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Que los corruptos no vuelvan a ser candidatos

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Ante la debacle moral que estamos viviendo en la función pública y la clase política, será necesario, para sanearla, evitar que los corruptos postulen para un cargo electivo. Los hechos de corrupción que se destapan a día seguido, no nos ofrecen respiro y están empezando a mermar nuestra autoestima como ecuatorianos, pues el sentimiento de estancamiento y retroceso moral es generalizado. Ya no tenemos en quién confiar. Parecería que de esta pandemia de deshonestidad nadie se salva: ni el sector público ni la política en donde nuestros delegados por voto popular están casi todos salpicados.

El escándalo del uso de los carnés de discapacidad para beneficio personal, se suma a la larga cola de actos reñidos con la ética que empaña la democracia ecuatoriana. No solo constituyen actos dolosos a todas luces sino que también muestra a los involucrados como seres inhumanos que, haciendo uso del poder de su cargo, consiguen un documento que les permite obtener beneficios tributarios, económicos y sociales.

De lo que se sabe, todos los que han usado ese documento –políticos, testaferros y faranduleros– lo han hecho para importar vehículos de alta gama con importantes descuentos y en el afán de sacar pinta y lucir estatus. Perdieron la brújula de la ética y tomaron riesgos, posiblemente con la seguridad de que nunca iban a ser descubiertos. Imaginamos que asimismo estarán aprovechando de todos los demás beneficios que ofrece su supuesta condición.

La ley orgánica de discapacidades señala las condiciones para calificar como personas con discapacidad en el Ecuador y menciona que su objetivo primordial es evitar la discriminación y, así, generar mayor inclusión y equidad para ellos en el país.

No obstante, el proceso para obtener esa calificación es bastante engorroso, demorado y lento, al punto de que,  en ocasiones,  los necesitados terminan renunciando a esa ayuda por la ineficiencia del Estado. Por eso es doblemente cuestionable que con ello se haya configurado un negocio, generando privilegios de forma fraudulenta en perjuicio de los que verdaderamente lo necesitan.

Con esta realidad es impensable que avance el  tratamiento y aprobación de la ley de extinción de dominio. Teniendo a los gatos de despenseros, no habrá voluntad política real de que esto salga, porque se ponen en riesgo los negocios de todos: diezmos, glosas pendientes, reparto de hospitales, puestos y demás. Triste realidad la nuestra.

En este punto, conviene reforzar la presión desde sociedad civil independiente para que se tomen acciones y se investigue. De inicio, los involucrados deberían al menos pedir licencia mientras se hacen las averiguaciones pertinentes y presentan sus descargos: quizás no todos los mentados tienen responsabilidad y deberán probarlo. En todo caso, ya no podemos seguirles confiando el tratamiento de nuestras leyes y de nuestros intereses. Ojalá hubiera aunque sea una voz dentro de la legislatura que responda, en sintonía con el pedido ciudadano, y les pida dar un paso al costado. Pero parece imposible.

Y  a propósito del momento electoral que vivimos, debemos exigir que los corruptos no se vuelvan a postular a un cargo público. Los partidos políticos deben asumir la  responsabilidad y el compromiso ético de no volver a postular, como candidatos suyos, a quienes estén en entredicho en actos reñidos con la legalidad.

Quizás vale la pena recordar que en el año  2018, el Ecuador dio un paso significativo en el referéndum/consulta popular para evitar que los corruptos postulen a cargos políticos y públicos. Cuando dijimos Sí a la pregunta 1 de la consulta, aprobamos que queden inhabilitados de hacer política aquellos que hayan sido condenados por actos de corrupción.

Por eso es importante que la justicia actúe y judicialice los casos, a fin de evitar impunidad. De ese modo, con sentencia condenatoria de por medio, ya no los tendremos de vuelta. Necesitamos urgente un Pacto Ético nacional que impida que los corruptos vuelvan a postular a cargos públicos.

Ruth Hidalgo es directora de Participación Ciudadana y decana de la Escuela de Ciencias Internacionales de la UDLA.

