medio, Otito sea presidente en el 2021. Y para que se cumpla mi conjetura, Diana Atamaint como presidente del CNE es crucial, como también el sistema informático implementado por el correato. De los abyectos asambleístas que evitaron el juicio a Atamaint me reservo los calificativos. Pobre mi país.
No creo que el licenciado sea un traidor, sencillamente el hombre no sabe lo que quiere, no sabe hacia donde ir , tampoco sabe nada de nada.
Las abuelas, sabías por edad y experiencia, decían: “hay gente necia, más terca que una mula que no aprende”.
Guillermo Lasso, legítimo ganador de la presidencia del país en las últimas elecciones, es terco e irreflexivo; cómo se las va a jugar a favor de un traidor, un pusilánime que no conoce la decencia y lealtad ni por el forro? No aprendió nada de la traición (por mal reparto o no) que este sujeto, el segundo del cartel de alianza país cometió contra su jefe nada más aterrizar en Bélgica?
Ahora van a buscar un chivo expiatorio en el manaba (una vergüenza para esa noble provincia) Mendoza, un sujeto oportunista y mañoso, que se vende al mejor postor como una prostituta; este individuo se llama el mejor amigo del incompetente, pero antes lo fue del jefe del cartel, y es muy capaz de afiliarse al partido político que se perfile como ganador de las próximas elecciones.
Con la fallida censura a una corrupta total como Atamaint, socialcristianos, correistas y “morenistas” están felices y risueños porque tienen asegurado un fraude en su favor en las próximas elecciones, el país para ellos les vale mierda.
En el penúltimo párrafo de su comentario, Don Fernando, usted ha dicho casi todo sobre el nauseabundo reptil de apellido Mendoza.
Para quienes tenemos más años en este valle de lágrimas, (léase Ecuador) mas bien nos embarga la desesperanza por el hecho que una persona tan joven, no tenga ideales y que a falta de estos, su mente y alma estén invadidas por un rastrero servilismo que solo responde a sus irrefrenables ansias de poder y de dinero.
Ayer conspicuo correísta, hoy servil a Moreno, pero apostando a la posibilidad de que CUALQUIERA de los presidenciables coticen su lealtad, incluido el arribista Vice.
Aquello es precisamente lo que está haciendo, este abominable individuo.
todos tienen rabo de paja y juegan con eso.. En el pais de Manuelito todo puede pasar..
La física cuántica, en la mente retorcida de éstos engendros, mutó a filosofía política cuántica que explicada en términos sencillos es la sinvergüencería, la deslealtad, la corrupción, la mentira y en general los antivalores sumados a la imbecilidad de que hacen gala los comediantes de la tragicomedia del paisito
Estamos aquí en un terreno muy especulativo, pero hay algunas cosas que llaman la atención.
En efecto, Lasso confirma que Lenin es un traidor que se mueve con una agenda muy impredecible. Si hace un año se mostraba amigo de un sector oligarca de la costa porque necesitaba su apoyo politico para sostenerse, ahora parece que ese acuerdo le vale un pepino. NO es la primera vez que Lenin hace este tipo de jugarretas sucias, el mismo Correa lo acuso como el mayor traidor de todos los que ha conocido. Ojo, no es que este a favor de Correa, no es el punto, sino entender la naturaleza torcida de un gobierno que parece se mueve sin principios ni ética.
Luego esta lo de Atamaint. Es evidente que el gobierno la defendió. Eso no esta en discusión, sino lo que esta en el trasfondo de esto. Si esta funcionaria mamotreta fue una concubina servil de Correa (no dudo que lo siga siendo), entonces por qué Lenin le da el voto de confianza. Al final, si quería tener el control del CNE pudo haber puesto a otra persona, pero no, tuvo que ser la mamotreta de Atamaint. Que tiene esa mujer y su equipo que no tengan otros? En términos de estrategia politica eso se traduce como una movida técnica porque Atamaint tiene información que puede meterle en líos al mismo Lenin (por el evidente fraude electoral de las ultimas presidenciales). Ademas no hay mejor ladrón que el que tiene experiencia. Y en eso Atamaint se gana el voto de confianza del gobierno.
Por ultimo, catapultar a Otto como el candidato gobiernista. A primera me parece algo iluso, y aunque tenga la personalidad para hacer campana, no es el tipo apropiado para el momento histórico del Ecuador. Ojo, no hablo en términos de lo que debería ser, sino de lo que actualmente vive el Ecuador. En ese sentido quien tiene mas chances de ganarse el voto popular es un politico carismático que conecte con la experiencia frustrada del pueblo, de aquel ciudadano que no tiene trabajo, que vive en inseguridad, que no tiene acceso a servicios básicos por incompetencia del Estado, que tiene que competir con los extranjeros un puesto de trabajo. Me hago entender? El nuevo presidencia va a ser un populista enemigo del Estado, con un discurso nacionalista anti-migrante, y que tenga el coraje de modificar las leyes laborales para que vuelva la inversion extranjera (lo que supone ajustar las cuentas del IESS y modificar radicalmente el código de trabajo). Yo hasta ahora no veo un candidato de estas características, y menos en Otto.
Lo que infiero es que el gobierno lo va a poner a la fuerza cueste lo que cueste. Que tipo de acuerdos habrá cultivado últimamente para lograrlo es algo que el futuro nos dirá, pero al menos en el CNE las estrategias ya deben estarse armando para poner a las buenas o a las malas a Otto. Y claro como este gobierno supone que la sociedad es tan dócil e ignorante no suponen el estallido social que se les viene por querer forzar la elección presidencial. Otro error de Lenin y probablemente el ultimo.
Un rompecabezas difícil de descifrar , pero que deja en claro algunos aspectos muy preocupantes y tóxicos para el país :
1- Mal paga el diablo a sus devotos , y en este caso , falta total de compromiso del Sr Moreno con el partido , que sin ninguna condición bajo la mesa , dio su apoyo en la Asamblea a un gobierno carente de apoyo político .
2- Queda en evidencia que el Presidente Moreno no lidera su bloque en la Asamblea , ni a sus cercanos colaboradores , y al interior de su gobierno hay algunos personajes , que aparentemente son el poder en la sombra .
3- Lamentablemente la cirugía mayor contra el cáncer que carcome los cimientos de la sociedad , y que es la corrupción , es nada mas que una declaración lírica .
Es muy claro que el cordón umbilical que une a Moreno con Correa, nunca se rompió.