Quizá lo más importante que debe saber quién está interesado en las elecciones de los EEUU, es que si esperaba irse a la cama sabiendo los resultados, muy probablemente se va a llevar una decepción. Esta, como pocas elecciones anteriores, parece que va a ser una jornada larga y muchos expertos piensan que es probable que haya que esperar días hasta saber el resultado final.
La alta probabilidad de que hoy no haya resultados finales, se debe a una excepcionalidad de estas elecciones 2020: el número sin precedentes de votos emitidos por correo, una consecuencia de la pandemia de la covid 19, que ha hecho que sea peligroso hacer largas filas y hacinarse en pequeños habitáculos electorales con extraños. Sus cifras son sin duda impresionantes: para el lunes por la mañana, 61 millones de votos por correo habían sido enviados de vuelta a las juntas de votación y 31 millones estaban todavía por llegar. Si se piensa que en las elecciones del 2016 sólo 8,2 millones de estadounidenses votaron por correo, se entiende la dimensión del fenómeno.
Como hay estados que no permiten contar los votos enviados por correo hasta cerrarse las urnas, se espera que en casos haya que esperar hasta el miércoles para saber los resultados. Hay estados clave, como Pensilvania, que no permiten que se contabilicen esos votos, así que es casi seguro que hoy martes 3 de noviembre no se sabrá quién es el ganador. Estados como Pensilvania, Michigan y Wisconsin, que Trump ganó en el 2016, podrían tomar días, según los expertos, hasta saber qué fue lo que pasó ahí.
Pero también hay ciertos datos que no hay que perder de vista y que pueden ser muy decidores. Según análisis de la radio pública de EEUU, NPR, es muy probable que los resultados de Texas, Carolina del Norte, Florida y Ohio se sepan temprano. Y si Biden gana en una de esas, prácticamente habrá ganado las elecciones. Esta es la única posibilidad de que la gente pueda irse a acostar con un resultado. Si no gana en esos habrá que esperar a Pensilvania y Michigan, algo que seguramente durará al menos un día más.
Pero hay una segunda cosa, independientemente de las encuestas y los posibles resultados, que hay que tener en cuenta para hoy: que no se descarta que Trump se declare ganador en caso de que en la noche vea que está teniendo buenos resultados e interponga, luego, una demanda para que se invaliden los votos que llegaron por correo y no hayan sido contados. Esta posibilidad la puso en evidencia el sitio Axios el lunes 1 de noviembre y, en honor a la verdad, no es ninguna sorpresa: el presidente ha dicho desde hace meses que los votos que no hayan sido contados hasta el cierre de las urnas no son válidos.
Pues bien, una vez hechas estas advertencias, vale la pena pasar al tema de las posibilidades que tienen ambos candidatos. En este tema, sin duda, uno de los que tienen la película más clara es Nate Silver, el más célebre y respetado analista de encuestas y estadísticas electorales que hay en los EEUU, que ha revolucionado los métodos de lectura de las encuestas aplicando estadísticas. ¿Qué dice Silver en su sitio Fivethirtyeight? En un estudio que sacó hoy martes 3 de noviembre, sostiene que Trump tiene 10% posibilidades de ganar pero siempre y cuando sea en los colegios electorales y no por voto popular (algo que ya ocurrió en el 2016 cuando Hillary Clinton tuvo en el país más de tres millones de votos sobre Trump.
Según Silver para entender la fortaleza de Biden hay que comparar las circunstancias con las del 2016, cuando Trump ganó a Hillary Clinton en los colegios electorales. Biden está mucho mejor posicionado que Clinton y que Trump. Su ventaja es más grande que la de Clinton en cada Estado donde la intención de voto es apretada, y más del doble de su ventaja a nivel nacional. “Nuestro modelo pronostica -dice- que Biden ganará el voto popular por 8 puntos porcentuales, más del doble del margen proyectado por Clinton a finales de 2016”.
