El juicio político a Freddy Carrión sacó a la luz algo que en el interior de la Asamblea Nacional no es nuevo: la bancada de Pachakutik está dividida en dos grupos que cada día que pasa caminan a convertirse en irreconciliables y cuya separación podría significar una nueva relación de fuerzas en el legislativo. Por un lado, los radicales que siguen la línea política y doctrinaria de la Conaie, conocidos en la Asamblea como los “con poncho” y, por otro, los más pragmáticos y abiertos a escuchar propuestas del gobierno, denominados los “sin poncho”.
En el juicio a Carrión los 14 más radicales se alinearon con el discurso de Salvador Quishpe que defendió a Carrión y lo llegó a comparar con los héroes que lucharon contra la corona española. Los once más pragmáticos votaron por su censura, no solo porque su compañero Ricardo Vanegas era uno de los interpelantes, sino porque no querían cargar con el desprestigio que significaba salvar a un funcionario que está acusado de agresión sexual.
La tensión entre ambos sectores responde a varios motivos y, en realidad, existe desde el mismo día en que la escogida por Guillermo Lasso para ocupar la Presidencia de la Asamblea fue Guadalupe Llori. Ese día, nació una rivalidad de liderazgo con Salvador Quishpe que sentía que él era quien realmente se merecía ese cargo. Desde entonces, el sector de los “sin poncho” sigue a Llori y los “con poncho” a Quishpe.
Ambos grupos tampoco tienen una visión política en común. Los más radicales se sienten como parte orgánica de la Conaie y están en sintonía con el proyecto político de Leonidas Iza, presidente de esa agrupación. Quishpe, según fuentes de la Asamblea y de Pachakutik, pretende siempre en sus apariciones públicas mostrarse radical e intransigente. Busca disputar también el liderazgo con Leonidas Iza dentro del movimiento. En la ruptura de Pachakutik confluyen varias competencias de liderazgo -dice uno de los asambleístas que conversó con 4P-. Hay que ver lo radical que es Quishpe en público y cuán conciliador es en privado. Además, cuenta que para nadie es desconocido que Llori está en campaña política y que por eso dedica gran parte de su tiempo a recorrer el país. Eso aumenta las tensiones.
Los asambleístas más conciliadores y pragmáticos son los que fueron elegidos gracias a la fuerza de arrastre de la candidatura presidencial de Yaku Pérez, quien no representaba únicamente a las bases del movimiento indígena sino a sectores de la clase media urbana que no comparte el radicalismo de la Conaie. Estos asambleístas que no vienen de la estructura de la Conaie se han dado cuenta de lo poco útil y desgastante que puede ser el el perenne radicalismo.
El choque entre ambos sectores se hizo más evidente que nunca la víspera del juicio a Carrión, cuando se tomó la decisión de votar en bloque por la censura, a pesar de la resistencia de los “de poncho”. Esa noche antes del juicio, hubo una reunión que duró casi seis horas, en la sede de Pachakutik, en la en la que cada uno de los grupos dio sus argumentos para proteger o censurar a Carrión. Ahí se analizaron las pruebas que Ricardo Vanegas iba a presentar para censurar a Carrión y se analizó además todo el contexto político. Por un lado, los partidarios de la censura sostenían que no podían hacerse cargo del desprestigio que representaba jugarse por un funcionario envuelto en un escándalo de violencia sexual ni podían ser inconsecuentes con su compañero Ricardo Vanegas, uno de los interpelantes. En el otro costado veían a Carrión como el promotor del informe sobre las protestas de octubre del 2019 que tan funcional es para el discurso de la Conaie y sus dirigentes que están bajo investigación de la Fiscalía por los actos violentos de entonces. En esa reunión, Quishpe votó por la abstención pero la posición que ganó fue la de censurar a Carrión.
Luego de la reunión, Salvador Quishpe apareció para comunicar a la prensa que habían decidido votar por la censura y con esa noticia se fueron a dormir ese lunes los asambleístas. Los problemas y las dudas, sin embargo, afloraron al día siguiente cuando la Conaie publicó un contundente comunicado de apoyo a Carrión en el que decía que esa organización no estaba de acuerdo con la censura. En la noche, cuando se acercaba la votación ya todos sabían que que Pachakutik se había dividido sobre el tema. El discurso de Quishpe, que fue celebrado alborozadamente por el bloque correísta, cayó como una bomba porque nadie en Pachakutik se imaginó que ese iba a ser el tono y se pensó que no habría los votos suficientes para censurar a Carrrión. Lo ocurrido profundizó más las divisiones. Que el jefe de la bancada de Pachakutik hubiera comparado a Freddy Carrión con Túpac Amaru y Jaime Roldós resintió mucho a quienes vieron aquello como una falta de coherencia y empatía con su compañero Ricardo Vanegas.
