Olvidemos por un momento el enorme riesgo que un eventual retorno del correísmo al poder implica para la dolarización. Pasemos por alto todas las veces que Correa y el propio Andrés Arauz han expuesto su añoranza de una moneda propia y su intención de dar al Banco Central una función que claramente no le corresponde en el actual sistema monetario: financiar el gasto fiscal mediante la expansión de su balance o, lo que viene a ser lo mismo, de la emisión de ecuadólares (después de lo cual buscarían limitar a la brava las importaciones o evitar que la gente se quede con los dólares de verdad en el colchón).
Olvidemos por un momento el enorme riesgo que un eventual retorno del correísmo al poder implica para la democracia. Hagámonos los locos frente a los atropellos y los abusos de poder del gobierno anterior (algunos de los cuales se muestran en la serie Cabos Sueltos, de Carlos Andrés Vera), finjamos que Arauz nunca dijo eso de que “el pueblo ecuatoriano no debe gobernar solo cuatro años (…), aspiramos a que pueda estar en el gobierno veinte, cincuenta años”. Tratemos de convencernos de que el autoritarismo y la concentración de poderes no afectan a nuestra vida diaria, que los perseguidos, maltratados o encarcelados siempre serán personas lejanas, que algo habrán hecho…
Olvidemos por un momento lo poco que sabemos de Arauz: que fue parte del régimen de Correa hasta el final y nunca se le escuchó criticar algún “error”, como pretende hacer ahora para ganarse a los indecisos; que llegó al Ministerio de Cultura (sin que se le conozca ninguna experiencia en el sector) para firmar un cuestionado contrato que su antecesor se negó a firmar; que al parecer tiene la misma facilidad de Correa para mentir, ejemplo de lo cual es la soltura con la que ha dicho que el Banco Central no administra dinero de los depositantes o que el presidente de Argentina le garantizó más de cuatro millones de vacunas; que, en resumen, no se le conoce ningún mérito para ser candidato a presidente, mucho menos para ocupar ese cargo.
Olvidemos todo eso por un momento. Ahora supongamos que Arauz finalmente gana y, con ese escenario en mente, hagámonos una pregunta sencilla: ¿quiénes conformarían su gabinete? No es una cuestión secundaria. Si bien el presidente lidera el gobierno y es el que toma, en muchos casos, las decisiones finales, se supone que para hacer una gestión exitosa debe estar rodeado de personas competentes en sus respectivas áreas (no un Augusto Espinosa en Educación o una Marcela Aguiñaga en Ambiente o un Javier Ponce en Defensa, para graficarlo mejor). Se espera, además, que esas personas –aunque esto no debería hacer falta aclararlo– no busquen lucrar de su cargo. Las decenas de altos funcionarios del correísmo presos, prófugos o glosados, y otros tantos con una gestión para el olvido, no representan un buen antecedente. ¿Podría Arauz conseguir algo mejor para su gabinete? O en otras palabras: ¿profesionales destacados, con una hoja de vida limpia, estarían dispuestos a jugarse su reputación y hacerse cargo de un ministerio en un gobierno correísta, sabiendo lo que eso significa (sobreprecios, obras fallidas, o lo que Correa cínicamente llamó “acuerdos entre privados”)?
¿Y cuál es el problema de tener un gabinete lleno de corruptos o incompetentes? Pues simplemente que eso quedaría reflejado en las áreas a su cargo (en las que se rodearían de gente igual a ellos). Imaginemos, por ejemplo, a casi cualquier ministro de Correa (que muy probablemente, si no tienen problemas con la ley, formarían parte del gobierno de Arauz) tomando a cargo el ya retrasado programa de vacunación, o el manejo de Petroecuador, o la administración del sector eléctrico (el de las megaobras inconclusas o repletas de fallas). Seguramente tardaríamos algún tiempo en llegar a la situación de Venezuela, que enfrenta un colapso en todos los servicios públicos (incluidas la educación y la salud) y ahora produce menos petróleo que el Ecuador pese a tener reservas infinitamente mayores, o a la de Argentina, que durante el kirchnerismo dejó de ser un exportador neto de energía y pasó a ser deficitario. Pero la dirección sería la misma: cuesta abajo.
Así que dejemos de lado por un momento (aunque no deberíamos hacerlo) la posibilidad de una economía desdolarizada, o la de un régimen dispuesto a todo para no volver a perder el poder e imaginemos cosas tal vez más tangibles: veámonos, por ejemplo, recibiendo una vacuna ineficaz (porque algún funcionario se embolsó lo que costaba mantener la cadena de frío) o haciendo fila para comprar gasolina o sufriendo otra vez apagones frecuentes (como los de 2009, para no ir muy lejos), y preguntémonos: ¿sería una buena decisión confiar la administración de un país ya con bastantes problemas a un personaje como Arauz, con tan pocas probabilidades de conformar un equipo de trabajo medianamente decente?
José Hidalgo Pallares es economista.