De hecho, algunas de las dinámicas que permitieron a Trump ganar en 2016 no parecerían existir este año. Hay considerablemente menos votantes indecisos en esta carrera pues sólo el 4,8 por ciento de los votantes dicen que están indecisos o planean votar por candidatos de terceros, en comparación con el 12,5 por ciento a finales de 2016. Y las encuestas han sido considerablemente más estables este año que hace cuatro años. Finalmente, a diferencia del 2016 cuando aparecieron los correos de Clinton filtrados por los rusos días antes de las elecciones y que afectaron seriamente a la candidata demócrata, en el cierre de esta campaña no ha habido ningún hecho parecido. Silver sentencia así la situación: “nuestro pronóstico final tiene a Biden con un 89 por ciento de posibilidades de ganar el Colegio Electoral, comparado con un 10 por ciento de posibilidades para Trump”.
Hay otros pronósticos que son incluso mucho más contundentes. The Economist, por ejemplo, sostiene que Biden tiene 19 de 20 posibilidades de ganar. De su lado, Henry Olsen, columnista del Washington Post y conocido por sus pronósticos, sostiene que Biden ganará cómodamente a menos que los EEUU experimente el mayor fracaso de su sistema electoral de la historia moderna. Los demócratas también ganarán, según dice, el control del Senado y ampliarán su mayoría en la Cámara.
Según Olsen, un presidente llega a ser reelecto únicamente en caso de que durante algún momento de su gestión haya tenido una aprobación alta. Trump, sostiene, es el único presidente de la historia moderna de los EEUU que en ningún momento de su presidencia superó el 50% de aprobación.
En definitiva, hay tres cosas que hay que tomar en cuenta para este día de elecciones. Una: lo más probable es que hoy no se sepa quién es el ganador. Dos: no hay cómo descartar que Trump trate de hacer trampa declarándose ganador antes de que se contabilicen todos los votos enviados por correo en Estados disputados donde los demócratas podrían ganar. Y, tres: el gran favorito es Biden; Trump sí puede ganar pero únicamente en los colegios electorales.
Foto: Wikimedia Commons
Hoy, noviembre 6, las tres cosas a tomar en cuenta, se han cumplido al pie de la letra. Excelente análisis!
Lamentablemente se quiera o no, ganeen los Democratas o ganen los Republicanos, el impacto sobre nuestra región no cambiará, por otro lado, un triunfo de Trump sería el sello final para dar paso a más faltas contra poblaciones minoritarias y vunerables, lo que evidencia un hueo enorme en la democracia más grande e importantes del mundo.
La situación para dar resultados esta difícil , ya que en cada candidato cuenta con una similitud de votos muy parejos, la candidatura esta muy reñida.
Cada periodista y analista político en contra de Trump, se esperaría que el señor Trump no gane,… Sin embargo eso no sucederá , porque es incierto el resultado que se de en realidad.
En EEUU, la votacion no es obligatoria y estas son las primeras elecciones en las que la gente hace fila para votar, porque de ninguna manera permitiran que un titere manejado desde China decida sobre la mas grande Nacion del mundo.
Con tanto periodista y analista político en contra de Trump, se esperaría que el señor Trump no gane,… Sin embargo eso no sucederá.
Pregunta: será que le hizo falta a Trump iniciar una guerra u deportar más gente que Obama para lograr el “apoyo” de estos grupos?
que comentario tan pobre y sesgado a los Democratas que son solo comunistas extremos y que causaron mas colapso de la Economia en EEUU que el mismo virus. Trump no va a ganar por lo que dice, va a ganar porque los Patriotas de EEUU lo apoyan y estan votando por el. En EEUU, la votacion no es obligatoria y estas son las primeras elecciones en las que la gente hace fila para votar, porque de ninguna manera permitiran que un titere manejado desde China decida sobre la mas grande Nacion del mundo. IN GOD WE TRUST
No hay duda, Estados Unidos es el país con mayor, más agudo y extenso nivel de ignoracia.