El radicalismo ya es visto como un factor desgastante no solo por parte de asambleístas de Pachakutik. También en la Izquierda Democrática se piensa que ahí está, en parte, la explicación de por qué la Asamblea tiene una pésima imagen. Según la más reciente encuesta de Cedatos, la imagen de la Asamblea cayó del 23% al 16% en agosto. Censurar a Carrión, en esas circunstancias, hubiera sido, sin duda, un motivo para contrarrestar esa pésima aceptación.
Foto: Asamblea Nacional
Si se analiza con detenimiento el mismo sentir se ve en las comunidades indígenas y en los gremios de obreros y trabajadores , la gran mayoría ya están cansados de ser manejados como redil cada vez que hay protestas y los obligan a ir a través del chantaje de las juntas de agua, multas y otras medidas coercitivas sin ni siquiera saber por que los obligan a ir. Lo bueno del tiempo que todo pone en su lugar y va desenmascarando el falso liderazgo y la preocupación de quienes dicen defender y representar sin vivir ni sufrir las necesidades de los campesinos ni obreros puesto que toda la vida han vivido “de la dirigencia y la representación” manejando despilfarrando y robando los recursos de los representados al final lo único que se ve es su acomodo su beneficio y sus intereses personales; por lo mismo cada día van perdiendo peso y autoridad tales pícaros vividores y oportunistas “líderes indígenas y sindicales”.
Los liderazgos indígenas son notoriamente pasajeros
En política, entre la tozudez y la idiotez no hay mayor diferencia. No entender lo que es un juicio político a un mal servidor público, y lo que la ciudadanía esperaba de aquello, no tiene presentación, peor justificación.
Y lo peor es que, al Salvador, en las próximas elecciones presidenciales también le darán yu… el esquinazo. Los seguros candidatos serán Iza “el mariate” (x la chicha) para la presidencia y para vice el Tupac amaru (xq ama a las mujeres) Carrión. Al Salvador lo dejarán afuera por “paqui palabra”, no es confiable. Parece que ve mucha peli del “hombre araña” y en la realidad los confunde (debe ser la ayaguashca).
El radicalismo nunca es buena consejera , por lo que la Conaie con su sedicioso Presidente y su actitud beligerante , finalmente quedará sepultada en las urnas , por decisión de la mayoría de ecuatorianos que deseamos paz, trabajo y progreso , no violencia , sedición y confrontación fratricida .
Hay que solicitar, muy comedidamente a Lourdes Tibán, que recoja a los indígenas con poncho y sin poncho, que beben chicha o whisky como Iza o Qhishpe, los lleven a los páramos para que les den un castigo con ortigas para ver si se rehabilitan y piensen como personas sensatas. Cómo van a votar a favor de un energúmeno que falta el respeto a las mujeres y dice ser defensor del pueblo?
Veamos, esto podría despresurizar un eventual acuerdo entre el gobierno y la asamblea. Si ID y media PK tienen motivo para alejarse del correismo y del correismo con poncho entonces podría ser menos imposible impulsar reformas críticas. Pero habrá que ver, la mayoría de asambleístas no son más que ratas que buscan su oportunidad de morder el queso de la refrigeradora. Y como siempre, también habrá que tomar en cuenta a las organizaciones de tarados que ondean la bandera con la cara del asesino confeso Ernesto Guevara cuya revolución fue volver a Cuba una isla cárcel junto con los Castro.
Es increíble pensar que los más “ cojudos “ se dejen manejar por los más “ sapos “.
Bueno, de la ignorancia a los que leen un poco más, es mucha la diferencia, por eso son llamados los “ levanta manos “.
No nos dejemos sorprender por quienes quieren convertir su estupido modo de vida, en un grito de independencia.
Es hora de abrir los ojos y endurecer la mollera, por lo menos eso lo demuestra el lado de los indígenas, quienes no piensan más en la colonia, pero en un futuro mejor, a base de sacrificio y esfuerzo, son gente digna y de respeto, se volvieron capitalistas, más el otro lado, por el echo de seguiré pensando en la colonia, viven en la mierda, manejados por un grupo de ladrones, quienes no tienen interés tanto en estudios como progreso, y son COMONISTA.
Este artículo de 4pelagatos, demuestra fielmente la gran diferencia de los sapos y los más pensantes.
Los unos actuaron conscientemente para sacarle al abusador sexual, mientras los otros pretenden tapar sus fechorías, especialmente quienes tienen problemas con el fisco.
Comúnmente dicen, entre lagartos no se comen, acá podría decir, entre ladrones no se delatan.
Si Ricardo Vanegas sintió falta de coherencia y empatía por parte de Quisphe, debieron llevarle a comer y se le pasaba… como buen militante roldosista que fue en el pasado
Lo preocupante es que priman los intereses particulares y de grupos, dejando de lado el problema de la patria que necesita unidad coherencia para salir de la grave crisis económica, política, y de la corrupción etc ec.
Defender a Carrión no es radicalismo. Es torpeza.