Este Lelo atrevido mocoso que no sabe ni donde esta parado y quiere ser presidente que piensa que el pais es para ir a practicar,jamás llegará a ser presidente este Lelo ya trabajo en la decada robada del patrón tirano Cinturón. Si quiere dinero a moler vidrios con el trasero.
MUY BUEN ANALISIS SR HIDALGO. QUIERO HACER UNA RECOMENDACION AL SR LELO ARAUZ, EN CASO DE GANAR LA PRESIDENCIA ´SE RODEE DE BUENOS MINISTROS. DE LOS YA RECOMENDADOS COMO YAKU AL MINISTERIO DE AMBIENTE, PATIÑO MINISTRO DE VALIJAS DIPLOMATICAS, ETC. POR FAVOR SR LELO. AGREGAR A SU LISTA DE MINISTROS AL SR ABDALA BUCARAM. COMO MINISTRO DE SALUD, EXPERTO EN EMBODEGAR MEDICINAS EN SU CASA. NO SE OLVIDE DE JOSE SERRANO. MINISTRO DE GOBIERNO Y POLICIA. EXPERTO EN NEGOCIAR PASES POLICIALES. TODOS ESTOS SEÑORES SON EJEMPLO DE MANOS LIMPIAS.
En un eventual gobierno de Arauz podría ocupar la cartera de economía el Mago Chérrez, ‘experto’ en finanzas de alto vuelo.Su mejor referencia : EL ISSPOL. No sé por qué la policía no manda a guardar a este sinvergüenza,descarado. No digo que le apliquen “el submarino” pero
sí las técnicas más avanzadas para que hable todo lo que tiene que hablar.
Berry ,olvidó al hermano de Rodrigo Borja de embajador en Cuba !
Con un lelo en el poder, el Ecuador vivirá “octubres de terror” en los que “los tira piedras”, los arranchadores, los narcos correistas, se habrán apoderado del Banco Central. En este panorama seguiremos confiando en las fuerzas del orden (Militares y Policías) mantengan su línea de conducta defendiendo el bienestar de la nación y no se conviertan en borregos del lelo.
Confiemos en que la cordura y la inteligencia derrote al lelismo que nos acecha.
Aráuz jamás será Presidente del Ecuador, pero si será el último esfuerzo del Corrupto Correa por volver al poder, así se iniciará la debacle de la Robolución .
Saludos Sr. Hidalgo
Bueno imaginarse, sin embargo. En caso de ganar el Sr. Lasso no habría mayor diferencia, acaso el exministro Martínez no ha sido un fiel servidor de los industriales y la banca de ecuador. Necesitamos más que profesionales, sean personas integras. igualmente el exministro de salud con el aplauso mayoritariio ingresó a su cartera, y ahora tendría el repudio generalizado de los ecuatorianos.
Bueno. como suponen mucho algunos economistas. Ahora supongamos que cualquiera que gane. Gane respetando esta alicaída democracia.
Otro borrego que que seguro piensa que pagar deudas está mal porque “malditos oligarcas”
Esa forma tan boba de pensar fue lo que provocó la crisis económica en Argentina en el 2001.
Si vos querés que el país entre en default allá tú.
Peor aún emisión monetaria sin respaldo es sinónimo de Venezuela
Real , patético y muy didáctico , felicitaciones . Ojalá este mensaje llegue a un importante número de ciudadanos que , increíblemente , todavía no han decidido su voto .
Buen día…pues yo me imagino que el primer decreto del titere improvisado será la inmediata amnistía para todos los PPL, incluidos drogadictos, narcos, corruptos, delincuentes, etc., con esta larga nómina de personajes, faltarían cargos públicos y el país viviría eternamente feliz..colorín..colorado que el lelo está acabado..Saludos.
Supongamos que ganaria Arauz en la segunda vuelta. Al dia siguiente la gente correria a los bancos a sacar dolares billetes y Lenin tendria que declarar un corralito o los bancos empezarian a devolver solo a algunas personas o cobrar comisiones dandose una devaluacion implicita. Empezaria la desdolarizacion.
Lo más probable es que Arauz forme una gran alianza de izquierda con Pachakutik y la ID. En tal caso, el gabinete incluiría a:
– Yaku Pérez y PK: Ambiente, Agricultura, Bienestar Social, Economía Popular y Solidaria
– Xavier Hervas e ID: Comercio, Industria, Pesca, y tal vez el IESS
El resto del gabinete correspondería a gente conocida de AP:
– Guillaume Long: Relaciones exteriores
– José Serrano: Interior
– Augusto Barrera y su grupo (Ximena Ponce, Carlos Páez, Pedro Páez): Salud, Educación, Universidades, Planificación
El punto clave es Economía. Sabiendo como actúa Correa, seguramente buscará a un académico con PhD, que haya sido crítico de la dolarización. De esos hay montones en las universidades y en think tanks.
En resumen, un típico gabinete correísta. Habrá que ver cuánto dura.