10 Comments

  1. LASTIMOSAMENTE LA CORRUPCIÓN EN ECUADOR ES INEVITABLE, NECESITAMOS LÍDERES QUE NO SE DEJEN LLEVAR POR LAS AMBICIONES DE ESTE MUNDO, NECESITAMOS LÍDERES QUE NO BUSQUEN SU PROPIO BIENESTAR, QUE NO BUSQUEN SU ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO SINO EL BIENESTAR DEL PUEBLO, NECESITAMOS LÍDERES TEMEROSOS DE DIOS, SOLO ASÍ PODREMOS TERMINAR CON LA CORRUPCIÓN.

  2. Ojalá que los corruptos no vuelvan a ser candidatos, caso contrario le volverán a amenazar a que la participación Ciudadana declare nuevamente ” Empate técnico ” a los comisios .

  3. No se cura el cáncer con una curita. El cáncer de la corrupción está en el sistema, son grupos organizados que penetran al Estado y se podría poner fin a este cáncer con una consulta ciudadana que permita las piernas de cadena perpetua y pena de muerte para los corruptos y para el narcotráfico. Así podemos tener un nuevo Ecuador, sano y fuerte.

  4. Estimada Ruth, su error radica en ver el problema desde dentro del bosque y no desde arriba. El bosque está contaminado por la pandemia de la corrupción. Debe ser controlado y fumigado desde afuera, desde el aire. Hay que construir Poder de Honor Ciudadano, por fuera del sistema constituido, para imponer al bosque la cura. Usted tiene el remedio, pero no sabe como aplicarlo. Bueno, ya tiene una pista.

    • El cambio a un nuevo ecuador libre, prospero y seguro viene con el poder ciudadano ; la unica manera de acabar con la corrupcion y con esta banda de corruptos y saqueadores es con el poder, no hay otra manera ; por eso, es la activa participacion ciudadana , El Poder Ciudadano, el que debe llegar al poder y es responsabilidad y conciencia politica de todos los ciudadanos que quieren un nuevo ecuador , libre y prosprero ; en politica solo hay dos clases de personas , los que mandan y los que obedecen , hoy el poder no actua contra la banda que se llevaron decenas de miles de millones y que con el mayor cinismo pretenden retomar el poder , la corrupcion continua , y hay que hay reaccionar , trabajar y organizarse politicamente , para que el poder este en manos de los ciudadanos honestos , es el poder ciudadano ; solo hay cuatro maneras de llegar al poder , hay que trabajar y planificar politicamente , este es el verdadero camino que llevara al pais a , acabar con la corrupcion y con los corruptos .

  5. Hay muchas cosas que tenemos que corregir, sea a través de consulta o constituyente,pero hay que hacerlo ya…si esperamos que los corruptos reciban sentencias sin aún ser sindicados la mayoría, y los que sí lo están, lo mas probable es que los declaren inocentes, seguro que los tendremos de nuevo como candidatos. Con el dinero que han robado, tienen para una buena campaña y disipar alguna en cuanto a los votos en el CNE…Nadie que haya sido elegido para cualquier representación, tampoco que haya ejercido una función pública debe participar en éstas elecciones si queremos ver algún cambio…pero el problema es que la ley la hicieron los corruptos, así que esto sería una cuestión de ética para que los partidos políticos lo apliquen…Ojalá en las consultas que se promueven, se incluya esta propuesta…

  6. LASTIMOSAMENTE LA JUSTICIA ECUATORIANA; ESTA LLENA DE JUECES CORRUPTOS. POR SUPUESTO QUE HAY HONROSAS ESEPCIONES QUE CONFIRMAN LA REGLA. MIENTRAS LA JUSTICIA NO FUNCIONE,TODO VA HA SEGUIR TAL COMO ESTA. HOY TENEMOS QUE SEGUIR PRECIONANDO POR UN CAMBIO DEFINITIVO EN LOS CUADROS QUE PRESENTAN LOS PARTIDOS POLITICOS PARA LOS CARGOS DE ELECCION POPULAR.

  7. Es verdad, un asambleísta sordo ( no oye que le gritan corrupto) ya se ahorró unos dolaritos comprando una herramienta de trabajo No carro de lujo

    • A diferencia de otros artículos de esta inteligente columnista, esta narrativa de hechos no aporta nada nuevo. Hubiera sido deseable que realice un ensayo, con aportes pragmáticos, que ayuden a vislumbrar soluciones a esta pandemia moral.

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